A veces cuando miramos a otro lado sin buscar nada, si somos afortunados, aparece esa maravilla que todo lo transforma: el amor.
Para estar libre de la mente no ha de forzarla, dominarla, disciplinarla. Pues, todo eso genera contradicción, fricción, conflicto. La mente ha de ser libre mirando todo lo que le llega: viendo cómo nace, se desarrolla y llega a su fin, cada pensamiento. Sin huir, sin querer cambiarlo ni rechazarlo, solamente ver lo que está sucediendo. Y es de esa manera que la mente, al no estar dividida de sí misma, tiene inteligencia, tiene amor.
La cuestión es: ¿Cómo sé si al inicio de una depresión, tanto física como psíquica, la preponderancia es del cuerpo o de la mente? Al principio no lo podemos saber, luego con el tiempo el cuerpo pierde vitalidad y puede pasar a ser el desencadenante de la depresión, al verse en ese estado de postración e inutilidad. Así que, el principio y el final de todo no lo podemos saber: ¿Quién cura, las medicinas –incluidos los médicos, psiquiatras, etc.-, porque uno quiere curarse, o es un misterio, un capricho de la vida el que uno se cure o no?
Todo viene de la nada, seamos conscientes o no (la nada como lo desconocido, donde la mente no puede acceder). Así que, somos nada y hemos de vivir con esa nada. Y si lo comprendemos es cuando nos damos cuenta de la inutilidad de los conceptos, las ideas y teorías, como ‘yo’ y ‘tú’, nosotros’ y ‘ellos’, como el nacionalismo, las religiones, las prácticas mentales y corporales, etc.
Así que todo viene de la nada (la incomprensión desde el principio hasta el final, última) y vuelve a esa nada.
Esa expresión: ‘Hay gente que no se merece estar aquí’. ¿Significa qué nosotros sí que somos merecedores de estar aquí, significa que somos racistas crueles, significa que somos superiores? Algunos otros superiores a nosotros podrían decir lo mismo. Y entonces, la espiral de la crueldad, de la eliminación de los que no son como nosotros, se convierte en una dinámica macabra y asesina.
Pero, si descubrimos que toda esta actitud racista y cruel, es debido a la división interna, que nos hace insensibles, entonces llegará el orden que es compasión y es amor, es decir, la inteligencia operando.
En la semilla ya está el árbol. Y antes de la semilla ya hay algo que hace posible la semilla. Y así sucesivamente sin fin. Por eso, todo es un misterio al que no podemos acceder ni ver como vemos estas letras, lo que estamos leyendo. Y de ahí es desde donde nace la religión: ver la impotencia para enfrentarse a los eventos que nos llegan, etc. Donde el miedo ante esa imposibilidad, fue el que hizo que inventáramos a dios, las religiones, etc.
La religión, la espiritualidad, es el intento de poner orden en la vida –estar libre del dolor-, primero conociéndonos y poniendo orden en la nuestra. Pero, como eso es tan difícil, es tan arduo, la religión se ha convertido en un sistema de escrituras, libros, de ritos, preceptos y liturgias, de superstición y fanatismo, etc., por lo que se ha convertido en un negocio, en una venta y una compra de eso que ofrece.
Por supuesto que las mujeres no son una idea preconcebida. Ahora las que os sentís como mujeres lo tenéis que demostrar. Porque decir algo, exponerlo, sin darle una solución, ¿qué sentido tiene eso?
Es como si te digo, lloro porque me aprieta el zapato y siento dolor, pero no me lo quito.
Hay otro problema y es que esa relación tan desequilibrada, entre una mujer con sesenta años menos con el que se quiere casar, destroce al anciano en una semana. Y se vuelva completamente loco por el ritmo tan frenético de su joven amiga, con respeto al anciano.
Sí, se puede descartar a la familia, no eliminarla, si no quieres. Al igual que la mosca que molesta se la descarta.
¿Por qué damos siempre la culpa de todo lo que nos sucede al otro? Todo conflicto, toda pérdida siempre es la consecuencia de un mal entendimiento entre dos o más personas. Es una simpleza auto excluirse de la responsabilidad de los malos resultados.
Cuando ayudamos a alguien sin que nos lo pidan, eso es cosa de nosotros y nada más que nosotros. Nadie ayuda por nada. Pues al final está el placer que sacamos por ayudar, sentirnos dignos, respetables,
Creerse ser un poco mejor que ayer, es una ilusión Pues para ser mejor (correcto y adecuado) uno tiene que estar siempre atento a todo lo que sucede dentro y fuera de nosotros, para poder descartar lo negativo. Como eso no puede ser. Entonces, cuando me doy cuenta que estoy inatento, es cuando vuelvo a estar atento.
¿Podemos transformarnos de verdad? Me temo que no. Más bien, uno ha de ver qué es, quién es, asumirlo e ir más allá de ello.
Si eres completamente libre para querer y odiar, ese caos te va a llevar al orden.
Amate a ti y me amarás a mí. Todo empieza por uno. Porque si no eres capaz de amarte a ti, ¿cómo me vas a amar a mí?
Todos queremos no estar solos. Nos sienta mal la soledad. Pero, uno no puede deshacerse de la soledad, ni de las cosas feas, ni de la vejez ni del dolor, ni del daño que nos hacen los otros. Así que hemos de vivir con ello. E ir más allá de todo ello.