Torni Segarra

Seleccionar página
Pero, ¿por qué quieres huir de los hechos? El hecho es que la raíz de todo el daño, de todo mal, es la división y el conflicto, ¿eso queda claro? Por tanto cómo voy a ayudarte a ti que estás mal por mi causa, porque mi conflicto interno hace que haga las cosas inadecuadamente, que sea egoísta? Eso no tiene sentido.
Por tanto, si quiero ayudarte a ti, primero tengo que poder hacerlo adecuadamente. Y mientras esté en conflicto, dividido internamente sólo será un resolver tu problema inadecuadamente. Por lo que ya estamos como siempre dentro del círculo girando sin ningún sentido, repitiendo siempre lo mismo.
Empecemos, ¿tú quiere ayudar a las personas, sí o no? Si dices que no, todo termina ahí. Pero si dices que sí, lo has de hacer adecuadamente. Porque si no lo haces adecuadamente, seguirá la desdicha que quieres evitar en los demás. Pero para que la desdicha tuya cese, primero ha de cesar la mía, porque yo quiero ayudarte. Si no, todo es absurdo, sin sentido. Que es lo que está sucediendo: los violentos quieren poner paz y acabar con la violencia. Pero ellos no acaban con su violencia. Por tanto, todo es un juego de niños, una pantomima para seguir en el poder como siempre.