Torni Segarra

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1. Querer a alguien no es solamente amarle incondicionalmente. Sino amar lo bueno en él, no su suciedad y su miseria, tanto física como psicológica.
La tolerancia no es inteligencia, porque lo que es, no es preciso que se sea tolerante con ello. La tolerancia es con lo que no es, con el error, lo inadecuado, lo negativo para la vida.
 
2. Lo que hacen los bancos, es lo mismo que hacen los países con los otros países más atrasados, menos desarrollados. Están endeudados con esos países ricos, que desarrollan todos los avances: en medicina, en maquinaria, en ingeniería, en los armamentos de última generación para hacer la guerra.
Esto es así, como consecuencia del paradigma del egoísmo: tener miedo, tener miedo a todo y a todos los demás. Por tanto, es cada uno el que tiene, que verlo y comprenderlo e ir más allá de ese egoísmo, que es el que ha provocado esta sociedad con su manera de vivir cruel, corrupta e inmoral, sin sensibilidad, indolente.
 
3. Todo lo que hay en la tierra y en el universo, es todo, participa de ese todo. Por tanto, creer que uno es más que otro, es ignorancia, no tiene nada que ver con la religión. Por eso, como no queremos seguir el paradigma del universo, de que todos somos igual, unidos indivisiblemente, es por lo que hemos creado esta manera tan confusa, violenta, inmoral de vivir, en que la vanidad, el exhibicionismo, el ‘yo’, es nuestro estilo cotidiano.
Cuando más se adora a un solo hombre, por santo y bueno que se diga que es, es cuanto menos religioso somos. Y entonces nos convertimos en paganos, idolatras, pedigüeños, seguidores repetitivos, inválidos e ignorantes.
 
4. Los gobiernos llamados soberanos, están desbordados por las grandes corporaciones, viven como rehenes por el miedo de deslocalización de las empresas. Pues estos grandes grupos amenazan de llevar a sus fábricas, negocios, capitales, etc., a otros países donde les dan las ventajas que ellos dicen que necesitan. Por lo que los gobiernos con la presión y el miedo al paro, se han convertido en marionetas.
Por otra parte, las consecuencias de toda esta deslocalización de los negocios, está repercutiendo en los empleos, pues se hacen precarios, baratos, explotadores e injustos. ¿Qué se puede hacer ante esta situación de desajuste, de desorden y confusión del actual establishment? Sólo ser honesto, no corrupto ni inmoral. Para que ese caos no nos afecte y nos dañe nuestra vida. Pues el caos está ahí, en nosotros, en cada uno. Y mientras uno no esté en orden, la sociedad no va a tener orden.
 
5. El tiempo, como llegar a ser, como devenir, es un impedimento para ser buenas personas. Pues ese deseo de ser buenas personas, nos aísla y divide de los demás. Para ser buena persona, ni optimista ni pesimista, uno ha de estar más allá de la división y el conflicto que genera, entre lo que es -la realidad- y lo que me justaría que fuera -otra realidad que más me gusta y satisface-.
 
6. "Los medicamentos son para la carne. Pero la fe en la Palabra del Espíritu: es la curación para el alma".
Eso es cierto. Pero si lo haces en tu vida, puede que pierdas unos años de tu existencia. ¿Podrías hacerlo sin amargura, resentimiento, tristeza y desolación por ver que mueres antes que los otros que sí que toman medicamentos, van al hospital, etc.?
 
7. Hay una pregunta: ¿Por qué las autoridades científica, gubernamentales, de los países que tienen más poder, y por eso más información -Rusia, China, EEUU- no lo informan, haciendo unos documentales como hacen con cada rincón de la tierra donde hay tribus en las selvas, donde se enseña cómo viven los animales, etc.?
 
8. Otra pregunta: Si es verdad que esos objetos son OVNIS. ¿Por qué no contactan con nosotros para explicarnos todo lo que son y lo que hacen? Pues, si no lo hacen –no contactan- parecen poco inteligentes e incapaces de enfrenarse a al reto de contactar con los terrícolas. Ya sea por miedo a contraer nuestras enfermedades o por miedo a que los destrocemos, o a destrozarnos ellos a nosotros. Pero de una manera o de otra, serían muy similares a nosotros incapaces de hacer lo que está más allá de sus posibilidades por miedo y temor, por prudencia.
 
9. Drona. Si tú no creyeras, ¿estarías ahí escribiendo y proporcionándonos material informativo de lo que a ti te gusta? Y lo mismo te ocurre con el pensar -que dices que no lo haces-. ¿Cómo puede no pensar una persona tan analítica y complicada como tú, tan necesita de nuevas experiencias?
 
10. Si estás limpio, sin nada que temer, ¿qué importa que nos controlen o no? El que tiene miedo de algo, cuando sale de su casa mira alrededor desconfiado en busca de que pudiera haber alguien esperándolo. Pero el que no teme, cuando ve a una persona es un motivo de gozo y alegría.
 
11. Gracias, Evan. Todo eso y más aún. Faltan los fracasados, los desesperados, los no triunfadores, los que consideramos malvados, nuestros enemigos. Porque todo, es todo sin exclusión alguna.
 
12. He leído tu entrevista de ayer en el diario… Gracias por tus informaciones y comentarios.
El problema de las crisis económicas, como tú, Göran, bien dices, está en que gastamos más de lo que puede nuestra economía. Entonces, habrá que ir a ese por qué de querer gastar más dinero que el que tenemos. Cada uno es como es. Unos son bajos y otros altos, delgados o gruesos, extrovertidos o introvertidos. Y todos hemos de funcionar. Pero, ¿por qué en lo económico existe ese problema de querer todos igualarnos?
Es porque tenemos miedo. Y el miedo siempre es por comparación con algo que es más o es menos. Si uno ve que su vecino va de viaje en vacaciones, él también quiere ir, si un amigo se compra en coche nuevo, el último modelo, él también lo quiere comprar. ¿Por qué esa comparación tan estúpida, tan poco realista, si sabemos que nunca seremos como el rico, el poderoso, ya sea una persona, un país? Aquí como en toda ignorancia, hay una trampa: que es ver la parte superficial de eso que nos halaga y queremos, pero no vemos la parte que nos desagrada. Pues el rico y poderoso, ha de tener mas actividad que el que tiene menos, ha de ser más descarado y corrupto y por tanto tener más preocupaciones. Y siempre estar vigilante ante los que le quieren quitar eso que tanto lo cuesta de acumular.
Y eso es lo que les pasa a los países también: los más ricos y poderosos son los que más gastan en policías y en ejército. Son los más ladrones, corruptos e inmorales. Y por tanto, los que más conflictos, pleitos y disputas tienen con los demás países, sean vecinos o no.
¿Por qué no explicáis todo esto desde los gobiernos, en las escuelas, en los pueblos y municipios, en los institutos y universidades? No lo hacemos porque tenemos miedo de ser menos que nuestro vecino, ya sea que esté al lado o a miles de kilómetros.