Lo único que existe es la conciencia y la percepción de lo que sucede, de lo que está pasando.
¿Quiénes dicen que es lo que está de moda, son los industriales del comercio textil, del diseño, los vendedores, las grandes marcas? Para mí la moda es lo último que sale a la venta, con todas las ventajas y comodidades de los últimos avances, sin que sea chabacano ni carnavalero.
La moda es un invento de los vendedores, diseñadores, industriales, etc., que excitan a las personas para que se compren nuevas prendas. Y como los que más compran son los ricos, y por eso van siempre a la moda, todos los demás tan imitadores y esnobs, hacen lo mismo. Desencadenando las victim fashion -víctimas de la última moda-, que es tan nocivo como cualquier otro vicio.
Hola Verg.
Aquí el sol, y su calor pegajoso -el mar está a cinco kilómetros y el pueblo está rodeado por arrozales con su Albufera haciendo todo un parque natural-, ya está en su fase final. Solamente hace falta que estuviera unas tres horas lloviendo y el calor quedaría muy calmado. Espero que te hayas repuesto de tus alteraciones primaverales.
En cuanto a todo lo que se dice, no es lo real. Lo real es tan radical como la muerte. Uno puede decir te amo, pero eso no tiene ningún valor. Por eso, hemos de ser prudentes a la hora de usar las palabras. Y para ello, hemos de ser reflexivos, no superficiales. Porque la corriente de la vulgaridad es tan poderosa que nos arrastra. Y por eso, es que los hechos es lo que realmente importa. Aunque los hechos cada cual sabe cómo son, así que ahí hay que mirar y ser honesto.
Cuando vamos más allá del ‘yo’, que es la ignorancia, todo tiene sentido, pues está ahí el orden.
No existe nada de lo que nos llega, los retos, que no sea una prueba dramática, transcendental para poder conocernos realmente quienes somos.
Cuando estamos comiendo y vemos que alguien nos está mirando, diciéndonos que él no puede comer, ¿qué es lo que sucede en nosotros?
Vano es querer generar belleza desde fuera, pues ella se genera desde dentro con acciones, nuestra manera de encarar los retos de la vida.
¿Por qué nos gusta crear mitos, personajes especiales que en realidad no lo son tanto como creemos? Es por la pobreza interna, por lo poca cosa que somos, que necesitamos a otros que los convertimos en muletas para poder proseguir.
“Vivimos de ilusiones y nos ahogamos en recuerdos. ¡Qué raro no!”. ¿Por qué es que estamos tan distraídos con las cosas superficiales, la imagen, la ropa, mis propios y vulgares problemas –pues tenemos los mismos-, etc.? Es porque vivimos en desorden, que necesitamos de los recuerdos, vivir en el pasado, o proyectar en el futuro. Y de esa manera nunca vivimos en el presente, en el ahora, que es donde está la dicha, el orden.
La voluntad de vivir es el miedo al dolor que tenemos. Miedo a perder lo único que sabemos que somos: nuestra existencia. Y la existencia tiene sus exigencias y necesidades, desde donde nace la voluntad de vivir. Es decir, gestionar la vida de manera que no suframos ni física ni psíquicamente.
Creerse diferentes de los demás, es la ilusión en que estamos atrapados. Pues todos compartimos los mismos problemas de ignorancia, de fantasías, que generan nuestro ego, nuestro ‘yo’. Pero, el ego es la parte que no puede ser si no vive del pasado, de los recuerdos depositados en la memoria desde hace un millón de años. Y es este pasado tan tremendo, tan grande es el que obstruye al presente, al ahora. Y el pasado, es creerse que el ego, el ‘yo’, es diferente, especial, único. Y por eso, es que vivimos divididos, enfrentados, en conflicto.
Para ser felices hemos de llevar una vida sin corrupción ni inmortalidad. De lo contrario gastaremos nuestra energía, nuestras vidas, en proyectos, en negocios, en métodos y prácticas. Pero, aunque ganemos todo el mundo, triunfemos, no podrá haber felicidad verdadera alguna, mientras seamos corruptos e inmorales.
La persona que se va y no regresa es porque no nos conviene. Y entonces es cuando se manifiesta el orden, que está más allá de nuestros mezquinos deseos.
Jugarse la vida por vanidad, excitación, exhibicionismo, para deshacernos del tedio, el aburrimiento, ¿qué sentido tiene? Es porque vivimos en desorden, que nuestros deseos son confusos, desordenados, generadores de caos y desgracias.
Los hombres dicen lo mismo, pero al revés: si la mujer quiere, el hombre puede ser un genio en sus manos, cuando toca y hace el amor.
¿Por qué creemos que los hombres son diferentes de las mujeres si hacen exactamente lo mismo: intentar hacer las cosas bien? Pero, como las personas somos quiero pero no puedo, entonces nos dedicamos a mentir y a destruirnos unos a otros.