Martín, estamos tratando de hilar lo más fino que podamos. Si no cómo crees que llegaríamos a lo profundo de lo que nos pasa. Si tú me pides un vaso de agua, ¿cómo puedo responderte que trataré darte agua porque estoy viendo la televisión, o leyendo, o estando con el ordenador?
Si a ti te roban la cartera donde llevas el dinero para comprar comida o ropa, ¿eso es un hecho incuestionable, o es algo que podamos decir que es una ilusión?
El pensamiento está condicionado de manera para resolver problemas. Por eso, todo cambio lo ve como un problema. Esto es debido por el miedo que tiene de perder esa seguridad que conoce, que le da placer -aunque esa seguridad es falsa, es una ilusión-.
Por tanto, cuando ve el condicionamiento del pensamiento, es cuando lo puede entender e ir más allá del miedo al cambio, a lo no conocido.
Cuando eres nacionalista, lloras ante la bandera porque te emocionas, cuando tienes abundantes dinero en los bancos, eso hace daño a los otros. Y los otros que hacen lo mismo te hacen diaño a ti. ¿Por qué empiezan las guerras entre dos países vecinos, porque los dos son nacionalistas, crean fronteras, tiene sus banderas, sus himnos, sus historias de héroes. Y todo eso nos emociona, ya seamos ignorantes o no. Y de ahí a la agresión y la guerra no hay nada. Por tanto, el que uno sea indolente -que no responda al dolor-, eso ya es hacer daño a los demás.
¿Cómo podemos ser sensibles, y no indolentes, para hacer que todo ese daño que provocamos cese? El exceso de trabajo, embota la mente, estar siempre viéndose con las mismas personas nos resta sensibilidad, estar aferrado a una idea o teoría, sea la que sea, también nos hace torpes y ciegos. El hecho de no responder a un reto, que puede ser el pisar o no pisar un caracol o una hormiga, eso es un reto al que nos hemos de enfrentar, si es queremos ser sensibles, capaces de ver muy en lo profundo y no arañar en la superficie de los problemas.
¿Es posible enamorarse de una pareja, que sea tan diferente que nos haga sufrir? Eso no se ve. Porque, cuando nos enamoramos es porque vemos en esa persona algo que también es nuestro que nos conforta: los colores de la ropa que lleva, la manera de comer y lo que come, si es maleducada o no, si esa persona encajaría entre la familia con la que aún convivo. Por tanto, parece ser que el egoísmo, disfrazado, de cariño y lisonjas, es el que determina la elección. Por eso, uno cuando elige una mujer o un hombre, ellos han de tener bastante de los padres. Cuanto más se parezcan, más confortable será la relación.
Y aunque en todo esto parezca que haya algo de racismo, de castas, etc., esto es así. Porque el hombre es un adicto al placer, odia al dolor. Y lo que más nos resta el placer, es lo desconocido. Es por eso, que la mayoría son conservadores, van de lo conocido a lo conocido.
Entonces, ¿dónde está el problema, si uno tiene sed y te pide un vaso de agua?
"¿Cuál fue entonces el comienzo de toda materia? La existencia que se multiplicó por el puro placer de ser, y se sumergió en innumerables trillones de formas, para poder encontrarse innumerables veces".
No hay respuesta. Porque cualquier respuesta, al final puede ser como no puede ser. Nos tenemos que acostumbrar a que todo no se puede saber, Por eso, esto que acabo de decir, también entra dentro de lo incorrecto. Es el pensamiento deseoso de solucionar problemas, el que los crea e inventa, porque en todo ve un problema. El silencio es tan sabio como un trillón de palabras.
“A la hora de elegir pareja, es simple química cerebral y aprendizaje socializado”.
Y mucho misterio, que por mucha técnica, palabras, estudios, etc., siempre hay algo que se escapa. El pensamiento, Enghelbertb, está programado para resolver problemas. Y cuando no resuelve problemas, se aburre y le falta cumplir con su programación, por lo que en todo ve un problema.
En todo conflicto entre dos personas o más, son las dos partes las responsables. Decir que solamente una parte es la responsable, es lo que está sucediendo desde siempre. La guerra es eso: yo me erijo en juez y parte y decreto que la otra parte es la culpable de todos mis problemas. Y de la única manera que los puedo resolver es lanzándole bombas, destruyendo todo lo que tiene, amatándole.
Y este paradigma tan poco inteligente, es el que perdura desde hace millones de años. Ahora somos nosotros los que hemos de responder a ese reto de estupidez, de ignorancia, que cree que solamente es el culpable el otro. La solución depende de cada uno, pues ha de empezar por descartar y no hacer su guerra particular interna y externa.
El reto es inmenso, por lo que necesitamos abundante energía. ¿De dónde sacaremos toda esa energía que se necesita para responder a ese reto de la guerra? Toda la energía infinita está ahí para que la podamos usar. Solamente se necesita para que llegue, que no estemos ni divididos ni en conflicto.
Cuando vivimos un momento mágico, no lo podemos transportar para describirlo, fotografiarlo, pintarlo. Ese momento que uno ha sentido y vivido es solamente de él. Y nadie puede llegar a su punto de la experiencia de belleza y de gozo. Porque eso es personal de cada uno. Y es cada uno el que lo ha de sentir de primera mano.
¿Otro maestro más? ¿A cuántos vamos a necesitar? Los maestros también nunca se terminan, puedes encontrarlos en Occidente, en Oriente, en América, en Australia. Pero, el único y verdadero maestro está dentro de ti.
¿Quién nos va a dar la llave para abrir la puerta para que entre la luz, para ver lo real y no lo imaginario? Nadie te la va a dar ni construir. Solamente tú, has de hacer lo que tengas que hacer para construir la llave que te lleve a lo nuevo. Lo nuevo, que está más allá de la corrupción, que es la división y el conflicto interno. Que al salir y exteriorizarse, va convertir la vida en el infierno que se ha convertido: la ignorancia que da permiso para hacer todas las barbaridades en nombre de la ley, en nombre de un falso orden egoísta y cruel.
Vamos a aclarar lo de la cartera: si te roban la cartera y no tienes dinero para poner gasolina al coche para volver a tu casa, porque ya es de noche y tienes que dormir, para al día siguiente estar fresco para poder trabajar adecuadamente, ¿eso es un hecho o una alucinación? No digas que no es un hecho porque ahora estamos ante los ordenadores. Porque entonces, de esa manera tan infantil de no saber leer con inteligencia, descubriendo lo que hay detrás de las palabras, bloquea toda investigación y toda comunicación. Por lo que estamos atascados, clavados en el suelo como un poste.