1824. Los poderos, lo que les falta es sensibilidad. Pues, sin sensibilidad, no tendrán empatía, serán indiferentes al dolor que genera su manera desordena de vivir, que genera anarquía. Ellos, que tanto están en contra de la anarquía, son los que la generan. Pues, la injusticia, los privilegios, la casta, ha de provocar la respuesta de los que lo sufren.
1825. Las personas, embobadas, manejadas por los intereses inconfesables, son manejadas como un rebaño de animales. Pues, quieren imponer una manera de vivir que no es imposible.
Y por eso, parecen inquisidores, dictadores para imponer su fantasía. Eso sí, cuando les conviene, porque quieren destruir al otro. Cuando ellos en la intimidad, dicen y hacen lo mismo: ser hombres, natural, sencillamente.
1826. Toca los pies en el suelo, baja de la nube. Sólo tal vez. O como todas las policías. La vanidad te puede. O es que quieres sacar algún beneficio de ello. O.es que estás blanqueando alguna fechoría.
Tú lo sabes, Sergio. Pues sabes de ese oficio. Que es como cualquier otro, al servicio de las personas. Aunque, los que mandan lo manejan para conseguir sus intereses.
1827. Eso es una ilusión, infantil, irreal. Nada más hemos de vernos cómo somos internamente: unos contra otros, siempre queremos ganar para no ser vencidos, morir. El acto completamente blanco, perfectamente bondadoso, amoroso, no existe. Pues, para que vivan unos, han de morir otros. Así que, hemos de vivir con eso, comprenderlo, sin convertirnos en neuróticos, amargados.
1828. Esa histeria colectiva, de agresividad, brutalidad, crueldad, ¿no es motivada por lo superficiales que somos, ignorantes? Pues, nuestra actual manera de vivir, siempre generará ese drama de las matanzas.
La diferencia está, en cómo se tratan esos dramas por parte de la autoridad y los medios de comunicación social, que aceptan esta manera de vivir corrupta, inmoral -prensa, periódicos, TV, radio, etc.-. Ya que estos, si les conviene provocan aún más esa histeria desenfrenada de odio. Y convierten ese drama en chivo expiatorio, como si solo hubiera un culpable de los dramas.
1829. Lo más peligroso que hay, es creer que sólo hay una persona culpable de lo que ha hecho, por espeluznante que sea lo que ha hecho. Porque, esos que reaccionan con todo el odio contra alguien, que ha hecho algo muy grave -matar a otro-. También son capaces de generar tanto odio, que podrían linchar, asesinar a golpes a esos que han hecho eso tan grave.
Y tampoco serían responsables, ya que ese odio que experimentan no lo pueden descartar. Porque, es como un gran fuego. ¿Podemos evitar llegar a esos extremos de odio, de celos, de envidia, que son la causa de todo asesinato, de toda maldad?
1830. El verbo secuestrar, ¿es un sinónimo de quitar, robar? También es un ideal egoísta, porque lo que secuestramos lo queremos sólo para nosotros. Otro verbo, negativo, es prohibir: que es reprimir, excluir, dividir las cosas entre buenas y malas.
La felicidad que es amor, todo lo abarca, disfruta. Porque, no ve ni siente el mal ni el bien. Si no, que actúa, hace lo que tiene que hacer.
1831. No tienes vergüenza de que una institución como el Tribunal Europeo de Derechos Humanos del Consejo de Europa. No tenga al alcance de las personas, una dirección de correo electrónico, ni de tú ni de la Corte.
¿Así deseas solucionar los problemas de los Derechos Humanos? Haces como todos los políticos, corruptos, inmorales. Formáis parte, de la misma mafia.
1832. Tanto que siempre han dicho que aman la libertad -aunque eso sólo lo quieren los pobres, los marginados, no la monarquía, sus condes, marqueses, etc.- y ya quieren cerrar un canal de televisión. Por eso, son falsos, mentirosos, ladrones -que han robado por todo el mundo, cuando eran los dueños de su imperio-.
1833. La salvación -si la hay- no está en autodestruirse el cuerpo, nadie. La salvación, está en poner orden en nuestras vidas; es decir, lo que hacemos. El orden, es actuar de manera que genere el menor desorden posible. O sea, descartando lo negativo, el desorden, lo que queda es el orden, lo positivo.
1834. Todo lo que sucede es porque somos seres humanos. Y a éstos, no se les puede pedir más. No hay más cera que la que arde.
También podemos decir, que la culpa es del creador. Que nos ha hecho tan imperfectos; hasta el extremo de sentir dolor.
1835. Por supuesto, todo lo que hace el hombre, es propio de lo que es. Es preciso, porque nosotros somos como robots que han de obedecer a su programación.
¿Puede un robot rebelarse de verdad? Porque eso que llamamos rebelión, también forma parte de su programación.