Torni Segarra

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2032. ¿Quiénes provocan esas carencias alimentarias, sanitarias, farmacéuticas, etc.? Los que quieren derrocar a un gobierno, lo quieren asfixiar de la manera que puedan. Y una de ellas, es bloquearle lo más elemental que se necesita para sobrevivir.

Y así, se genera el desorden, la anarquía, el caos, los asaltos a los supermercados, a las tiendas, etc., convirtiéndose la ciudadanía en ladrones, salteadores, forajidos. Cada vez, más difíciles de controlar, apaciguar, más difíciles de volver al orden. Pues la violencia, se hace cotidiana, y los muertos también.

 

 

2033. Eso que es tan evidente -la mafia de los ricos, de los poderosos- es lo que esconden a esos ignorantes -que en el fondo sólo son pobres egoístas, con ganas de jarana y anarquía-. Lo difícil es desvelar esa ignorancia, para que se vea de manera que los que no la ven, o no la quieren ver, sean retados y rechacen esas mafias de multimillonarios, ricos, poderosos, corruptos, inmorales.

Por lo que, todo se reduce a un odio racial a personas y sus maneras. Porque, sólo quieren lo superficial, lo banal: ganar abundante dinero, para vivir caprichosamente. Y claro, eso es lo que quiere la mafia de los ricos, capitalistas que están enloquecidos con sus propiedades. Y que el dinero rueda a raudales. Sin importarles el dolor y el sufrimiento, las muertes que generan. Al causar la injusticia, la brutalidad, la crueldad, la pobreza, la miseria, el hambre, las enfermedades, las desgracias.

 

 

2034. Lo más espantoso es que, ese terrorismo, que está activo desde hace tantos años, la Unión Europea, los Estados Unidos, los países ricos, no lo ven como terrorismo. Y cierran los ojos a esos actos terroristas, y sus maldades que generan muertes, sufrimiento, horror, desorden, anarquía. Porque ese terrorismo, va a favor de su capitalismo, inmoral, ladrón, corrupto. Y que así, pueda proseguir, como siempre lo ha hecho: explotando, robando, maltratando a los pobres, indiferentemente como si fueran animales.

Si esos actos terroristas, acaecieran en sus países el mundo se acabaría para los autores de ese terrorismo. Los cazarían como animales por tierra, mar y aire. ¿No ven cómo las gastan con los terroristas que van contra ellos? 

 

 

2035. ¿Hay alguien que tenga dudas de lo negativo, lo pernicioso, de lo aberrante del centralismo?: querer dirigir desde quinientos kilómetros, un organismo, un aeropuerto internacional.

¿Por qué a ese nacionalismo centralista, cazurro español, retrógrado, las personas lo siguen votando? ¿Tanto cretino hay, que van en contra del raciocinio, la lógica, la verdad y la realidad de lo que es la vida, la libertad total para ser autónomo, independiente para vivir?

Pues esos nacionalistas centralistas españoles, son los que tienen en sus manos el que esa falta de racionalidad, se torne en inteligencia. Y así, es como habrá paz, no enfrentamientos, conflictos, agravios, humillaciones, ladronerías.

 

 

2036. Esa pregunta sobre si se está a favor o en contra de algo, ¿no demuestra lo superficiales, lo banales, que somos? Uno puede tener simpatía o no por algo. Pero estar en contra de algo, eso es estúpido, no tiene sentido. Pues a pesar de mi simpatía o antipatía a algo, los hechos, lo que es, la realidad, no se puede cambiar.

Todo en la vida, puede ser saludable, bueno, o dañino. Dependen de nuestra capacidad e inteligencia para captar esa realidad que no se puede alterar. El turismo, es favorable cuando no es masificado. Pero cuando llegan en tropel, se genera confusión, desorden, caos.

Y de ahí, es cuando los corruptos inmorales, que sólo quieren ganar abundante dinero, actúan al margen de la ley. Creando más caos. Es decir, haciendo las cosas para que vengan más turistas, mimarlos, consentirles todas las barbaridades, estupideces, indignidades.

¿Alguno de ustedes, ha vivido entre turistas, como vecinos, que se creen que tienen libertad para hacer lo que les dé la gana, porque siempre están de fiesta, de naciones, de viaje? 

 

 

2037. No hay que dimitir a nadie. Lo que hay que hacer es subsanar esa aberración, que es dirigir una institución, un aeropuerto, desde quinientos kilómetros de distancia. Como si los que viven donde está ese organismo, ese aeropuerto, fueran idiotas, estúpidos, cretinos, que no son capaces de hacer nada.

Y por eso, se inventan que hay unos que sí son capaces de hacerlo desde tanta distancia. Lo que quiere decir, que todo ese asunto huele mal. Huele a corrupto, a inmoral, a una invasión de las competencias, a deseos inhumanos, generadores de humillación, indignidad, conflictos.

Pero parece ser, que nos gusta esa manera de vivir, generando conflictos, división, enfrentamientos, violencia, guerra. Aunque luego, después, cuando llegan las matanzas, lloran como los niños. Pero no lloran por la estupidez, nuestra estupidez.

 

Pues nos creemos que somos los mejores, los elegidos por una mano divina. Cuando en realidad, damos pena por los estúpidos, subdesarrollados que somos.