1. Sé de qué hablas, Enghelbert. Eso mismo que dices, también sucede cuando usamos el coche mucho, cuando escribimos en los teclados del ordenador, o contando los billetes de dinero en la mano, como lo hacen los banqueros que están en la caja. Todo eso es muy eficiente, pero tiene mucho de rutina, como si fuéramos robots. El problema es que si nos habituamos a conducir el coche de esa manera, mirando a los lados, a la guantera para sacar algo, cambiar un CD, todo ello rápidamente y automatizado, teóricamente hay muchas más posibilidades de tener un percance.
Y cuando lo hacemos durante un tiempo, nos hacemos adictos a esa manera de proceder. De tal manera, que cuando no actuamos así nos aburrimos, no estamos a gusto. Y eso también pasa con el comer, que lo hacemos realmente tragando los alimentos. No sé si es mejor o no lo es. Cada uno que actúe de la manera que más le convenga, sabiendo a lo que se expone en cualquiera de las dos posibilidades: la rápida y automatizada, o la más lenta y pausada, siendo conscientes de cada paso que damos, de todo lo que hacemos.
Definitivamente, todo está en el motivo, lo que queremos, al optar por una de las dos actitudes. Si los motivos son la excitación del más y más, del acumular, del placer de correr, de la vanidad, de ganar tiempo, etc., eso va a traer malas consecuencias. Pues, si vamos muy rápidos es preciso que la brutalidad, la crueldad aparezcan. Si tú atiendes a unas personas y vas muy rápido, y ellas no, te cogen por un loco, alguien que va desesperado por la vida. Y precisamente, los médicos, y lo que tienen un trabajo de contacto directo con las personas –oficinistas, abogados, jueces, enfermeros, celadores de edificios públicos, etc.-, saben que la mayoría de las personas normales y sencillas, ni corren ni pueden correr. Primero, ¿por qué, a dónde tienen que ir con esas prisas? Y segundo, ¿para qué correr si no quieren ser ricos ni poderosos ni triunfadores, si no quieren ser lo que son?
Creo que nos estamos comunicando, entendiendo, ¿no?
2. Eso que dices, Vicky, yo no lo sé, porque los relatos de unos a otros, puede que no sea lo real. Pero, si partimos de que todas las mentes están unidas, unas a otras, es preciso que haya una relación entre ellas. Es decir, lo que tú piensas de mí, y yo de ti, de una manera o de otra nos llega a cada uno. Eso quiere decir, que si no hay una resistencia -¿puede haberla?- mental, todo ha de venir caprichosamente –incontrolablemente, irresistiblemente- a nuestras mentes. Por tanto, una mente única libre de ser afectada por las otras mentes eso parece imposible.
O sea, puede alguien no tener nunca en toda su vida ‘yo’. Vale decir, no tener compasión ni moral, ni miedo -estar más allá del bien y del mal-, ni sentido de la belleza, ni gusto para elegir los alimentos más sabrosos, ni sentir cuando uno es cruel nada que lo frene y detenga. ¿Entiendes, de lo que se trata? ¿Se trata de una fiera, un animal, o de un ser humano?
3. Para Jean-Pierre Filiu, historiador, abrabista, catedrático de Sciences Po en París.
Acabo de leer tu entrevista hoy en el diario… Gracias por la información y las respuestas.
Las revoluciones, como las recientes árabes, ¿surgen espontáneas o son provocadas por el establishment –EEUU, Europa, y su OTAN, acompañadas por la ONU-¿ Has hecho un repaso por todos los países, pero te has dejado precisamente las que son sospechas de que el establishment no quiere que los toquen. Volvamos a hacer un repaso: Bahréin, Arabia Saudita, Kuwait, Jordania, Omán, los Emiratos Árabes Unidos. Todos estos países son monarquías -¿feudales?- y resulta que los que dominan el mundo les encantan las monarquías, porque todas actúan con los mismos intereses que esos dominantes –EEUU, Europa, OTAN-ONU-. Resulta que en Bahréin, es donde recala la flota de barcos de EEUU en la zona, que es su base naval. Arabia Saudita y su petróleo, les encanta a esos amigos suyos, aunque sean crueles, salvajes, subvencionen a grupos integristas, etc. De Jordania, ya sabes que es como un perro faldero. Yemen, se ha quedado como un país fantasma, donde los drones de EEUU han lanzado bombas y proyectiles cuando lo han creído oportuno, aunque el régimen es el mismo con diferentes caras.
Quiénes han sufrido la tormenta, la anarquía, golpes de estado encubiertos, las revueltas, las violencias asesinas, crueles y vergonzantes como todas las revoluciones triunfadoras –que son igual de crueles que el régimen que quieren derrocar, porque asesinan y matan todo lo que pueden para poder vencer o defenderse, que al final es lo mismo-. Los más apestosos, ingobernables, cuestionadores de todo el establishment, los enemigos insoportables que ellos por sí solos no se atrevían derrocar por intereses varios. En definitiva, en un mundo donde los que manda son los fachas de derechas, los países donde ha triunfado la revolución árabe reciente, ha sido en los más izquierdistas. Hasta en Libia, la OTAN, estuvo bombardeando cincuenta o sesenta días ciudades, carreteras, hospitales, escuelas, fábricas, cuarteles, etc., es decir estuvo haciendo la guerra a favor de los revoltosos, que generaban la anarquía y el desorden, la violencia y las matanzas. Cosa inaudita en unos países ‘serios’, ‘educados’, ‘civilizados’, ‘defensores de la paz y el orden’, etc.
Pregunta: ¿Salen las revoluciones espontáneamente o son provocadas por los que mandan en el mundo, el establishment? Eso es muy fácil de saber, cuando los principales periódicos, las televisiones, etc., se ponen contra un país todos a una –sacando todo lo malo del país que quieren derrocar y ensalzando la violencia, la anarquía y las revueltas del que quiere que gane- ese está condenado a perder ante los poderosos.
No estoy a favor de nadie, y por tanto, no estoy en contra de nadie. Sólo estoy describiendo la realidad.
4. Sí, Vicky, los animales tienen un condicionamiento psicológico elemental. Los gatos y los perros, que tenemos, están condicionados a estar aferrado a su dueño, que cuida de él, le da de comer, lo tiene en su casa. Y aunque sea un maltratador, seguirá con él.
En realidad, entre un animal y nosotros solamente hay una diferencia de planos o niveles psicológicos. Porque todas las mentes actúan como unas grabadoras. Y también todas responden a su condicionamiento. Un gusano está condicionado a vivir como puede bajo tierra, allí tiene que vivir y hacer lo necesario para que así sea, aparearse para reproducir la vida. Nadie se escapa.
5. Es verdad que somos como los animales en casi todo. Si tienes un perro y va a tu habitación cuando estás durmiendo, él quiere estar cerca de ti y subirá a la cama para conseguirlo. El dueño puede decirle que se marché, sin conseguirlo. Por lo que lo saca obligándolo, pero el perro volverá a intentarlo. Porque los animales también tienen miedo y quieren la compañía de alguien. Y eso sucede también con los gatos, los canarios, los patos, las gallinas, los cerdos, los caballos, cuando ven a una persona que no les va a hacer ningún daño, ellos se sienten a gusto, felices, juguetones.
Las personas también necesitamos compañía, el contacto humano –unos más que otros, pero todos dentro de nosotros lo queremos- o de un animal.