Torni Segarra

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1. Todas las intenciones por buenas y loables que nos parezcan a la hora de hacer algo, si no van respaldadas por los hechos, por nuestras acciones, no sirven de nada. Ya que todo será una superstición, una creencia, algo que conseguir en un futuro remoto. Cuando todo lo verdadero, lo que tiene orden, es desde el principio, desde el mismo momento en que empezamos a hacerlo. ¿Estás de acuerdo, lo ves, Patricia?
 
2. La esperanza es engañosa, es una ilusión, un sueño a conseguir. ¿Y qué esperanza nos espera sino más de eso que somos ahora? Somos nuestro pasado, que es nuestro condicionamiento heredado de los que nos han precedido, nuestros antepasados, somos la cultura de donde hemos nacido y crecido, del ambiente familiar, somos lo que comemos, leemos, el trabajo que hacemos. Y todo eso es lo que hace que esperemos algún acontecimiento que nos saque de la rutina y repetición en la que vivimos.
Pero para eso, para salir de la rutina y la repetición, hemos de morir a todo eso que somos, el condicionamiento. Y ese morir a todo lo que somos, ese descartar radicalmente todo lo negativo que somos, sólo puede ser ahora, en este preciso instante. Y entonces, todo eso de la espera, de la esperanza, de lo que queramos que venga, no tiene ningún sentido ni valor.
No lo aceptes, Eva, indaga, investiga, para ver la verdad de ello, y entonces eso será tuyo y nadie te lo podrá arrebatar.
 
3. Si lloramos por lo que hemos perdido, por el pasado, si lloramos por el que se ha muerto, si lloramos por el sufrimiento, ¿esos lloros no son en realidad por nosotros mismos, por lo desgraciados que nos sentimos, ya que hemos de asumir las consecuencias de lo que hemos perdido, de lo nuevo e imprevisto que llega tras la muerte para los que seguimos aquí en la vida?
Así que, con esos hechos que nos llegan hemos de ver qué hacemos con ellos, cómo respondemos, ver la toda la verdad que hay en ellos, aprender de ellos. Para poder ser así, una luz para sí mismo y para todos los demás.
 
4. Alex, ¿podrías explicar eso de que ‘El árbol que más frutos da es al más piedras le tiran’? Gracias.
 
5. Negar lo evidente tiene el problema que es, ¿qué es lo evidente que hay que negar? Porque para ti, Alex, lo que tú ves como negativo de una manera evidente, para otro no lo es. Así que, ahora lo evidente es lo que cada cual cree que lo es. Por tanto, eso quiere decir que el conflicto está ahí servido, está en nosotros. Por eso, cuando vemos algo que es evidente, hemos de ser conscientes que eso nos va a dividir de los demás. Y habiendo visto que eso que yo veo tan claro y evidente, puede generar conflicto con los demás, no lo impongo, ni hago de eso un dogma, una creencia.
 
6. El amor ni se compra ni se vende ni se quita a nadie. El amor es la inteligencia es su máxima expresión, y él sabe lo que tiene que hacer. Nosotros sólo podemos tener la puerta abierta  por si él ha de entrar.
 
7. Por eso, soñar, anhelar, la esperanza, las ilusiones, para conseguir algo ya sea sagrado o no, no tienen ningún valor real. Sólo es un juego de la mente y su invento que es el ‘yo’, para huir del miedo y la desesperación de la incertidumbre del futuro, y también del pasado, del presente que hace de puente entre ambos.
Y por eso, es que le damos tanta importancia al tener, al poseer, al retener, a lo nuestro como si fuera verdaderamente nuestro cuando no lo es, ya que en cualquier momento puede desaparecer.  Ya sean los objetos, las propiedades, las personas.
 
8. Todos decimos lo mismo, cada uno según sus peculiaridades. Pero todos quieren a alguien que les de amor, compañía, seguridad, el placer sexual, hijos. Por eso, todos somos iguales. Y si tú te conoces a ti completamente cómo funcionas, también conoces como funciona toda la humanidad. Así de sencillo, Beatriz.
 
9. Cuando decimos que algo es nuestro, ahí están los celos de los demás. Porque si tú, Gaby,  dices: ‘Yo tengo mi belleza, mi imagen de una mujer extraordinariamente atractiva, yo me lo he trabajado, etc.’ Eso va a provocar en los demás celos y envidias. Porque eso no es verdad, no es del todo cierto. Ya que tú para ser extraordinariamente bella y atractiva, muchos otros han tenido que cooperar para eso. Pues uno solo no puede hacer nada, ya que necesita de los demás para que le construyan la casa o el apartamento, el coche y el petróleo que viene de lejos, los que construyen los aviones, necesitamos a los que nos proporcionan los alimentos para poder subsistir.
Y aunque todo eso que necesitamos, no le damos importancia, si fallara y no llegara a nosotros, nos destruiríamos tal y como somos ahora, ya que no podríamos subsistir.
 
10. Lo más triste y peligroso es estar completamente lleno de mundanalidad. Es decir, no estar completamente vacío, ser la nada.
 
11. Querer a la antigua y como se quiere en la actualidad, es lo mismo. Es una ilusión creer que en el pasado todo iba mejor. Siempre ha habido violencia y guerra, lo cual no tiene nada de cariño, ni de afecto, ni de querer a los demás, de tener amor. Pues el amor siempre es lo mismo: o uno ama o no ama. Y eso no admite indagación e interpretación. O uno quiere a alguien, sea quien sea,  o no le quiere.
 
12. Eso tiene su explicación, pues cuando nos abrimos, abrimos la puerta completamente, todos los que tienen hambre de eso que se da, van a intentar entrar. Ya que la necesidad, que siempre es un hecho, es lo que más energía nos da.
 
13. Lo más natural es morirse. Y ya está. Pero si se quiere saber las causas, todo se va a complicar, porque el pasado también está muerto. Y todo lo que se diga, nunca va a ser la realidad. Pues la realidad es viva, dinámica, cambiante de instante a instante.
 
14. La nada es muy limitada para investigarla. Pero es la totalidad del vacío y del universo.
 
15. ¿El amor, el cariño, el afecto por alguien se puede disimular, ocultar, o está a la vista de todos para los saben ver?