Mes de Junio
Escritos y publicaciones 2-6-2012
Recuerda que existe el infinito. Y todo avance es infinito también. Por tanto, por mucho que caminemos, investiguemos y avancemos, siempre habrá algo más que descubrir. Y si no somos conscientes y entendemos todo eso hacia donde nos lleva, nos hacemos amargados y neuróticos. Pues al final todo parece absurdo.
Pero, si vivimos mirando y observando, gozando de todo lo que existe, sin deseo alguno de forzar las situaciones, sin la ansiedad por el más y más, todo cambia. Entonces uno no vive solamente para descubrir avances, sino que cuando llegan son bienvenidos. La vida si no tiene un sentido de belleza, no vale la pena ser vivida. Y la belleza solamente puede llegar cuando uno es vulnerable porque no persigue nada, no tiene la brutalidad ni la crueldad que genera el deseo de conseguir algo, por bueno y beneficioso que nos parezca.
He leído tu entrevista de hoy en el diario…
Gracias por las informaciones tan sensibles y sensatas.
Una pregunta: ¿Qué le parece la tortura y asesinato violento de los toros por placer y diversión festivalera, con el consentimiento de todas las autoridades y subvencionada económicamente por ellas?
También usted, que tiene una cierta autoridad moral, social y económica, podría incidir ante todos los insensibles que dicen, como justificación de su brutalidad y crueldad, que los toros no sufren, ni sienten el dolor de la tortura. Pero, todo pierde su sentido cuando les decimos: si una persona tiene que cuidar desde los muebles, su coche, su ropa, el televisor, el ordenador, etc., sin hacerles ningún daño que les hagas perder su valor, ¿cómo puede hacer heridas -como una carnicería- a un animal, maltratarlo y destrozarlo, romperlo y hacerlo feo? Es la brutalidad y la crueldad que tienen dentro, por algún problema psicológico, porque no pueden tener la sensibilidad suficiente para tratar con afecto y con cariño todo lo que es, más aún todo lo que tiene vida.
Para Françoise Hollande.
Acabo de leer en un diario de hoy que tú no descartas una acción militar en Siria en el marco de la ONU. Y ya empiezas a querer hacer la guerra, a gastarte el dinero en invasiones y asesinatos como lo hizo el anterior presidente. Seguramente, pronto te harán una huelga los pobres que ven como las prestaciones sociales disminuyen, como la crisis se ensaña con ellos. Pero para hacer guerras, donde se asesinan a personas inocentes, siempre hay dinero.
Te pregunto: ¿No hay más opciones que invadir otro país con todo el caos, el horror y el odio que genera? ¿No te acuerdas de Irak, que ha sido completamente destruido moralmente, socialmente, políticamente? ¿Cuántos muertos provocaron esa invasión, igual que todas las invasiones: un millón, dos, tres millones de personas? Más los lisiados, los inválidos, los desgarradores dolores.
Por eso, tanto da que gane y gobierne la izquierda como la derecha, pues las dos son guerreras, violentas y asesinas. Siempre defendiendo a los ricos y a los poderosos, sin importarles el dinero que se gastan en defender el establishment. Y todo eso genera división, enfrentamientos, conflictos, violencia y más guerras. Pero parece ser que a vosotros los políticos os gusta vivir de esa manera.
Gracias, Max. La misma situación de siempre que se repite. Los que molestan se les aísla, bloquea y se provoca un incendio para que lo devore todo. Luego a apoderarse del país.
He sabido de ti al leer la prensa de hoy, donde figura la información de tu charla, ‘França: Front de Gauche, una nova experiència unitaria’.
Uno se pregunta para qué hay diversos partidos políticos si todos básicamente son iguales. Esta mañana, he leído en un diario la información que decía que el actual presidente, recién elegido, de Francia no descartaba un intervención militar en Siria. ¿Qué diferencia hay entre el anterior presidente Sarkozy y el actual Hollande? No hay ninguna en lo concerniente a sus maneras de solucionar los problemas: los dos son guerreros, aceptan la violencia y la guerra, lo que quiere decir que son insensibles, brutales y crueles. Dicen que no tienen dinero para los servicios sociales, pero sí que los tienen para mantener los ejércitos.
Si tienes algo que encuentras que sería interesante comentarlo e investigarlo, exponlo y lo intentaremos. Todo es muy sencillo cuando se ve y entiende. Es muy importante la atención que le prestamos a eso que queremos entender. Pues la atención es la llave que nos abre la capacidad de entendimiento, la inteligencia.
Has huido del hecho, de la respuesta, Lizbeth. Volvamos a la pregunta: si la muerte y la vida son dos hechos que se suceden el uno al otro, y si esa sucesión la aceleramos al máximo, ¿qué quedaría, predominaría una sobre la otra, estarían parejas paritarias? Vamos a ponerlo de otra manera: si la luz y la oscuridad, que es como la muerte y la vida, se confunden las dos, ¿qué queda, la mezcla de las dos, no? Y el resultado sería lo mismo que es ahora: la sucesión de los fenómenos físicos, pero muchísimo más rápido. Porque las leyes físicas no se pueden colapsar, de lo contrario sería el caos y la destrucción total. Y esa misma destrucción también obedece a las leyes tanto químicas como físicas.
Y entonces, ahora sólo nos queda la consciencia. La conciencia que llega y se va. Y la conciencia si que es el misterio que no podemos comprender. Es como si una hormiga quisiera comprender por qué las personas las pisan, las aplastan, las destruyen cuando remueven la tierra para hacer sus cosas para poder sobrevivir.
Hay muchos factores que nos condicionan: donde nacemos, nuestros padres y familia, la religión, el clima, la economía, etc. Pero no podemos decir que una es la que lo determina todo. India es muy religiosa, según se dice, pero la miseria está por todas partes. Y eso quiere decir desorden y suciedad, confusión, la total y absoluta falta de moralidad, que se traduce en indolencia.
Lo que importa no es lo que somos. Sino lo qué hacemos con eso que somos, es decir lo que tenemos entre manos, que es nuestra situación o nuestro destino.
Hola Yanet. ¿A qué se debe el que me vuelvas a hacer administrador siendo como ya están las personas adecuadas? ¿O, es qué hay algo que no capto, algo que no me entero? Si eres tan amable, si quieres, lo podrías explicar. Gracias.
Yanet, acabo de ver que Max está como administrador, con Contentoxnada y tú también. Antes de escribirte el último texto en el que te pedía los motivos por haberme incluido como administrador, también estaba Max. Y por eso, no sabía a qué obedecía el incluirme a mí. Creo que con Max y con tú y Contentoxnada ya está bien atendido el grupo. A mí ahora no me viene bien. Pues tengo otros asuntos que me reclaman mi dedicación. Así que, si no es preciso no seré administrador. En el grupo si que creo que es adecuado estar, pero de esa manera hay más libertad para hacer otras cosas.
Si quieres, me lo informas explicando claramente lo que está sucediendo.
Lo malo de la educación y la cultura es que también es transportadora de lo todo lo negativo de los que planifican y hacen los programas educacionales. Allá donde el hombre más desarrollado, culto y educado ha ido, también ha llegado con él toda su confusión y desorden. Pero, lo más desafortunado es que esas personas sencillas y humildes si se vieran en la misma tesitura de ser enseñantes y educadores, también condicionarían en los demás la maldad que todos llevamos dentro. Por eso, lo realmente importante no es lo que uno sabe, la cultura y lo intelectual que es, lo importante es estar libre -comprendiéndolo- de conflicto que es el generador de la maldad, que se manifiesta en envidia, celos, insensibilidad e indolencia ante las desdichas de los demás.
Escritos y publicaciones, 6-6-2012
Comprender el pensamiento, para comprender el "yo". Y así poder ir más allá de ese "yo", que es división y conflicto.
La mente tiene la capacidad de autonarcotizarse. Actualmente la música moderna repite y repite constantemente y sin parar las mismas tonalidades que hacen que uno se olvide de quien es y desaparezca el ego, el "yo" momentáneamente. Los católicos tienen sus repeticiones interminables para aquietar la mente, son palabras y frases bonitas. Y todas las religiones organizadas tienen su producto tranquilizador.
Pero, eso no es la solución al problema de la inquietud, de la soledad y el vacío existencial. Porque esas oraciones, plegarias, mantras, etc., funcionan por medio de la superstición, de la creencia y la fe ciega. Y por la esencia de las cosas, como no son un hecho, siempre están al albur de la realidad y la verdad, que es lo que nos hace ver lo negativo y descartarlo.
Podemos describirlo todo con bonitas palabras, hablar de ello interminablemente, invocar otras realidades como la maravilla del átomo que resuena con si vibración, etc. Pero, finalmente lo que importa es lo que somos y lo que hacemos con nuestras vidas. Y, hagamos lo que hagamos, si estamos divididos internamente nada tiene sentido. Pues todo se convierte en una distracción y entretenimiento, por mucho que quieran darle importancia y transcendencia. Y aferrarse a algo, por sagrado y bueno que nos parezca, nos fragmenta y nos divide internamente. Que por la fuerza de los hechos, esa división ha de exteriorizarse y generar todo el desorden y confusión que hay en todas partes donde uno vaya.
La realidad última está más allá de lo que digamos o no digamos. Porque todo lo que se ha dicho y se dice, tiene el mismo propósito de acomodar nuestra seguridad, que es en definitiva nuestro "yo".
Pero, eso que dices, Cheryl, son sólo palabras. Porque, ¿existe realmente el amor? Porque el amor para que sea hay que ser toda una unidad. ¿Existe realmente la no-división ni el conflicto? ¿O son todo ilusiones de lo que debería ser, huyendo de la vaguedad de la existencia que nos resulta insoportable?
Solamente queda y está ahí la percepción, la conciencia. Y esta percepción no se pregunta: ¿quién está ahí para aceptar o negar esto? Porque es todo tan profundo que el pensamiento convencional que es el "yo" no puede operar.
Cuando uno es sensible y ve lo que es la realidad entonces todo cambia. Ya no ve verdugos culpables ni víctimas. Sino que lo ve todo como una unidad, en la que todo está relacionado indivisiblemente. ¿Qué hubiera pasado si Judas no hubiera vendido y traicionado a Jesús, para que así siguiera con todo el proceso hasta su muerte? Y así con todos los que participaron en su vida. Y esa actitud de buscar siempre culpables, es porque vivimos divididos, fragmentados internamente. No somos religiosos en absoluto. Pues la religión es vivir la unidad interna que se manifiesta en lo externo, en todo lo que es la vida.
Puede alguien que ha ido más allá de la división interna generar los problemas para que llegue la tragedia a su vida. Y si llega, ¿la ve él como una tragedia, como parece ser que nos gusta verlo nosotros? A Jesús nadie lo entendió y por eso es que han inventado el cristianismo, el catolicismo, etc., con su Vaticano y su burocracia palaciega, con su absoluta falta de libertad, con su discriminación de las personas por su sexo y condición, con su jerarquía rígida y antidemocrática.
Por tanto, cuando hablan quejándose de los mártires, de los perseguidos por ser religiosos, etc., -que los hay en todas las religiones a miles, a millones-, es que siguen divididos sin entender lo que es la vida, ni entienden la realidad, lo que es, la verdad.
¿Qué les parecería si una mujer bien compuesta, con su vestimenta provocativa, etc., se quejara que los hombres allá donde la ven la miran libidinosamente, se quieren acercar a ella y acosarla con las miradas, la siguen y se atreven a hablar con ella sin conocerla de nada? ¿Qué dirían? Seguro que dirían que es una provocadora, que tendría que guardar la compostura para que los hombres no se excitaran con su vestimenta y actitud tan erótica. Ahora la pregunta: ¿Se puede eso cambiar, si o no?
No se puede cambiar porque los seres humanos somos así, estamos compuestos y condicionados con el paradigma psicológico para triunfar sobre la muerte. Y eso quiere decir ganar en cualquier ámbito de la vida, ya sea en el fútbol, en mi nacionalismo que lo considero adecuado y noble aunque genere y causa una guerra, en mi superstición y vulgaridad, en la pareja, en los estudios y carreras para ser el mejor, el más astuto y obstinado para tener más información.
Por tanto, toda nuestra vida es una división, donde vemos enemigos en todo lo que nos rodea, desde las hormigas, los insectos, los pájaros, el frío y la calor, toda la naturaleza se ha convertido en un enemigo a batir -cosa que casi ya hemos conseguido-. Y esa misma lucha la hemos llevado al ámbito psicológico, por lo que hemos inventado el ‘yo’ y el ‘tú’, el ‘nosotros’ y el ‘ellos’. Y así, somos tan ignorantes y estúpidos, que siguiendo con esa división, nos creemos especiales, dignos de hacer lo que hacemos y que los otros nos tienen que soportar, aceptar y ser nuestros vasallos. Pero esa estupidez lleva al dolor y a la amargura, como la realidad nos lo demuestra a todas horas, a cada momento.
La iluminación es la unión con la totalidad. Así, la manera como se llega a ella no es lo importante. Cada uno tiene sus maneras, que los otros tal vez nunca comprenderán ni aprobarán. Pero eso para la verdad, que es la iluminación, no le importa. Porque ella siempre ha sido y siempre lo será.
Ahora lo que hace falta es que uno se ilumine. Cosa que no es posible saber si uno está o no lo está iluminado, realizado, liberado. Porque, ¿quién dice que uno está iluminado o no? Eso no es como sacarse el título de ingeniero o economista. Así pues, cada uno lo tiene que descubrir por sí mismo.
He leído tu entrevista de hoy en….
Gracias por las informaciones y tus comentarios.
¿No crees que todas las civilizaciones, ya sean antiguas como las modernas, tienen algo de bueno y de no tan bueno? Por ello, no hay que cargar sólo en lo bueno, también hay que decir sus miserias para que nadie se sienta engañado.
Los animales viven su propia naturaleza, pero es la que les toca en su nivel de evolución. Dentro de un millón de años, ¿cómo serán los actuales animales? Por tanto, cada cosa que existe tiene su propio desarrollo físico, social y psicológico.
"El agua en un recipiente es brillante, el agua en el mar es oscura. La verdad pequeña tiene palabras que sean claras. La gran verdad tiene un gran silencio".
Pero la verdad está más allá de toda dimensión, ya sea clara o oscura, pequeña o grande, de palabras o sin ellas. Y el silencio puede estar en el lugar más ruidoso, activo y revuelto. Porque el silencio está dentro de uno y es independiente de las circunstancias externas.
“Llene los espacios en blanco: Siempre he pensado que la iluminación significa…”
La verdad, la iluminación, está más allá de llenar o no los espacios en blanco. La iluminación no tiene significado y sí que lo tiene. Porque lo abarca todo.
¿Podemos no ser afectos por nada que suceda, ya sea un problema, una enfermedad, un contratiempo, una pérdida, la edad, lo que sea, y estar más allá de todo eso para que no nos quite esa dicha de vivir, ese sentido de estar con la vida plenamente, en todo lo que ella es?
Nosotros no somos niños y nos vienen pensamientos de todas clases, ya sean agradables y placenteros como horribles y detestables. Pero, afortunadamente, sólo son pensamientos. Así que por horribles que los veamos, dejemos que sean desde que se originan hasta que se extingan. Y así la relación será lo nuevo, nada que tenga que ver con el pasado y los pensamientos.
Escritos y publicaciones, 7-6-2012
Uta. Los árboles no pueden decidir si se van o no porque viene la lluvia y no quieren mojarse, o porque no hay agua y tienen que ir a buscarla para satisfacer sus necesidades de beber. Los animales y las personas, sí que podemos optar ir a algún sitio a buscar alimento y agua, sí que podemos buscar un sitio donde poder estar a salvo de la lluvia o de una tormenta de viento.
Lo único que es igual para todos es que el fin del conflicto interno nos trae la tranquilidad y el orden. Cuando uno vive en conflicto ve enemigos por todas partes, siempre se prepara para estar fuerte y listo para hacer la guerra. Y siempre encuentra motivos para la contienda, pues los motivos para hacer la guerra son infinitos. Pero lo maravilloso es que los motivos para no hacer la guerra también son infinitos. Así que, en algunas cosas superficiales si que somos diferentes, pero con respecto a lo esencial, a lo verdadero, a la compasión y al amor, todos sentimos lo mismo. Algunos dicen que tienen amor, pero sus hechos y actitudes no lo son. Por eso, por nuestras obras es como nos pueden conocer. No por lo que decimos.
¿Crees que esta crisis es una crisis especial, como nunca antes ha habido? Primero que nada toda crisis, ya sea económica, política, etc., es la consecuencia y obedece a otra crisis interna y psicológica. Porque el problema que tenemos no está fuera, ya sea en la política, la religión, entre los jóvenes y los mayores, entre esposos, entre parientes, sino que es la consecuencia del conflicto interno.
Mientras no resolvamos nuestra crisis interna, todo va a seguir como siempre hemos existido: divididos y enfrentados, en contienda, entre los diferentes nacionalismos, entre pobres y ricos, entre cada uno de nosotros con otro. Y toda está división genera insensibilidad ante lo que es la vida, las personas, y así no vemos realmente lo que es el sufrimiento y el dolor.
Creemos que hemos venido a la vida a divertirnos, a llevar una vida de placer, con sus eventos hedonistas. Y creemos que si no tenemos el placer es por culpa de otro. Y, es entonces cuando llega la miseria, al tratar a los otros como si no fueran humanos, a despreciarlos, a tratarlos como esclavos para que trabajen con sueldos ridículos. Para así, tener un mayor beneficio para que me aporte más placer. Pero, el placer lleva consigo el dolor. Y ahí empieza y termina todo el misterio de las crisis.
Por tanto, tú tienes que resolver la crisis que siempre tenemos. Porque nadie te la puede resolver. La crisis quiere decir: la soledad, la precariedad de querer y no poder, del miedo al futuro y al pasado, del miedo a no poder estar libre de ese miedo. Porque, hasta que no vivamos no divididos y sin conflicto, seguiremos siendo dañinos por ver que la crisis no desaparece, dando la culpa a los demás. Y el otro haciendo lo mismo: buscar un culpable, pero que no seamos nosotros. Cuando es justo al revés: el problema soy yo, lo que hago, cómo vivo.
¿Puedes al menos entenderlo, DK?
La naturaleza humana es incorregible, ¿con respecto a qué? Si tenemos un plan prestablecido de lo que tiene que ser la vida de las personas, entonces son incorregibles. Si no hay plan prestablecido, no habrá ningún problema. Porque no tener ningún plan de nada, es la liberación.
"Cuando está en silencio, se habla. Cuando se habla, no dice nada".
Eso es una tontería. Porque cuando hablas, si es como debe ser, sí que tiene sentido y transcendencia. Y al revés, si te calles forzado auto-reprimido, dividido, te sale mal.
Las personas necesitamos ayuda, porque somos desafortunados y perezosos. No tenemos la suficiente energía para encarar el reto de la vida, nos gusta más invertir nuestras fuerzas en diversiones , después de largas jornadas de trabajo. Pero el resultado es que así vamos a remolque detrás de los psicólogos y psiquiatras, detrás de los que dicen que saben, algún gurú de moda, de última generación. Y, como no somos reflexivos nos hacemos esnobs. Y ser esnob espiritual o seguidor de alguien, aunque es cómodo nos destruye la vida.
Estábamos hablando sin ninguna dirección planificada, cuando nos hemos vistos metidos hablando del origen de la tierra y de lo atrevidos que son los que dicen que el universo tiene tantos millones de años.
T. Segarra: Eso todo es un cuento. Que unos escriben un libro y venden millones y así ganan dinero. Porque el universo es eterno. Y lo eterno no tiene principio ni fin. Tu dices que en las facultades hay loritos, pues eso. Es como hablar de dios y querer darle una imagen o ideas humanas. Y eso es muy peligroso porque no tiene sentido. Así que el origen del universo y su big-bang es tan superficial. Y en medicina ocurre lo mismo.
Doctor: ¿Sabes qué hay un animalito invisible que originaba la peste y que vivían en las ratas? Ese animalito se esconde en la cadera, o en otro lugar, donde puede generar dolor. Hace unos días el fontanero que vino a mi casa me dijo que a un compañero suyo en tres días murió. Y seguramente, es que no lo habían tratado adecuadamente. Yo también he sufrido algún ataque de esas bacterias o microbios. Pero los médicos no hacen caso a esos síntomas.
T. Segarra: Es que no tienen tiempo para tratar adecuadamente a las personas que van a ellos. Tú si que has estudiado y estudias. Pero es que te has dedicado a ello, no has tenido diversiones ni mujeres, ni tienes hijos, ni has ido de fiestas; y tienes tiempo para mirar y observar. Eso es como ir en coche a cien y puedes ver algo de los lados, pero si vas a doscientos nada más se ve que la raya de la carretera.
Doctor: Tengo un amigo médico, que no sabe nada. Y todo lo quiere solucionar con psicología. Y eso es una traición a la medicina. Porque no investigan la enfermedad como debe de ser.
T. Segarra: Es que se puede curar tanto fisiológicamente como psíquicamente. Toda la vida ha habido la lucha entre los médicos, entre los que dicen que es más importante el soma que la psique y al revés.
Doctor: Eso no es así. Tú no puedes negar un microbio, que es el que causa la enfermedad.
T. Segarra: Es que los psíquicos van a negar el microbio. Se puede curar fisiológicamente, psicológicamente y esotéricamente. Cada uno tiene su arte. Si ahora viene una mujer gorda, se le puede decir: ‘Deja de comer, haz ejercicio y tómate estas pastillas’. Pero también se le puede decir: ‘¿Qué te ocurre que comes tanto? Vamos a investigar que es lo que te da tanto apetito’. Si ahora entra una persona y dice: ‘He sentido un agobio en el ascensor, ¿verdad que ha ocurrido algo allí dentro?’ Y le decimos, sí se murió hace unos días una persona allí dentro. Él lo sabía y si hurga lo podrá ver ahí. Pero uno tiene que ir con cuidado porque todo es infinito. Y entonces a esa persona la tienes que escuchar porque a ella le influyen las palabras y lo que sucede de otra manera a como le influyen a los demás.
Escritos y publicaciones, 7-6-2012
Interlocutor: Hola Toni como estás, soy…
T. Segarra: ¿Qué deseas, o qué quieres? Explícalo para saberlo.
Interlocutor: Deseo comentarte algo que me paso hace un tiempo y todavía no le encuentro explicación alguna. ¿Estás aquí Toni?
T. Segarra: Si, si. Estoy aquí.
Interlocutor: He experimentado la muerte dos veces.
T. Segarra: ¿Tú cómo lo sabes, si nunca te has muerto? Y no podrás saber cuándo viene ni lo qué es la muerte.
Interlocutor: La muerte es tan difícil de vencer que nos da toda una vida de ventaja.
T. Segarra: Pero a la muerte no se la puede vencer. Porque cuando algo tiene que venir y no se puede evitar, no hay nada que hacer. Solamente vivir adecuadamente y olvidarse de esa muerte.
Por lo demás, todos vivimos por añadidura, como si fuera un regalo. Pues todos los días mueren millones de todas las edades y circunstancias.
Las personas insensibles al sufrimiento y al dolor de los demás, ya sean a las personas como a los animales y las plantas, son nihilistas. No son nihilistas de su egoísmo, sus propiedades y riquezas, sino a esa posibilidad de que eso les pueda desaparecer. Es decir, solo la idea de que pudieran tener que renunciar a todo lo que están aferrados, les deprime, les pone airados, dispuestos a lo que haga falta con tal de que todo siga como siempre ellos han querido. Y por eso es que tienen los ejércitos, los policías, los espías que ellos llaman ‘servicios de inteligencia’, leyes promovidas para defender lo suyo, etc.
Por eso es más difícil que un rico tenga sensibilidad y tranquilidad espiritual, que un elefante pase por el agujero de una aguja de coser.
La foto es buena pero el texto es una vaguedad. Porque a la humanidad no se la puede cambiar. Pues, para cambiar a la humanidad primero te tienes que cambiar tú radicalmente. ¿Es eso posible? Todo lo demás son ilusiones y palabras.
Cuando más comemos, más fuertes y poderosos somos en energía. Pero, ¿para qué queremos tanta energía, para ser más eficientes a la hora de cazar, a la hora de destruir todo lo que hay allá donde vamos, a la hora de enfrentarnos entre nosotros? No es que estemos apelando para que seamos débiles y pusilánimes, pero sin un sentido de moralidad nos hacemos más agresivos y destructivos. Ayer vi unas fotos de unos jóvenes con motocicletas subiendo y bajando por la montaña, sin sendero ni carretera alguna, todo a través; he visto sacar tantos peces del mar en una pequeña red, desde la orilla, que luego no sabían qué hacer con ellos; al igual que los cazadores de patos salvajes. Y todo eso es porque vamos sobrados de energía descontrolada y mal usada.
Todo es muy sencillo, Daniel. El que tiene un inspirador y lo necesita, ¿por qué no lo tiene que usar? El problema está en que ese inspirador se apodere de ti y te conviertas en una marioneta de él. Y entonces estamos perdidos. Y, entonces, ¿qué queda? El saber gestionar esa situación. Es como necesitar una medicina y como la hay la tomas, pero si nos pasamos la pagamos.
Porque en realidad todas las cosas, ya sea la esposa, los hijos, el dinero, los amigos y parientes, lo que sabemos, todo lo que hacemos, lo usamos como una medicina, que nos da vitalidad. Si nos resta vitalidad, ¿qué hacemos? Por tanto, todo se trata de gestionar nuestra vida. Porque si no estamos bien, todo lo que tocamos le transmitimos nuestro malestar y amargura.
Vanesa, eso que dices tiene sentido. Pero todo tiene que estar unido. No es casualidad que Jiddu Krishnamurti, nunca hubiera comida carne, ni fumó ni bebió alcohol ni tomó drogas. Y lo mismo hace la mayoría de los budistas y otros que llevan un punto parecido. Eso no quiere decir que alguien que coma carne, fume, tome alcohol o drogas, está acabado. Pero es incuestionable que todo lo que comemos, nos afecta. JK, relató que una persona que cocinaba para él, cuando le servía encurtidos fuertes, se ponía ardoroso y agresivo, por lo que dejó de comerlos y que se los sirvieran.
Una ilusión es pensar que somos diferentes de los demás. Es el problema de los ignorantes, que somos todos. Unos lo usan para defenderse y otros para atacar. Pero cuando uno descubre que el que ataca y el que se defiende son la misma cosa, todo el entramado de la ignorancia cesa.
He leído tu entrevista de ayer en el diario…
Gracias por tus informaciones.
¿Por qué protestamos en contra de una guerra particular que nos cae antipática? ¿Por qué no protestamos en contra de todas las guerras?
Eso mismo sucede contigo -que no digo que no lo hagas- cuando te encaras y focalizas toda tu energía con unas determinadas personas que no sientes afecto ni cariño hacia ellas. Y ellas también son seres humanos, como tú y como yo, pero con un destino diferente y desafortunado.
Si observaras a todos los países, verías que la corrupción, la inmoralidad, la venta de armas a dictadores sanguinarios está a la orden del día y nadie les dice nada. No hace falta que sigamos con más detalles. Sólo añadiré, que cuando el establishment le consiente a alguien proseguir con lo que lleva entre manos, no hay nada de extraordinario en todo lo que hace. Es decir, es la misma vulgaridad y superficialidad pero a un nivel diferente. Y ahí es donde empiezan los agravios, las divisiones y conflictos.
En el fondo todo es muy sencillo de observar. Mira lo que pasa en tu vecindario, en el trabajo, y verás que unos nos caen bien y otros nos caen mal. E ir más allá de esa injusticia, de esa discriminación, de ese juego del "yo", es la única revolución que puede solucionar los problemas, que no son otra cosa que los conflictos causados por la división y la fragmentación interna.
“¡Qué locura mayor podría haber que estar solo, triste o en conflicto con nuestros compañeros!”
Nos olvidamos que eso que decimos que parece tan bonito y adecuado, lo hemos de realizar nosotros en nuestras vidas. Decir que es una locura tener conflictos con las personas, pero al mismo tiempo maquinar y desarrollar toda clase de actividades contra el que crees que es tu enemigo, ya sea tu vecino o alguien que vive lejos, es el absurdo de las palabras. Más aún si el que las dice tiene el rango espiritual, al creerse que sabe. Por eso, es una ilusión creerse diferente a los otros, decir que ellos son malvados, que son nuestros enemigos. Todo esto es el engaño de la política, que es la guerra de baja intensidad.
Mientras no veamos como un hecho que tú y yo somos básicamente iguales psicológicamente, siempre habrá la comparación y la vanidad de creer y decir: "Yo tengo más derechos que otro, porque necesito más para vivir". Y así, empiezo a maquinar y planificar mi vida, que al juntarme con otros que piensan como yo, se hace un gran conflicto que siempre quiero ganar. Por lo que el paradigma de la guerra está servido y operando.
¿La meditación como algo vivo y dinámico, que comprende toda la vida, puede tener técnicas, métodos, libros que la describan? ¿O la meditación está más allá de toda palabra que digamos, de todo lo que planifiquemos para alcanzarla, para que ella llegue?
En el ver hay acción total al darse cuenta de la realidad, de lo que es. El problema está en tener la fortuna y la sensibilidad para poder ver sin ninguna distorsión, ilusión y todos los impedimentos que se anteponen.
Ahora en la actualidad hay cierta comunicación con los animales. Pero lo que nos tiene que interesar es que los respetemos y amemos. Y para ello, no podemos inmiscuirnos en su manera de vivir, trayéndolos a nuestra manera de vivir en las ciudades, en exhibiciones, en la explotación.
Los árboles son libres porque no tienen que elegir: si llueve lo aceptan, si hace sol también. Ya sea con frío o con viento, ellos en su santidad no se dividen ni huyen ni entran en conflicto.
Escritos y publicaciones, 13-6-2012
He visto que habéis incluido mis libros en vuestra página comercial. No sé si tendríais que haberme pedido permiso o no. Pero, por lo menos consultármelo. Porque en todos los originales de mis libros siempre figura Toni Segarra. Y vosotros habéis puesto Antonio Segarra Simeón, que aunque soy yo no es mi nombre que utilizo desde hace muchos años.
La libertad y el amor es lo mismo. Y el amor sin libertad no puede existir. Tú dices que el amor sin libertad puede ser una tiranía. Vamos a intentar investigarlo.
Si yo te amo, ¿cómo puedo no darte la libertad que necesitas para tu manera de vivir? Por tanto el amor es libertad. Ahora cuando dices que sin libertad el amor es una tiranía, eso es lo que decimos superficialmente. Si descubres que tu cuerpo es una prisión de la que no puedes salir de ninguna de las maneras, ¿qué haremos, viviremos amargados, neuróticos, agresivos con toda las desgracias que eso conlleva? Por mucho que maldigamos la suerte por el cuerpo que tenemos, él va a ser como es, va estar ahí. Si lo fuerzas, lo torturas o martirizas, será peor aún, pues entonces será más problemático. ¿Qué haremos entonces si nos sentimos atrapados con la pesada carga del cuerpo, que hay que alimentarlo, lavarlo, cuidarlo del frío y la calor, de los golpes, del fuego? Algunos toman drogas, rezan sin parar y se agarran a una religión tonta y vana, o se emboban en algún gurú. Pero si somos un poco despiertos, vemos que todo eso no resuelve el problema de mi prisión corporal. ¿Qué haré entonces, para vivir sin desdicha y resentimiento, dando la culpa a los otros por haberme puesto en esta situación?
No podemos hacer nada. Y cuando vemos de verdad que no podemos hacer nada, igual como cuando se muere un amigo o un familiar cercano, es cuando te sientes completamente derrotado. O, mejor dicho el “yo” comprende lo tremendamente inútil que es y que no sirve para resolver los problemas. Entonces el “yo” cesa en su actividad. La prisión del cuerpo sigue ahí, pero no molesta ni es vista como una reclusión forzada, como una cárcel.
Pero esa situación que resulta es la del amor. Y es la de la libertad. Porque uno ya no quiere salir de la prisión, porque la inteligencia ha descubierto que no es posible y lo asume de manera que no hay dolor. Y si no hay dolor, hay a mor. Y en todo eso está la libertad.
El amor es siempre es libertario para uno y para todos los demás, ahí está su maravilla y su peligro. ¿Se entiende? Porque eso quiere decir que se puede hacer cualquier cosa y los demás también lo pueden hacer. Y lo que hagan los demás, ¿nosotros qué podemos hacer contra ello o justificarlo? Cualquier dirección que tomemos nos deja en la misma situación de amar. Porque el amor es como el aire o la comida, es lo que interesa. Por tanto, el amor no es lo que los otros nos provocan, por vulgares o serios que sean, el amor es un estado indescriptible donde no hay problemas. Y si los hay no pasa nada. Porque el amor abraza y se integra en el problema, haciéndose con él una unidad. Y entonces la relación humana no es el problema que se nos presenta. Ese problema es la cárcel que ha dejado de ser cárcel.
Esteven, pero si haces una algo a gusto, ¿puede haber esfuerzo alguno? El esfuerzo, que es contradicción, llega cuando no queremos hacer algo. Así que, ¿queremos vivir, tenemos apetito de vida? Si uno tiene hambre come lo que hay, no habla sobre si el alimento es bueno o no, solamente come. Por tanto, hay que descubrir porque no hay apetito de vivir.
Cuando actuamos no es posible ver lo que tenemos dentro. Porque eso sería una operación del pensamiento. Solamente existe la acción y sus resultados. Y cuando más nos golpean y perturban, es cuando puede aparecer la claridad de la inteligencia.
¿Estás seguro que el pueblo sabe lo que quiere? El pueblo somos todos y todos nos queremos hipnotizar. Así que habrá que vivir siendo hipnotizados y a la vez nosotros hipnotizando a los demás. Porque somos como vendedores de algo que creemos lo mejor. Y ahí es donde llega el conflicto, porque todos decimos que lo nuestro es lo mejor.
"El silencio es intermitente. La charla constante. ¿Podemos cambiar esto.? ¡Esa es su misión!".
¿Por qué queremos que algo tenga continuidad si nada en la vida la tiene? El silencio continuo no es un hecho, pero nosotros queremos convertirlo en un hecho. Alguien que dice que sabe, y que nosotros le obedecemos, nos ha dicho que eso es posible. Por lo que nos dividimos de la realidad, y generamos más ruido y el parloteo de la mente. Mira y descubre tú mismo si ese silencio es posible o no. Y lo que veas eso será tuyo y nadie te lo podrá arrebatar.
Ahora bien, en ese parloteo del pensamiento-mente también puede estar ese silencio, que no es la ausencia de ruido ni de parloteo.
"Todas las personas tienen una cosa en común: todos son diferentes. Si reconoces este hecho de la vida puedes comenzar a respetar la diferencia de opiniones".
Las personas tenemos algunos rasgos que nos diferencian de los otros: el color de la piel, el idioma, la cultura y la religión, etc. Pero psicológicamente todos somos iguales en lo básico: queremos que nos respeten, queremos tener salud, buscamos la felicidad y la libertad, etc. Y todos participamos de todo eso queramos o no. Y en ese respeto está implícito la libertad en todos los ámbitos.
El interior es lo que manda que la manera de vivir, y la sociedad que hemos construido, sea como es. Hay otros que dicen que es al revés: cambiar lo de fuera, la sociedad. Y ésta cambiará al individuo internamente. El mundo está dominado por los que quieren cambiar al hombre de fuera hacia dentro. Pero los hechos no lo demuestran: seguimos matándonos por un trozo de tierra, el nacionalismo, por una bandera, por una idea o teoría que nos divide y nos trae el conflicto.
Tan listo que era Einstein y aún le engañaron los que mandan y el ejército de EE.UU. Pues a él, y a otros investigadores, les dijeron que las investigaciones sobre la energía nuclear no se utilizarían para fines bélicos. Y cuando se dieron cuenta que todo era una farsa y mentira, ya estaba básicamente desarrollada e inventada.
"Cuando no exigimos nada del mundo, ni de Dios, cuando uno no quiere nada, no buscan nada, no esperan nada, entonces el Estado Supremo vendrá como un invitado inesperado".
Esa verdad es tan grande que pesa tanto que nos cuesta mucho asumirla y llevarla a cabo, de vivir con ella. Pues el miedo y la desesperación a no ser nada nos aleja de la inteligencia y la sabiduría.
“La persona meramente parece ser, al igual que el espacio dentro de la jarra parece tener la forma y el volumen y el olor de la jarra”.
Pero a nivel espiritual o psicológico podemos ir más allá del condicionamiento que nos ha moldeado. Aunque al vivir en el cuerpo, éste hace de moldeador de nuestras maneras. Por eso, la materia nos hace inclinar pero no nos pone siempre de rodillas.
“Exponer y propagar conceptos es simple, pero abandonar todos los conceptos es difícil y raro”.
Cuando no hay comprensión hay miedo. Y entonces la ignorancia y el miedo parecen un dique como una alta montaña. Solamente la fortuna es la que hace que uno puede ir más allá de esa ignorancia que trae al miedo. Ese el misterio de la vida que no se puede desvelar: a uno le viene la fortuna y a otro no. Aunque al final nadie sabe lo que puede suceder.
Esa esperanza es un deseo. Por lo que va a generar más desorden y confusión, aunque se consiga lo que tenía como una esperanza. Lo más dañino, y por eso genera división, conflicto y crueldad, es el deseo. Y el daño empieza por uno pero se propaga a los demás, ya seamos conscientes o no.
He leído tu entrevista de hoy en….
Gracias por tus informaciones
Aunque la ciencia tiene su utilidad, no tiene la respuesta. Porque todo es infinito y así que por mucho que se invente jamás habrá el invento definitivo para liberarse de la miseria que lleva en su seno la vida. Por lo tanto, hay que tener cuidado de que el deseo de más y más entre dentro de nosotros, porque eso quiere decir que los inventos no serían para descartar verdaderamente el dolor, sino una herramienta para seguir con esta manera de vivir con desorden y la estupidez de la mentira, la inmoralidad y la corrupción.
Escritos y comentarios, 13-6-2012
"Sabemos que no podemos dar nada sentado en la vida. Sin embargo, nos aferramos a la esperanza de que nada va a ir más allá del límite manejable".
Para eso no hay vacuna, pues puede suceder cualquier situación sorprendente, aunque si lo vemos detenidamente sí que sabemos que puede pasar algo gordo. Lo que realmente nos sorprende es que nos pueda pasar a nosotros personalmente. El desapego, vivir como si fuéramos invitados, es lo que nos puede aliviar ante un golpe de la vida.
Hagamos lo que hagamos siempre generará un patrón, una rutina, pues las necesidades así lo exigen. Ahora bien, una cosa es ser consciente de que ese patrón es algo vital y necesario. Y otra cosa es vivir como alguien que no se entera ni tiene sensibilidad ante lo que provocamos y generamos. Siempre vamos a molestar a alguien, pero es muy diferente si nos damos cuenta. Entonces hay más afecto y cariño por lo que hacemos, en la relación, en nuestras decisiones.
Pensar que todo está bien porque a mí me va bien, es la broma de la vida. Tarde o pronto todo lo veremos como ha desaparecido: queda lo feo.
Es como si el ordenador no respondiera, se detiene y vuelve a funcionar. Pasa el tiempo y no llega lo que hace que la vida sea bonita, bella.
Huir en verano de una calor sofocante no es posible. Huir de una mala situación tampoco lo es. Parecemos como un inútil que depende de todos.
La depresión es pegajosa, como unas tierras pantanosas, donde te hundes y te quedas estancado. Sólo queda esperar que pase lo antes posible.
El tiempo es relativo, unos minutos pueden ser muy largos y tortuosos, por su fealdad. Otros son rápidos y maravillosos. Aferrarse es malo.
El misterio es el porqué de las cosas. Todo tiene su motivo. Pero todos los motivos no los vemos. Es mejor olvidarse de los motivos.
Verse ridículo es la señal de que algo no funciona bien. Intentar no ser ridículo también nos hace que sigamos ridículos. No hagamos nada.
Cuando algo se quema del todo, eso se acabó. El fin es el comienzo. El problema es lo que tarda en arder. Hay que ir más allá de todo eso.
Aunque hay que estar más allá de las contingencias. No meterse en problemas, ni disputas ni conflictos, es vital para que ello pueda suceder.
La mente es como el cuerpo, si le das algo que lo corroe no podrá con ello. Si vivimos entre disputas y conflictos vendrán cosas horrorosas.
La vanidad es más poderosa que el dolor. La vanidad es la estupidez operando. La vanidad es adicción muy cara. Tanto que nos puede destruir.
¿Por qué no queremos salir del surco que nos lleva a la ruina? Somos adictos y salir nos da miedo. Hasta somos capaces de hacer una guerra.
La guerra es la vanidad desbocada y todo lo arrasa. Siempre encuentra combustible para seguir hasta el agotamiento y la destrucción: el ‘yo’.
El ‘yo’ es el invento más peligroso y caro que hemos creado. Y ya no se puede destruir. Todo es por querer hacernos libres. Pero no resulta.
La libertad no es hacer lo que me da la gana. Es viendo donde me lleva, que la rechazo para ser libre. Y esa libertad no se puede destruir.
Esa libertad, que no es corrupción, no se pude destruir porque no es vanidad. Es como comida para todos. Pero la comida mal usada es veneno.
El veneno puede matar. Pero pude torturar sin fin. La confusión y el desorden, lleva a abismo de no saber que hacer. Porque hacer es un mal.
Para el que ha perdido el rumbo en alta mar ningún viento es bueno, porque él no sabe a donde va. Sólo la suerte y su misterio decidirá.
No esperemos demasiado de los demás pues son como nosotros: queremos pero no podemos. Queremos ser limpios, pero vamos sucios, deshonrados.
¿Puede vivir alguien honesto y limpio en un mundo de suciedad y de corrupción? Si que se puede. Pero para vivir hay que ser algo corrupto.
La vida es corrupción porque tenemos que sobrevivir: comer. Necesitamos sacrificar animales que tampoco quieren morir. Así comienza todo.
No te fíes mucho de los que te quieren ayudar. Por tanto, no pidas mucha ayuda a los demás. Intenta ser autosuficiente internamente. Si te conoces a ti realmente cómo eres, conocerás también a todos los demás. Pues son como tú y como yo, como todos.
Vicky. Y si no hay ese ver en una dirección directa con toda la atención, ¿qué haremos? Tú tienes hambre, y llegas a tu casa de un viaje, y en tu casa la persona que comparte contigo el apartamento tiene comida. Ella no está en ese momento, pero tú tienes que comer, ¿qué harás, comerás o no? No sabes si la comida que hay, ella la quiere porque hay poca en ese momento. O tal vez ha comido ya fuera en algún sitio. ¿Captas la situación?
"Nuestra relación con nosotros mismos, con los demás, con todo lo que es, lo que da sentido a la vida, ¿es cierto esto qué se puede conseguir?"
Eso sólo lo tienes que ver tú, y cada cual, si es ello posible en la relación. Todo lo que nos digan o nos imaginemos, no tiene ningún valor verdadero hasta que no descubrimos si eso es falso o verdadero.
"El pensamiento es la búsqueda de un punto fijo satisfactorio en el tiempo. Como el punto fijo no se puede formar, uno se frustra, tiene estrés, ansiedad, etc. Sólo cuando esta búsqueda es un éxito, la Verdad amanece.
Cuando la búsqueda de un punto fijo ya no está, todo está preparado para operar automáticamente. Esta operación es alegría".
El pensamiento necesita seguridad para operar y se agarra a una idea o teoría, a cualquier cosa, creyendo que ahí estará seguro. Pero como la seguridad no existe en absoluto, no la encuentra. Entonces cuando descubrimos esa verdad de que no hay seguridad, ya no la buscamos. Pero, es entonces cuando uno tiene la máxima seguridad posible.
"El amor es libertad, ¿por qué la gente piensa que el amor es como la servidumbre?"
Hasta que no siente uno el amor no lo puede descubrir. Porque el amor es sin esfuerzo. En el amor todo fluye, no hay el que sirve ni el servido. Todo es una unidad. Y esto es la libertad total y absoluta.
“Practicar un retiro de manera filosófica es muy diferente de practicarlo como forma de fuga".
En la huida no hay comprensión ni amor. La huida es la reacción, la búsqueda de placer. Pero toda reacción genera otra reacción, por lo que todo se convierte en el desorden y el caos que es como vivimos. Mirar a un reto, atenerse a él, sin huir o no huir, sino estar con él, vivirlo, es cuando él le cuenta su historia.
Escritos y publicaciones, 13-6-2012
Esos que van a las iglesias, que son supersticiosos e idólatras, tienen el agravante de todo lo que sucede porque ellos se consideran los mejores, los buenos, con santidad. Por tanto, como ellos saben: a cada uno se le exigirá según lo que sabe, sus talentos.
¿Se puede ser religioso siendo fanático que quiere imponer su idea y teoría a los demás? Si la religión es el amor en acción, no el teórico que ha de venir, no procede negación de libertada alguna. Si la religión es fundamentalismo, superstición, fanatismo e ignorancia, entonces las puertas están abiertas para que llegue la dictadura, la crueldad, la violencia.
"Ustedes son la esencia de todo lo que es bello y precioso en el Universo. Siéntelo. Vívelo. Hacer que cada momento cuente. Usted es el Alquimista. Toque cada momento y convertirlo en oro. Todo lo que necesita es el coraje y la fe. A continuación, vea el cambio del mundo".
La creencia no es lo real. Sólo los buenos propósitos y las buenas palabras no van a resolver los problemas. No viva en la ilusión. Aténgase a los hechos de lo que es su vida real, que está colaborando a que este mundo corrupto e inmoral se esté desintegrando.
“El conocimiento propio no es conocimiento”.
Para que el conocimiento propio sea verdadero, uno tiene que morir a cada instante a todo lo que se dice y sucede.
“La autoridad en el entendimiento, es no comprensión”.
La autoridad en el ámbito que sea, es el deseo en acción, el ‘yo’. El deseo es el que abre la puerta a todos los problemas porque nos hacemos los directores y ejecutores de todo. Creyéndonos que sabemos. Pero el que dice que sabe, es que no sabe.
"El conocimiento es el conocimiento de un tomate, es una fruta. La sabiduría no está puesta en una ensalada de frutas".
La sabiduría sirve para ver lo más profundo, y como no podría ser de otra manera, también está en lo que parece rutinario, superficial y banal. Porque la sabiduría actúa en la totalidad de todo lo que existe.
Toda creencia es producto del "yo". Y para que el "yo" no pueda operar ha de haber negación de todo lo conocido. Pues si vamos a lo conocido, entonces el deseo se dispara y todo lo arrasa con tal de conseguirlo. Así que, uno no quiere nada. Y desde ahí, puede llegar todo.
"No camines detrás de mí. No corras detrás de mí. No me sigas. La imitación no es la forma de actuar. Tienes que seguir el camino tuyo donde tienes que escuchar tu propio corazón".
El que sigue a otro es porque tiene miedo a estar solo. Y el que promueve que le sigan también tiene miedo de estar solo. Por tanto, los dos se están destruyendo el uno al otro. Seguir quiere decir la dependencia de otro, que lleva a la esclavitud y a la miseria.
He leído tu entrevista de hoy.
Gracias por las informaciones.
Todo parece que haya cambiado, pero es una ilusión. El paradigma sigue siendo el mismo: el ‘yo’ insaciable es el que domina nuestras vidas. Y para que sigamos en la ilusión, hay unos que se encargan de decir a todos que ahora vivimos en el mejor de los paraísos. Y, resulta que se lo creen.
Prueba a cuestionar la sociedad, con su establishment, y te darás cuenta de eso que quiere decir. Por eso, lo más vulgar es triunfar. El triunfador es el ídolo, el mejor; los otros, los que lo ayudan y hacen que sea posible el triunfo, no cuentan. Y ahí está la prueba de que seguimos iguales, porque seguimos haciendo lo mismo que hace medio millón de años.
Pero. ¿para qué decir que hay un ‘yo’ y un súper yo más grande aún? Todas esas divisiones de el mayor o el menor, plano superior u otro más elevado, nos fragmentan internamente. Y en esa división interna es cuando todo vuelve a parecer con su conflicto, desorden y confusión. Cuando solamente existe la conciencia de la realidad, de lo que es. Y cuando esa conciencia no se divide, es cuando llega lo sagrado, la unidad de todo.
"Yo lucho para ganar. No estoy haciendo boxeo con una sombra o jugando. (1 Corintios 09:26 NVI)".
El problema de repetir a otros, un profeta, un gurú, un libro por sagrada que sea considerado, es que vivimos en la creencia. Pero la creencia no es la que entiende los hechos, sino la que obedece.
Te lo digo porque si lees todo lo que dicen esos profetas, líderes y sus libros, te darás cuenta que ahora dicen esto, pero al cabo de unas páginas dicen todo lo contrario. Por tanto, mientras tú no veas realmente qué es la realidad, cómo funciona la vida y cómo funciona el pensamiento, irás dando bandazos repitiendo lo que dicen otros. Sin saber realmente lo que quiere decir.
Si vivo de acuerdo como otra persona lo hace, no es que uno no es fiel así mismo, sino que vive dividido y en conflicto. Y por esa puerta entran todos los problemas de la vida: peleas y enfrentamientos, disputas y violencia.
Todo lo que hacemos es porque tenemos miedo a la soledad, a estar fuera de lo establecido que es lo más cómodo. Estar al margen de lo establecido es muy duro. Y por ello, si tengo que agarrarme a alguien que parece inteligente, que tiene un gran cartel, con muchas personas que también están como yo, pues no nos importa el precio de la vulgaridad y la superficialidad que tengamos que pagar. Pero si entendemos el miedo como el veneno y su peligro que es, todo eso del seguir a otro desparece.
Creo que es evidente que si yo tengo que hacer algo que afecta a ti, tendré que hablarlo contigo. Y eso está bien, ¿no? Pero, ¿qué pasa si yo no te doy importancia, te resto valor y haga algo, sin tu consentimiento y permiso, que necesita tu aprobación? ¿Verdad que eso puede desencadenar un enfrentamiento? ¿Por qué no le damos todo el valor que se merece una persona, sea quién sea? Creo que desde ahí podemos ir solucionando los problemas y ver qué es lo negativo.
¿Puedes verlo, Eona?
He leído tu entrevista en… de hoy.
Gracias por las informaciones.
Pase lo que pase, mañana será como hoy. Los que más tienen son los que más pueden perder. Así que la ley de la vida está al margen de cualquier crisis. Por otra parte, la vida es una crisis continuada. Y, porque no queremos darnos cuenta que la vida es una crisis, y que hay que vivir siempre como si estuviéramos en crisis, es porque nos sorprende cuando el caos ya está devorándonos.
En el caos también está el orden. Cuando tenemos un reto muy impactante, donde perdemos el control de todo, de ahí llega el orden. Pero el orden no sabemos lo que es. Puede que ese orden sea la muerte, puede que sea algo que no nos gusta, puede que sea algo que sí que nos interesa. Es decir, el orden siempre está ahí pero nosotros queremos que sea ‘nuestro’ orden. Y es entonces cuando entramos en desorden. Por eso, la vida es destrucción, amor y construcción. Eso es el funcionamiento infinito de la vida.
He leído tu escrito-columna de ayer, ‘Hacer las maletas’.
¡No sabía qué el mundo ya había salido de la crisis! Porque todavía hay mucho desconcierto. Si es así, que ya se ha salido, lo tendríamos que decir a los cuatro vientos para que todos se confortaran y lo vieran todo de otra manera.
De todos modos, lo que no se arregla es lo que ha hecho que, recurrentemente, aparezcan las crisis, cuáles son los motivos y ver qué se puede hacer con esos motivos.
Esta mañana te he visto en un programa de la TV.V., 2•N0U, cuando hablabais sobre el arraigo de Europa como un nuevo estado o país.
Y creo que una parte de culpa para que las personas tengan una mayor conciencia de que Europa es más que un nombre, la tienen los países y su nacionalismo, como Alemania, Inglaterra, Francia, España, Italia, etc. Y hasta que ese nacionalismo deje de ser tan poderoso y extremo, no habrá la voluntad política para hacer de Europa un único país soberano.
Escritos y publicaciones, 13-6-2012
¿Nos damos cuenta qué cuándo hablamos de los otros para criticarlos, hay detrás un gran sentimiento de vanidad y que todo queda mediatizado y condicionado por ese sentimiento egoísta, del ‘yo’ que es ignorancia? ¿Cómo queremos que hagan los otros, los demás si nosotros no somos capaces de hacerlo? Decimos que los hijos son devorados por la sociedad superficial e insensible y así nos redimimos de nuestras responsabilidades y culpas. Pero nosotros formamos parte de esa sociedad, somos los responsables de esa sociedad. Cuando decimos que los jóvenes son indolentes, que son hipersexuales, que no tienen valores, etc., ¿qué responsabilidad tiene cada padre de ese comportamiento y actitud de su hijo?
Un joven que vea como el poder, siempre corrupto, se sostiene teniendo hombres armados y violentos para hacer la guerra, que vea la inmoralidad de siempre favorecer a los ricos y poderosos, que se tolere y subvencione la superstición y las creencias divisivas, que se toleren y subvencionen las torturas y asesinatos de los toros por entretenimiento y diversión, ¿qué se puede esperar del joven que ve que sus padres siguen eligiendo a los que nos gobiernan que no cambian nunca esas inmoralidades? Es muy grave lo que sucede, pero los mayores lo encontramos tan natural, tan dentro de la normalidad. Y es por eso, que es muy difícil que los hijos pueden rechazar y descartar esa manera absurda de vivir. Decimos lo que hay que hacer, pero nosotros no lo hacemos.
Dicen que quieren a sus hijos, los cuidan y atienden en sus necesidades, pero los echan a la guerra para que los destruyan y los maten. Si ustedes de verdad quisieran a sus hijos no tendrían ni un sólo día más de guerra, no serían nacionalistas con su bandera y fronteras. Pero, es porque viven en la contradicción de decir una cosa y haciendo otra, que lo que llega a nuestros hijos es la confusión envuelta en un vistoso decorado. Por eso, los únicos culpables de la manera cómo son nuestros hijos somos nosotros, no es el que vende la droga, los portales en Internet donde se ofrece sexo, no son los diseñadores de tendencia que dicen la ropa que hay que llevar. Si se miran realmente, verán lo corruptos e inmorales que son: hablan de verdad pero mienten, hablan de justicia y de compasión y viven y actúan como ricos, rechazan los nacionalismos que les molestan y perturban pero son feroces nacionalistas, rechazan la violencia pero es la de los demás, ven en las otras creencias y religiones algo pernicioso, pero no lo ven en la suyas.
La pregunta es: ¿Unos padres de verdad no corruptos ni inmorales, que no tuvieran nada que ver con todo el bacanal de la sociedad, podrían generar otro ser humano corrupto e inmoral, que la corriente de la confusión y el desorden lo arrastrara?
Atengámonos a eso, y no actuemos como ignorantes y taimados que se defienden ante la acusación evidente de culpabilidad.
He leído tu entrevista de ayer en La Vanguardia.
Gracias por las informaciones.
Siempre es todo lo mismo, cambian los decorados y los actores. Es decir, hemos cambiado del hombre que iba casi desnudo a nosotros; y de vivir en chozas e ir a pie a todas partes a vivir en edificios e ir en vehículos a motor. Hemos pasado de darnos mordiscos y pedradas, a echarnos bombas y proyectiles. Para que lo entiendan los más ilustrados y los menos: somos los mismos perros pero con distintos collares.
O sea, que los que lo complican es porque nos quieren vender el mismo cuento y la misma historia de siempre, pero enredándolo todo mucho para así vender muchas páginas, ya sean de libros o de diarios, para vender películas de cine o de documentales, o de charlatanes y astutos. Pero vivimos en este mundo patético y hay que vivir con él. Solamente hemos de no ser también tan patéticos como los demás. Y para ello, solamente hay que darse cuenta de lo patético que uno es. Es como cuando ves un gran peligro, como ver un toro que va hacia ti, y ese ver es el que te hace que actúes para ponerte a salvo. Es decir, cuando me doy cuenta que soy patético es cuando dejo de serlo.
Ayer, alrededor de las seis de la mañana, te vi en la TV. V., 2•NOU, cuando hablabais sobre el sentimiento y el conocimiento que tienen los ciudadanos de Europa, tanto como país, como una entidad más allá de lo que hasta ahora nos había inspirado. Uno de los obstáculos para que Europa tenga la importancia a nivel de un estado unitario y cohesionado, está en los nacionalismos fanáticos de los países soberanos que la componen. El problema proseguirá, más agrandado, cuando en Europa ya esté afirmado y consolidado completamente su nacionalismo.
Gracias por tus informaciones.
"¿Dónde está la existencia y dónde está la no existencia? ¿Dónde está la existencia de uno y otro?
¿Dónde está la necesidad de decir más? Nada emana de mí"
Si decimos que nada emana de mi, o yo soy la fuente de donde todo emana, eso es seguir dentro del ámbito del conflicto y el desorden. Pues la realidad y la verdad, es tanto emanar como no emanar. Todo puede ser en todas direcciones. Y las direcciones pueden ser infinitas. Por eso, el amor es lo nuevo lo que no ha sido tocado por la mente.
La mente no puede estar inmóvil, siempre está activa de lo contrario todo se colapsaría y se agravaría más todavía. Cuando la mente está completamente atenta a todo lo que es, lo que hay alrededor, está participando de ello, es todo ello sin división alguna ni conflicto ni comparación ni contradicción.
He leído tu entrevista en la que hablas de la muerte. Gracias por tus informaciones.
La muerte, como algo que forma parte de la vida, está sujeta al paradigma de la vida. Y el paradigma de la vida es sobrevivir como sea y cuanto más mejor. Por eso, los que se dedican a ganar dinero, invierten en laboratorios, y en grupos de presión, para aprovecharse del deseo de supervivencia para sacar abundantes beneficios.
Las personas la mayoría adoptan las modas, que todas son pasajeras, Pero el deseo de vivir siempre está de moda. La muerte, no es como una camisa que se puede cambiar o comprar otra. Por eso, es normal que las personas nos lo tomemos muy en serio a la hora de morir. Los que desean la muerte es porque están neuróticos o amargados, son nihilistas, o están traumatizados por un acontecimiento extremadamente doloroso. Yo prefiero la vida delante de cualquier otra eventualidad o contingencia.
He leído tu entrevista. Gracias por los consejos e informaciones.
Respecto a la pregunta, ¿dónde está la conciencia? La conciencia es la memoria. Si un ordenador aún no ha sido programado, no puede operar. Cuando le metemos todo lo que necesitamos, es entonces cuando el ordenador puede responder. Pero esa conciencia es muy superficial, es mecánica. Y a eso es lo que llamamos el condicionamiento, la programación.
Pero la pregunta es: ¿de dónde llega la conciencia cuando estamos descondicionados, cuando vamos más allá del ‘yo’ con todos sus problemas, del ‘mi’ y el ‘tú’, del nacionalismo, de las religiones y la política? Unos dicen que es la conciencia pura, la realización del ser, la iluminación, la liberación, el estado de no contradicción ni antagonismo, sino puestos ni conflicto. Y esa conciencia está más allá de todo nuestro condicionamiento animal. Lo podemos usar, pero no hay identificación ni nos aferramos a él, cosa que los animales no son capaces pues ellos no pueden ir más allá de su condicionamiento.
Ahora bien, ¿si los animales de ahora los pudiéramos ver dentro de unos millones de años, tendrían la misma conciencia que nosotros y serían capaces de ir más allá de todo su condicionamiento? Debería de ser así. Aunque la pregunta del principio, ¿de dónde llega la conciencia? sigue sin contestarse. Aunque podemos decir que es la energía. Pero, ¿cómo se genera la energía y de dónde nace?
Se le había muerto su madre hacía unos días y estaba apesadumbrado porque según decía tal vez hubiera podido hacer algo más, pues era médico. Cuando llegaron los servicios médicos él seguía intentando reanimarla, pero ellos tras algunas pruebas dijeron que estaba muerta.
Al cabo de unos días una hermana suya, se le atragantó comida en la garganta por lo que él tuvo que hacer todo lo que pudo para salvarla, pues se estaba ahogando. Él explicó con todo tipo de detalles lo que tuvo que hacer para que devolviera lo que la estaba ahogando.
Interlocutor: Yo no sé cómo lo hice ni lo que hice, pero hice lo necesario para que sacara lo que la estaba ahogando. Fueron unos momentos intensos, una experiencia extraña y poderosa.
T. Segarra: Primero que nada el hecho de que tú lo intentaras ya abre la puerta para que todo empezara, y tener cierto valor aunque seas médico. Luego te llegó toda la energía a la cual te conectaste para poder atender ese reto. Cuando estabas en la facultad cuando estudiabas para ser médico, durante todo ese tiempo los profesores os dicen que sois médicos. Y se genera como una hermandad entre todos los médicos del mundo. Y entonces, cuando todo se acelera por un reto muy intenso, al que hay que responder sin vacilación alguna, uno entra como si estuviera en trance y entonces se conecta con todo ese magma de la sabiduría médica. No sólo con los médicos que hay ahora, sino desde el principio de esa gracia que se tiene que tener para curar o resolver un problema relacionado con la salud
Interlocutor: Si eso es cierto. Yo no sabía nada de lo que tenía que hacer pero las soluciones llegaban. Hace unos días la persona que vive conmigo tuvo un ataque de asma y no tenía ninguna medicina. Pero yo al verlo tan agobiado que se ahogaba, fui rápidamente a la cocina y cogí la botella de vinagre y se la puse para que la oliera y enseguida le pasó la congestión.
T. Segarra: Todo eso pasa con el escritor o con cualquier otra dedicación, cuanto más te dedicas a algo se genera una comunicación con eso a que te dedicas y entonces suceden cosas extraordinarias.
Interlocutor: ¿Entonces, es cómo magia?
T. Segarra: Sí, es la magia de la vida.
Escritos y publicaciones, 15-6- 2012
Decir: "Sólo una mujer puede absorber la locura del hombre y dar a luz el amor", eso es un atrevimiento. Y te estás dividiendo de la realidad. Esa opinión, parece más bien la de un macho que necesita estallar.
Esto es así porque si fuéramos conscientes de que la huida del conflicto nos deja en el mismo conflicto, no lo haríamos. Entonces, la pregunta es: ¿Por qué no somos conscientes de que vivimos en conflicto, divididos?
He leído tu entrevista de ayer.
Gracias por las informaciones.
Todo lo que dices es una superficialidad banal. ¿Quién puede cuestionar al poder, al establishment? Los que lo cuestionan y lo denunciaran no tardarían mucho tiempo en hacer lo mismo que ellos. Porque nuestro paradigma es siempre de corrupción e inmoralidad. ¿Cómo se pueden financiar los ejércitos, los viajes al espacio, el estilo despilfarrador y derrochador de vivir, sin corrupción? Todos participamos del mismo estilo de vida, más o menos. Por tanto si no es algo de vida o muerte no vamos a cambiar, aunque se tenga que arrasar todo el mundo. Como lo han demostrado durante todos estos milenios, los que nos precedieron que nos han llevado a esta situación desesperada, a punto de colapsarse todo.
¿Tú puedes dejar tu coche e ir a pie a trabajar, puedes prescindir del aparato de aire acondicionado, de los ascensores, de los largos y repetidos viajes por todo el mundo, puedes no cambiar de ropa tan a menudo, puedes dejar de llenar las piscina y estar siempre duchándote gastando champú, perfumes, ensuciando toallas que se tienen que lavar? ¿Puedes prescindir de tu abultado sueldo y así prescindir también de todo lo que te gastas sin ninguna verdadera necesidad, teniendo lo imprescindible para alimento, la casa y la vestimenta?
Mientras no descartemos la corrupción y la inmoralidad, todo lo que digamos son palabras sin ningún sentido verdadero.
Tal vez depender de alguien es preciso. Tan preciso como el que necesita un medicamento para vivir, o un cierto estilo de vida aunque los demás les parezca un tanto extravagante y extraño. Lo importante es ser plenamente consciente de ello y ver qué se puede hacer con ello.
Aquí donde vivo ahora, a los niños de unos meses los visten con el traje regional y sus padres los sacan en los desfiles para que los vean y exhibirlos. Porque sus padres son también vanidosos y exhibicionistas.
Cada uno tiene que descubrir porque no nos damos cuenta de que nuestras vidas son un conflicto, siempre divididos de los vecinos, del frío o la calor, de la persona que tenemos al lado. Ahora bien, es posible vivir sin conflicto alguno. Descúbrelo y verás la solución a tus conflictos.
Los Derechos Humanos son como rascar en la superficie de los problemas. Mientras uno no vaya a la raíz de su división interna, que es su verdadero problema, y vea qué puede hacer con ella, todo lo que hagamos aunque se diga que es bueno y noble, bien visto, ¿qué sentido tiene realmente para resolver los problemas del hambre, la pobreza, la violencia?
Cuando vemos claramente, como nos vemos una herida en la mano, de que todo lo que haga para salir del conflicto me deja en el mismo conflicto. Es cuando dejo de estar dividido con lo que es, la realidad. Y así termina el conflicto.
Shivani Singh. ¿Podrías explicar qué es eso de pensar en la meditación en la luz? Gracias.
Cuestionar significa mirar lo que nos llega y observarlo atenta y profundamente para así ver si eso es negativo y descartarlo radicalmente. Pero ese cuestionamiento tiene que ser ante todo reto que nos llegue. Porque, cuestionar algo evidente es bastante fácil, pero cuestionar todo el condicionamiento que llevamos dentro ya es otra cosa. Y eso es lo más importante, porque todo lo que hacemos nace dentro de nosotros. Y dentro de nosotros es donde empiezan los conflictos y las batallas. Nosotros internamente estamos divididos, pues el miedo a todo lo que nos rodea, al futuro, a lo que ha sido que llega con los recuerdos y podría repetirse, hace que el presente nos obligue y esté siempre en defensa o en ataque.
Por tanto, ese miedo a todo, a perder a la persona que amo y la necesito, a perder el empleo, a perder la salud, es el que ha dado vida al ‘yo’. Y este ‘yo’ es el que ha creado los nacionalismos, las religiones organizadas, las diferentes ideas o teorías políticas, filosóficas o de otra índole. Y también ha creado el ‘tú’, el ‘nosotros’ y el ‘ellos’. Y mientras ese ‘yo’ no sea comprendido hasta su misma raíz, todo va a seguir igual que siempre, porque todos los problemas sonde dentro hacia fuera.
Así que esa ese ‘yo’, y todos sus inventos, que es toda la sociedad, el establishment, con todo el entramado de corrupción e inmoralidad, al que hay que cuestionar e ir más allá de su juego y paradigma.
“No creo que la iluminación le va a hacer especial. Si usted se siente especial en algún sentido la iluminación no se ha producido”.
¿Por qué nos gusta decir y hablar de no-hechos? ¿Quién sabe lo que es estar iluminado o no, hay algún catálogo que lo describa, alguna autoridad? Si decimos cualquier cosa de la iluminación de la liberación, o como lo queramos decir, eso puede que no sea. Porque la liberación, la iluminación, está más allá de todo concepto, palabra que se diga o no se diga. La totalidad no se puede describir, porque es la realidad que es muy rápida, está más allá del tiempo. Además nosotros somos la parte. Y la parte no puede abarcar al todo. Así que lo que digamos negativa o afirmativamente nos va a dejar como siempre: mirando y tal vez entendiendo, pero no transmitiendo como algunos pretender hacerlo.
He leído tu entrevista de ayer en el diario…
Si se me permite el decirlo, el tiempo lo genera el ‘yo’. Existe el tiempo cronológico como el de escribir este texto, como el ir de aquí a un lugar, como el que invierto en aprender un idioma, o el de crecer un árbol o una persona. Pero, fuera de este ámbito, el tiempo se convierte en psicológico. Yo quiero ser igual que esa persona que es inteligente, brillante y atractiva, quiero invertir toda mi energía en eso. Y es aquí donde surge la negativo del tiempo, pues ese deseo me divide de la realidad, de lo que soy. Y el deseo psicológico es el que genera el conflicto entre la realidad, lo que es, y lo que me gustaría que fuera.
La realidad no nos gusta, por eso siempre estamos huyendo e inventando otra realidad. Pero esa otra realidad, no es un hecho. Por lo que generamos el conflicto entre lo que ‘yo’ quiero y la realidad. Y ese paradigma del ‘yo’ actuando e inventando para huir de la insoportable realidad, ya sea la soledad, del vacío existencial, de cualquier hecho que nos parece desagradable, es el que hace que todo esté contaminado por la corrupción y la inmoralidad.
Sí, ha de haber una revolución. Y esa revolución ha de ser interior, de unidad de la conciencia. Pero, la tiene que hacer cada cual. Porque no podemos disculparnos y escudarnos el no hacerla, diciendo que estamos solos, de que no tenemos apoyos ni acompañamientos.
La revolución es cosa de uno. Porque obligar a otro a que la haga, eso no sería revolución en absoluto, pues sería una dictadura y tiranía como otra. Es decir, más división y fragmentación interna, más conflicto, violencia y guerra.
Puedo añadir que hay escuelas en que los niños están más de veinte años en barracones. ¿Qué dirán esos niños cuando sean mayores y se enteren del agravio que han sufrido por la humillación, que es estar en barracones cuando se despilfarraba el dinero en lujos y caprichos, en vanidades esnobistas?
Quiero decir que esas personas que hablan tanto de que ellos también son, o serán perjudicados por las decisiones de los gobiernos, que protestan por la corrupción e inmoralidad, etc., ¿cuántas cuentas corrientes tienen en los bancos y cuánto dinero hay en ellas, qué hacen con ese dinero estancado? Las palabras si no van acompañadas por los hechos sólo sirven para seguir dando vueltas en círculo sin fin.
Escritos y publicaciones, 15-6- 2012
Decir: "Sólo una mujer puede absorber la locura del hombre y dar a luz el amor", eso es un atrevimiento. Y te estás dividiendo de la realidad. Esa opinión, parece más bien la de un macho que necesita estallar.
Esto es así porque si fuéramos conscientes de que la huida del conflicto nos deja en el mismo conflicto, no lo haríamos. Entonces, la pregunta es: ¿Por qué no somos conscientes de que vivimos en conflicto, divididos?
He leído tu entrevista de ayer.
Gracias por las informaciones.
Todo lo que dices es una superficialidad banal. ¿Quién puede cuestionar al poder, al establishment? Los que lo cuestionan y lo denunciaran no tardarían mucho tiempo en hacer lo mismo que ellos. Porque nuestro paradigma es siempre de corrupción e inmoralidad. ¿Cómo se pueden financiar los ejércitos, los viajes al espacio, el estilo despilfarrador y derrochador de vivir, sin corrupción? Todos participamos del mismo estilo de vida, más o menos. Por tanto si no es algo de vida o muerte no vamos a cambiar, aunque se tenga que arrasar todo el mundo. Como lo han demostrado durante todos estos milenios, los que nos precedieron que nos han llevado a esta situación desesperada, a punto de colapsarse todo.
¿Tú puedes dejar tu coche e ir a pie a trabajar, puedes prescindir del aparato de aire acondicionado, de los ascensores, de los largos y repetidos viajes por todo el mundo, puedes no cambiar de ropa tan a menudo, puedes dejar de llenar las piscina y estar siempre duchándote gastando champú, perfumes, ensuciando toallas que se tienen que lavar? ¿Puedes prescindir de tu abultado sueldo y así prescindir también de todo lo que te gastas sin ninguna verdadera necesidad, teniendo lo imprescindible para alimento, la casa y la vestimenta?
Mientras no descartemos la corrupción y la inmoralidad, todo lo que digamos son palabras sin ningún sentido verdadero.
Tal vez depender de alguien es preciso. Tan preciso como el que necesita un medicamento para vivir, o un cierto estilo de vida aunque los demás les parezca un tanto extravagante y extraño. Lo importante es ser plenamente consciente de ello y ver qué se puede hacer con ello.
Aquí donde vivo ahora, a los niños de unos meses los visten con el traje regional y sus padres los sacan en los desfiles para que los vean y exhibirlos. Porque sus padres son también vanidosos y exhibicionistas.
Cada uno tiene que descubrir porque no nos damos cuenta de que nuestras vidas son un conflicto, siempre divididos de los vecinos, del frío o la calor, de la persona que tenemos al lado. Ahora bien, es posible vivir sin conflicto alguno. Descúbrelo y verás la solución a tus conflictos.
Los Derechos Humanos son como rascar en la superficie de los problemas. Mientras uno no vaya a la raíz de su división interna, que es su verdadero problema, y vea qué puede hacer con ella, todo lo que hagamos aunque se diga que es bueno y noble, bien visto, ¿qué sentido tiene realmente para resolver los problemas del hambre, la pobreza, la violencia?
Cuando vemos claramente, como nos vemos una herida en la mano, de que todo lo que haga para salir del conflicto me deja en el mismo conflicto. Es cuando dejo de estar dividido con lo que es, la realidad. Y así termina el conflicto.
Shivani Singh. ¿Podrías explicar qué es eso de pensar en la meditación en la luz? Gracias.
Cuestionar significa mirar lo que nos llega y observarlo atenta y profundamente para así ver si eso es negativo y descartarlo radicalmente. Pero ese cuestionamiento tiene que ser ante todo reto que nos llegue. Porque, cuestionar algo evidente es bastante fácil, pero cuestionar todo el condicionamiento que llevamos dentro ya es otra cosa. Y eso es lo más importante, porque todo lo que hacemos nace dentro de nosotros. Y dentro de nosotros es donde empiezan los conflictos y las batallas. Nosotros internamente estamos divididos, pues el miedo a todo lo que nos rodea, al futuro, a lo que ha sido que llega con los recuerdos y podría repetirse, hace que el presente nos obligue y esté siempre en defensa o en ataque.
Por tanto, ese miedo a todo, a perder a la persona que amo y la necesito, a perder el empleo, a perder la salud, es el que ha dado vida al ‘yo’. Y este ‘yo’ es el que ha creado los nacionalismos, las religiones organizadas, las diferentes ideas o teorías políticas, filosóficas o de otra índole. Y también ha creado el ‘tú’, el ‘nosotros’ y el ‘ellos’. Y mientras ese ‘yo’ no sea comprendido hasta su misma raíz, todo va a seguir igual que siempre, porque todos los problemas sonde dentro hacia fuera.
Así que esa ese ‘yo’, y todos sus inventos, que es toda la sociedad, el establishment, con todo el entramado de corrupción e inmoralidad, al que hay que cuestionar e ir más allá de su juego y paradigma.
“No creo que la iluminación le va a hacer especial. Si usted se siente especial en algún sentido la iluminación no se ha producido”.
¿Por qué nos gusta decir y hablar de no-hechos? ¿Quién sabe lo que es estar iluminado o no, hay algún catálogo que lo describa, alguna autoridad? Si decimos cualquier cosa de la iluminación de la liberación, o como lo queramos decir, eso puede que no sea. Porque la liberación, la iluminación, está más allá de todo concepto, palabra que se diga o no se diga. La totalidad no se puede describir, porque es la realidad que es muy rápida, está más allá del tiempo. Además nosotros somos la parte. Y la parte no puede abarcar al todo. Así que lo que digamos negativa o afirmativamente nos va a dejar como siempre: mirando y tal vez entendiendo, pero no transmitiendo como algunos pretender hacerlo.
He leído tu entrevista de ayer en el diario…
Si se me permite el decirlo, el tiempo lo genera el ‘yo’. Existe el tiempo cronológico como el de escribir este texto, como el ir de aquí a un lugar, como el que invierto en aprender un idioma, o el de crecer un árbol o una persona. Pero, fuera de este ámbito, el tiempo se convierte en psicológico. Yo quiero ser igual que esa persona que es inteligente, brillante y atractiva, quiero invertir toda mi energía en eso. Y es aquí donde surge la negativo del tiempo, pues ese deseo me divide de la realidad, de lo que soy. Y el deseo psicológico es el que genera el conflicto entre la realidad, lo que es, y lo que me gustaría que fuera.
La realidad no nos gusta, por eso siempre estamos huyendo e inventando otra realidad. Pero esa otra realidad, no es un hecho. Por lo que generamos el conflicto entre lo que ‘yo’ quiero y la realidad. Y ese paradigma del ‘yo’ actuando e inventando para huir de la insoportable realidad, ya sea la soledad, del vacío existencial, de cualquier hecho que nos parece desagradable, es el que hace que todo esté contaminado por la corrupción y la inmoralidad.
Sí, ha de haber una revolución. Y esa revolución ha de ser interior, de unidad de la conciencia. Pero, la tiene que hacer cada cual. Porque no podemos disculparnos y escudarnos el no hacerla, diciendo que estamos solos, de que no tenemos apoyos ni acompañamientos.
La revolución es cosa de uno. Porque obligar a otro a que la haga, eso no sería revolución en absoluto, pues sería una dictadura y tiranía como otra. Es decir, más división y fragmentación interna, más conflicto, violencia y guerra.
Puedo añadir que hay escuelas en que los niños están más de veinte años en barracones. ¿Qué dirán esos niños cuando sean mayores y se enteren del agravio que han sufrido por la humillación, que es estar en barracones cuando se despilfarraba el dinero en lujos y caprichos, en vanidades esnobistas?
Quiero decir que esas personas que hablan tanto de que ellos también son, o serán perjudicados por las decisiones de los gobiernos, que protestan por la corrupción e inmoralidad, etc., ¿cuántas cuentas corrientes tienen en los bancos y cuánto dinero hay en ellas, qué hacen con ese dinero estancado? Las palabras si no van acompañadas por los hechos sólo sirven para seguir dando vueltas en círculo sin fin.
Escritos y publicaciones, 16-6-2012
El actual establishment, todo el poder, sin la colaboración del Papa y su iglesia católica Vaticana, no sería lo que es. Es patético usar el nombre y las palabras de un revolucionario comunista -de todos por igual sean quienes sean- para hacer todo lo contrario. Por eso, la iglesia católica es una de las instituciones que no ha sufrido recortes económicos debido a la crisis económica actual. Ellos dicen que es por los servicios que prestan a los pobres, hospitales, etc. Como si solamente fueran ellos los que lo hacen, olvidándose delas miles de ONGS que hay por todas partes actuando en silencio ni pompa ni altavoces vaticanos, ni de prensa.
Las drogas como la marihuana, no la legalizarán porque los efectos que genera libera momentáneamente de tal manera, que las personas que no la toman son convertidas como marionetas y muñecos que no pueden ir más allá de su condicionamiento. Tal es el cambio psicológico y espiritual que genera al abrir las puertas de la conciencia real delo que son todas las cosas.
Ahora bien, como en todo, la droga si es usada para delinquir es devastadora porque es desinhibidora. Es como un cuchillo que se usa para cortar y despiezar la carne o los arbustos, si es usado para atacar alas personas los resultados son pavorosos.
La bondad es la ausencia de división y conflicto interno. Pero una cosa es un chispazo y otra cosa lo que nos gustaría que fuera: todo el tiempo. Pero la bondad es como pretender deshacerse del ‘yo’, o de la violencia, ¿es eso posible? Descúbrelo y veamos que es lo queda.
Hasta que no veamos que el más y más no tiene fin. Seguiremos divididos y en conflicto, al querer conseguir lo que no se puede. Porque todo forma parte del infinito. Y el infinito pase lo que pase, se diga lo que se diga, no tiene fin.
Para enviar la energía y las oraciones para que otro reciba ayuda, es necesario que uno esté en orden, sin confusión. Sin ninguna deseo de hacer algo o no hacerlo, simplemente viviendo haciendo lo que tenga que hacer, en comunión con ello. Esa es la manera en que no habrá división ni conflicto en nosotros. Y entonces es cuando uno está en orden con todo el universo, ayudando a todas sus criaturas ya todo lo que existe.
Si uno quiere estar libre del sufrimiento, tiene que comprender el ‘yo’, ver cómo funciona. Pues el ‘yo’, al aspirar, al desear cambiar la realidad que no le gusta, se divide y entra en conflicto con esa realidad incambiable. Por tanto el sufrimiento llega a su fin, cuando no hay división interna alguna.
Ahora bien, el sufrimiento físico no puede ser eludido. Aunque si no nos dividimos de él, el sufrimiento adquiere otra dimensión. Y ya no es solamente el dolor descarnado, absurdo y sin sentido. Y para ello, uno tiene también que ver y entender cómo funciona la vida.
La verdadera relación no es un negocio, donde no se impone nada al otro: ni el silencio, ni la colaboración ni la amistad, ni la seguridad y el cobijo. Porque donde hay esfuerzo no hay amor. Incluso esto último es un impedimento también, porque la verdadera relación es la que acepta toda la totalidad de la vida. Y entonces el esfuerzo, ya no es esfuerzo, al ir más allá de él.
Una cosa es la excelencia como consecuencia de la ausencia de la división y el conflicto. Y otra cosa es la también llamada excelencia en el ámbito técnico, material y científico, para obtener alguna ganancia en cualquier ámbito para conseguir beneficios crematísticos.
La unidad solamente la podemos experimentar recurrentemente. Ella llega caprichosamente y no se la puede manejar ni hablar de ella porque es efímera de instante a instante. Todo lo demás son especulaciones, distracciones y entretenimientos.
El que muchas personas lean algo, ya sea un libro, un diario, un blog, un gurú, etc., no quiere decir que sea bueno. Sino que se vende a esas personas que les gusta y que generan mucho dinero. Lo bueno, ¿puede ser algo que elige la masa, el mundo superficial y banal? Es la sociedad corrupta e inmoral la que genera la vulgaridad y la superficialidad, porque ella misma también lo es.
“Te cuento: estoy analizando cambiar de shampoo y de pasta dental, es algo que me esta carcomiendo hace bastante, debido a que un cambio así en una persona obsesiva de la limpieza y el orden como yo, seria un caos. Este problema estoy tratando de resolver… saludos”
Entiendo lo que quieres decir, Elner. Tienes que descubrir que el cambio te va a favorecer, o que no va a ser a peor. También has de descubrir porqué quieres cambiar. En todo cambio siempre hay alteraciones. Por eso si no es preciso y necesario, no es aconsejable que se toquen las cosas.
Respecto a que estás ‘analizando cambiar el shampoo’ y de pasta dental’, quiero decirte que el análisis no te va a resolver tus dudas y problemas. Porque el análisis está mediatizado y condicionado por el que analiza. Así el resultado del análisis no será lo que nos enseñará lo verdadero. Por tanto, hemos de actuar directamente sin que haya opción. Es como cuando uno ve que el semáforo está en rojo y pasan muchos coches veloces, con todo el peligro, ¿verdad que uno no piensa, sino que no pasa ni camina para cruzar la calle? Y esa acción es instantánea sin que medie análisis alguno.
Estoy de acuerdo básicamente contigo, Glasdis. Lo que pretendo decir es que hay drogas, como la marihuana, que no tienen los mismos efectos que el alcohol, son más místicas o espirituales, más aclaradoras del problema que es la vida. El problema está, en que si se mezcla con otras -el alcohol, etc.- el resultado ya no es el mismo.
Criticar a los demás, es ignorancia. Porque cuando criticamos a los demás no nos damos cuenta que nos estamos criticando a nosotros mismos. Pues nosotros somos exactamente iguales a todos los demás. Sólo cambian las circunstancias a las que nos enfrentamos. Pero las respuestas y reacciones son idénticas a todos. Por eso se dice que el santo que sufre, no vale nada. Porque es igual que nosotros: sufriente y gozoso, triste y alegre, falso y verdadero, confuso y armónico.
Y esa criminalización es la que hace que la marihuana y las drogas en general, generen más energía, más adrenalina. Porque la ilegalidad despierta y activa resortes nuevos nunca vistos ni imaginados. Pero al mismo tiempo también lleva toda la confusión de los que la persiguen y la combaten, y los que están enganchados y son adictos a ella, siendo capaces de hacer lo que haga falta con tal de conseguirla y consumirla.
Estas detenciones también son la consecuencia de la crisis. La crisis no solo afecta al dinero, lo afecta todo. Las consecuencias del desorden y confusión, la corrupción, generan más confusión y desorden. ¿Pueden los de arriba y los que mandan cambiar ellos su inmoralidad y corrupción?
Es curioso como hacen del dolor, el sufrimiento y la tragedia un espectáculo. La vanidad y la crueldad están en todo. No sería mejor olvidarse de todo el pasado de una vez. La filosofía dice: hombre limpio, hombre quieto.
La manera de erradicar la pobreza, y las muertes por el hambre, es no tener nada. Solamente comida, un lugar donde descansar y ropa. Y estar libre del egoísmo, que es la división y el conflicto.
Es curioso todas las frases y citas que se dicen y publican de una persona iluminada. Y es que a cada ocurrencia si se le pone el nombre del famoso iluminado siempre queda bien. Sin darse cuenta que cuando se hace de alguien un dios, todo ya se ha acabado.
¿Por qué no nos olvidamos de una vez de todo lo ocurrido en el pasado y encaramos el presente con una mirada nueva? Cuando más se tarde los das partes enfrentadas seguirán trabajando para si. Es decir, seguir haciendo lo que hacían antes pero sin la brutalidad, la crueldad y la violencia.
Hay que tener presente que cuando nos acostumbramos a una dinámica, por perversa y corrupta que sea, no queremos renunciar y morir a ella. Pero la fuerza de los hechos obliga a que hagamos lo que tendríamos que haber hecho sencilla y naturalmente.
Todos tenemos agravios, injusticias, nos han causado mucho dolor, pero todo eso fue ayer o hace unos años y por tanto todo eso es el pasado. Y el pasado está muerto. Y para qué perder el tiempo con lo que ya no es.
Darse las culpas unos a otros, es la superficialidad y así nunca se acaba. Por eso, si es que somos sensibles y serios, no podemos jugar a ese juego tan poco vital ni constructivo. Todos hemos pasado por ahí y hemos tenido que olvidarnos y atenernos a la vida, que siempre es el presente, el ahora.
El reto siempre es ahora. Y si ama la vida vive en el ahora.
Escritos y publicaciones, 17-6-2012
¿Por qué no nos olvidamos de una vez de todo lo ocurrido en el pasado y encaramos el presente con una mirada nueva? Cuando más se tarde los das partes enfrentadas seguirán trabajando para si. Es decir, seguir haciendo lo que hacían antes pero sin la brutalidad, la crueldad y la violencia. Hay que tener presente que cuando nos acostumbramos a una dinámica, por perversa y corrupta que sea, no queremos renunciar y morir a ella. Pero la fuerza de los hechos obliga a que hagamos lo que tendríamos que haber hecho sencilla y naturalmente. Todos tenemos agravios, injusticias, nos han causado mucho dolor, pero todo eso fue ayer o hace unos años y por tanto todo eso es el pasado. Y el pasado está muerto. Y para qué perder el tiempo con lo que ya no es. Darse las culpas unos a otros, es la superficialidad y así nunca se acaba. Por eso, si es que somos sensibles y serios, no podemos jugar a ese juego tan poco vital ni constructivo. Todos hemos pasado por ahí y hemos tenido que olvidarnos y atenernos a la vida, que siempre es el presente, el ahora. El reto siempre es ahora. Y si ama la vida vive en el ahora.
He leído tu entrevista, gracias por tu sinceridad. Y me he asombrado, pues pensaba que eso sólo lo podían hacer los orientales. Ellos les llaman devotos –aquí también aunque está más escondido y disimulado- y parecen verdaderos esclavos. Pero, los hindúes son muy extremos. Un rajá tenía un harén y al tener que transformar y modernizar su mansión, decidió cerrarlo y dar libertad a sus concubinas. Pero, hubo algunas que no querían salir y vivir de otra manera.
Aunque creo que tú te engañas, o nos engañas. Porque, ¿qué haces cuando aparece el odio hacia tu ídolo? Porque toda dependencia –que no es amor- genera conflicto que puede manifestarse en desavenencias, enfrentamientos, celos. Solamente una relación tan completamente entregada, puede ser adecuada cuando uno la asume con todo lo negativo que pueda generar. Y entonces, desde esa negación de uno mismo, florece el misticismo. Que es ir más allá de todo lo que el ‘yo’, y sus múltiples facetas, genera.
“No hay diferencia entre criticar y decir a la gente la verdad”.
Criticar es destruir a otro por gusto de hacerle daño. Y decir a uno la verdad tiene un efecto pedagógico. Cada uno sabe cuando crítica o dice la verdad. Hay otra actitud que es describir a alguien, que también es uno el que sabe si es una descripción limpia o si hay maldad en ella.
¿Qué pasa con las guerras? Todas están olvidadas. Y el que no las olvida, no puede vivir, está neurótico o amargado. Tú lo puedes comprobar en tu vida y en tus pequeñas guerras domésticas. Al final todo se trata de ver cómo funciona la vida: unas veces uno pierde y otros ganan. Y al revés, según el capricho de la vida. Por tanto, solamente se trata de ver cómo funcionan nuestros pensamientos. Todos somos nacionalistas, pero decimos que solamente el nuestro es el legal, el adecuado, al que le justificamos todas las tonterías y barbaridades.
Eso solamente se puede vivir cuando existe la nada, cuando la vivimos. Mientras la nada esté ahí, lo mundano que es el ‘yo’ con sus prisas o su somnolencia, no podrá ser. Ahora bien, ¿se puede invitar a esa nada y vacío? Eso llega cuando uno mira hacia otro lado, por sorpresa, cuando uno no busca ni desea.
"Ningún resultado es determinado. No se ve afectado por otros. El Espíritu conoce su divinidad".
Si decimos que si, como si decimos que no, nos estamos engañando. Y nos estamos dividiendo de la totalidad que todo lo abarca. Y de ahí llega el conflicto con sus miserias entre los opuestos, las peleas, las contiendas.
¿Por qué queremos ser tan dogmáticos, tan asertivamente positivos?
Gracias por tus datos e informaciones.
Se dice que es mejor enseñar a pescar que dar siempre peces. Porque así uno no es dependiente de nadie. Pero por lo visto, eso no es posible. Como tú has dicho ahora tenemos de todo: dinero, comida, máquinas y soluciones sanitarias, información rápida y en abundancia. También tenemos organismos y organizaciones como la tuya, pero los problemas persisten.
Hace un año me dirigí a un ministerio por teléfono y en una grabación me facilitaron otros ocho o diez números más, pero cada uno tenía otra grabación que decía que ahora, en estos momentos, no me podían atender. Y eso mismo sucede en todos los ámbitos: no hay voluntad ni moralidad para solucionar los problemas.
Por tanto, solamente uno tiene que solucionar su problema que es vivir sin corrupción, no vivir dividido ni fragmentado. Y si uno vive de esa manera hará las cosas cotidianas de manera que no generará las circunstancias para provocar la pobreza, el hambre. Si uno tuviera la necesidad de querer acabar con la pobreza y la miseria, no le importaría lo que tiene que renunciar y descartar. Sino que sería un gozo y alegría hacer las cosas en esa dirección.
Gracias Gladis. Tiene sentido lo que has informado.
“¿Es posible que haya ciertamente una experiencia de unidad, pero cuando la experiencia ocurre, no hay consciencia de ello, o puede ser recordado algún tiempo después?”
Lo que ocurre es la experiencia. Luego aparece el ‘yo’ que dice: ‘que experiencia más maravillosa’. Pero, en ese momento ya no existe. Mientras el ‘yo’ opere, no hay el fin del tiempo psicológico.
Si alguien quiere entrar que entre, si quiere no entrar que no lo haga y si uno se queda en la puerta, ¿por qué lo hace? Se le pregunta y aclara.
Hola Harry.
Pasan los años pero siempre hay algo que hacer. Y esto, si no nos desborda, es la maravilla de la vida.
Daniela, no te parece que no tiene importancia más luz o menos luz. La luz, o es o no. Si llega y está ahí, todo es perfecto pase lo que pase.
Escritos y publicaciones, 17-6-2012
Es superficial e ignorante. Pues el que la hace, seguramente la paga.
La inteligencia operando.
El problema de hoy es que siempre estamos mirando atrás por venganza y vanidad. Cuando todo eso está muerto. Los periodistas y sus diarios, los que quieren alguna ganancia, les gusta de remover y mirar al pasado. Por eso, siempre estamos diciendo que la culpa la tiene el otro. Pero eso no es así. La culpa la tenemos todos. Dentro de cien años lo verán como se ven todas las guerras. Cada uno se cree que tiene la razón y hace lo que puede.
En tantos problemas que hay en el presente, ahora, y parece como si fuéramos insensibles mirando atrás, como el que no le interesa el paro, la corrupción y la inmoralidad, los nacionalismos con sus banderas y sus estallidos pasionales. Lo que quiere decir que todo sigue igual, pues no vamos más allá de ese nacionalismo que creemos el verdadero y al que hay que defender aunque sea con crueldad, violencia y guerra.
¿Porqué todos los países aunque digan que la crisis es muy grave y hay que recortar servicios sociales, sueldos, etc., siguen gastando tantos miles de millones en los equipos de las selecciones nacionales de fútbol? Primero que nada porque todos son nacionalistas, segundo porque así se desvía la atención de los verdaderos problemas y se enfocan en la superficialidad y la banalidad.
Pero los verdaderos culpables de todo esto son los que eligen a los políticos para que les gobiernen, sabiendo que van a continuar con sus inmoralidades y corrupción. El problema está en a quién votar si todos son igual, si son políticos de raza y no van a dejar de hacer eso que siempre han hecho. De lo contrario no serían políticos con su deseo de ganar el poder.
Así que estamos solos, pues es uno solo el que tiene que resolver sus problemas. Y los problemas se solucionan con compasión y con amor. Lo que quiere decir abstenerse de hacer algún daño. Sino generar orden y no confusión. De lo contrario llega la anarquía. Por lo que el orden es amor.
Solo el corazón no sirve, pues el corazón puede falsear la realidad. Ahí están los nacionalismos que están muy dentro de los corazones, las religiones, las ideas y teorías políticas o de otra índole, por las que lloramos, nos emocionamos y matamos a otros para defenderlas e imponerlas.
Una pregunta, DK Mati: ¿Qué diría Platón si viviera ahora en Grecia o España y estuviera en el paro, con los recortes de las asistencias sociales, etc.? ¿No crees que tan culpable es el que provoca las circunstancias como el que responde a ellas?
Francisco, me has saludado en el chat. Y como te he dicho allí, lo mejor es que me digas lo que quieres o necesites.
Es bueno que nos comuniquemos. Y por eso, es que nos hemos hecho amigos. Yo no te conocía. Así que me has dado la oportunidad de poder conocerte.
¿Puede el universo equivocarse? ¿Puede una ola del océano equivocarse, una hoja arrastrada por el viento?
Un iluminado, ‘Tathagata’, haga lo que haga, llegue donde llegue, ha de ser sin conflicto. El resultado final de cada instante ha de ser sin conflicto.
Y a esos ricos inmorales todos los halagan y todo se lo consienten. El establishment -EE.UU. y Europa-, no consiente que allí lleguen las revueltas ni las revoluciones. Sus espías y manipuladores se vuelven flojos e inoperantes ante los montones de dinero y el poder que da.
Hola José Luis.
Te estás equivocando. Me han invitado esta mañana para ir a la página del grupo y he visto unas diez personas que querían entrar y yo las he entrado. De lo otro que me dices del grupo Ramana, no sé nada ni recuerdo nada. Lo siento.
Con afecto y con cariño.
He leído en el periódico… de hoy, la reseña que le han hecho a tu libro, donde se incluyen algunos comentarios.
No quiero decirte nada porque se haría muy largo. Solamente puedo añadir, que todo el problema está en ser libre de conflicto. No como una idea abstracta, sino de instante a instante. ¿Puede ser esto? Siempre no. Pero, cuando veo que estoy inatento es cuando vuelvo a estar atento.
He leído la reseña en el diario…, de tú intervención como ponente, en el CCCB, sobre ‘Los orígenes de la mente humana’.
El cerebro no ha inventado la mente. La mente ha aparecido a base de repetir las experiencias cotidianas de la vida. La pregunta es, ¿de dónde viene lo que llega cuando descartamos esa mente con tanta experiencia? Eso no lo sabemos. Sería, tal vez, tanto como si las hormigas pudieran comprender que volamos en naves espaciales y nos cambiamos partes del cuerpo.
Si el universo no es correcto -la física, la química, la energía- todo sería absurdo. Y el caos no dejaría funcionar con regularidad las órbitas del sol, la luna, la tierra.
Linda. "La vida suspira por la vida misma y el amor brilla a través de ella".
Pero también existe la muerte. Y la muerte tiene su trabajo, que es matarnos.
Escritos y publicaciones, 18-6-2012
Uno tiene que ir del exterior al interior a la hora de ver lo que sucede. Porque si nos quedamos sólo en nuestro interior, podemos equivocarnos. La mente puede tener la capacidad de ver e inventar, de oír, cosas que no son reales. Solamente tenemos que observar a los que han inventado otra idea y teoría religiosa o política, que para imponerla tuvieron que hacer una matanza de millones de personas con todo su sufrimiento y su horror.
Los aficionados a los toros, y los que defienden esa macabra costumbre y espectáculo, también dicen que el toro no sufre, que ha estado criado para ese fin que le dan: torturarlo y asesinarlo violentamente por diversión y entretenimiento.
Pensar que el hombre vivió en algún momento en el orden, la felicidad, etc., eso no es posible. Porque el hombre para sobrevivir tiene que alimentarse. Y alimentarse significa que ha de matar para poder comer. Y ahí es donde comienza toda la división y el conflicto. Por tanto, nadie en esta vida puede tener esa paz y felicidad romántica e irreal.
Acabo de leer tu escrito-columna, ‘Reconciliación y convivencia’, de ayer en…
Gracias por lo escrito.
Para ver un problema en todo su esplendor, hay que verlo en su pequeñez y en su grandeza. Si tú y yo tropezamos por la calle al entrar a un lugar, o en el trabajo entrando y saliendo del despacho, ¿por qué te tienes que disculpar por un hecho que ha sido provocado por infinitas circunstancias que no podemos saber y por tanto controlar? Ahora en lo grande: Cuando estalla una guerra y los dos bandos cometen toda clase de humillaciones, crueldades y atrocidades, y esa guerra termina, ¿por qué no olvidarse de todo lo ocurrido y dejar de buscar quién tiene más culpa y ha sido más cruel? El que gana la guerra, siempre volverá a ganar después de la victoria, por eso es el ganador.
Recuerda que toda justificación, toda explicación, toda violencia y lo que la provoca, como su represión, pueden ser infinitas. Por eso, al hacer tanto hincapié en lo que ha sucedido, quiénes son los culpables y qué hacer con ellos, es proseguir con esa misma guerra pero a otro nivel. Por tanto, todo eso es venganza, vanidad, chulería, rabia y odio contra el otro, que es considerado como el enemigo.
Cuando lo que habría que investigar son las causas que han provocado el inicio de tanta violencia y crueldad. Pero claro, eso al vencedor no le interesa porque saldría la verdadera verdad. Ni tampoco le interesa al derrotado, porque está agotado, débil y vencido, y prefiere aceptar lo que sea antes de que todo pueda empeorar para él.
Finalmente, si se habla de pedir perdón, habrían de pedirlo los dos bandos enfrentados. Pues los dos han agraviado, humillado, maltratado y asesinado. Pero, eso es mucho pedir para el vencedor que por serlo lo tiene todo a su favor: es decir, tiene el poder.
Todo lo más que podemos hacer es observar a una persona. Pero no se la puede seguir. Si eres sincero y veraz, verás como no es posible.
He leído la reseña que te han hecho en el diario…, de hoy, donde aparecen algunos comentarios tuyos.
Estoy básicamente de acuerdo contigo. Y es de agradecer que digas lo que dices. Aunque eso es muy viejo. Esa corrupción e inmoralidad todos la llevamos dentro. La diferencia es que unos son conscientes de ella, porque la ven. Y otros, ni son conscientes ni la ven, ni la quieren ver. Esa es la diferencia que hace que unas personas generen orden y otras desorden y confusión.
El verdadero problema que tiene J. M., es que es católico. Y ese mismo problema lo tienen también los budistas, los musulmanes, los judíos, los hinduistas, etc. Sólo el que no es nada, no tiene los problemas que genera eso que es. Solamente somos seres humanos. Y lo mismo sucede con el nacionalismo, ya sea grande o pequeño.
Ayer os vi cuando hablabais sobre la edad media, las circunstancias que la provocaron, sus consecuencias y su desenlace.
¿Por qué no vemos la vida como un río, donde el agua forma toda una continuidad interconectada, unida? ¿Por qué fragmentamos esa realidad que es lo total, la totalidad? Evidentemente, es porque nosotros estamos internamente fragmentados, divididos y en conflicto. Y esa división al exteriorizarse genera nuestra manera fragmentaria de vivir. Dando vida al ‘yo’ y al ‘tú’, al ‘nosotros’ y al ‘ellos’. Lo que nos hace que seamos fanáticos de una religión determinada -no de la religión que busca la verdad-. O fanáticos y obtusos en nuestras opiniones que se traduce en una mala relación con los que están a nuestro alrededor y también lejos.
Hay algo que puede ser perturbador: el vencedor siempre tiene un grado más de crueldad porque él ha sido el último en ejecutar la violencia al tener que derrotar o asesinar al que considera el enemigo.
Todas las civilizaciones al imponerse, tuvieron que hacerlo por la fuerza, por la crueldad y la violencia. Podrían llevar consigo palabras como civilización, poner orden y justicia. Pero claro, eso siempre es relativo porque cual es el patrón que determina la crueldad, el desorden y la injusticia. Los colonos, ya sean antiguos como modernos, siempre se imponen a los colonizados. Los colonizados matan rudamente, los colonizadores matan más finamente, y así en todos los ámbitos. ¿Dónde está la diferencia? La diferencia siempre la impone el más poderoso, el vencedor, que impone su manera de vivir, su escala de valores y costumbres.
Ahora mismo lo vemos en la actualidad: los musulmanes dicen de ellos que son crueles, etc., ya sea con las mujeres, en sus actos terroristas, en su concepción de vida. Pero los que lo dicen también son crueles: cada día de asesinan mujeres, que antes han sido maltratadas, en cualquier lugar donde viven los que se dicen cristianos civilizados; los métodos bélicos y violentos son tan escalofriantes como pueden serlo echar bombas en cualquier gran ciudad del mundo. ¿Dónde está la diferencia? Está dentro de uno. Porque vive dividido y fragmentado de la realidad, de lo que es la vida, y tiene miedo a los demás que consideramos como un peligro.
Y, a todo eso se une la tremenda brecha interna de decir una cosa y hacer otra. La civilización cristiana, es la discípula de Jesús, el líder de la bondad, de la paz y la no violencia, de la caridad suprema, de la locura de cuando te golpean sentirte feliz y pleno por amor al agresor. ¿Puede una persona cristiana no estar dividida internamente, y vivir en una neurosis continuada, oyendo cada día desde su más tierna infancia lo que tienen que hacer sin hacerlo en absoluto?
Por tanto, asumamos nuestra carencia de verdad y tal vez la división interna llegará a su fin. Y si no estamos divididos internamente, los problemas que siempre hemos tenido, y seguimos teniendo ahora, no los tendremos.
Así que el principal problema que tiene una persona religiosa, es deshacerse de la fragmentación y la división interna. Todo el trabajo que no vaya en esa dirección -la vanidad, persecución del placer, que incluye la búsqueda de seguridad, etc.-, quiere decir que somos idolatras y paganos.
Escritos y publicaciones, 20-6-2012
Para poder saber qué es la realidad, hemos de ir del exterior al interior. Si mi mente dice, delante de una montaña, que no existe. uno tiene que subir a ella. Y entonces, sabrá si la montaña es verdadera o no. Y así en todo: con la edad, las capacidades, todas las supersticiones y las creencias, etc.
He leído tu crónica, “‘Occupy Protesters’ Rights Must Be Protected, U.N. Says; U.S. Says Nothing", en el The Huffington Post, de hoy, via Facebook.
Todo poder genera conflicto, las protestas, al querer perpetuarse. Y los que están fuera del poder siempre sufren las consecuencias del poder. Por tanto, el problema es tanto del poder, como los que no lo tienen. Si tú mandas en tu casa y pones a tus hijos unas normas para que funcione adecuadamente el hogar donde vivís, eso va a generar división y conflicto. División entre lo que tú dices y lo que tus hijos quieren. Pero, hay un hecho. Y es que el hogar tiene que funcionar sin que se colapse.
Ahora bien, todo el problema tiene una buena solución si el que manda y tiene el poder tiene una buena conducta, tiene sensibilidad, tiene compasión y amor. Porque todo lo que haga y diga, las normas, los consejos, las decisiones, estarán encaminadas no a su propio beneficio, sino al beneficio de todos los miembros de la familia.
Por tanto, el problema siempre es de uno. Y es uno el que lo tiene que resolver. Y para resolver un problema uno tiene que mirarlo tal y como es, no como me gustaría que fuera. Así que si tú quieres orden en tu hogar, con tu esposa, con tus hijos, con tus vecinos, tú tienes que generarlo con tu comportamiento cotidiano.
Y si tú generas ese orden la autoridad, sea quien sea, nada podrá hacer contra ti. Porque tú no haces nada contra ella.
¿Puede haber alguna guerra que sea humanitaria? Si decimos que no, ya hemos terminado y concluido la investigación. Y si decimos que sí, también hemos acabado. Es decir en ambos casos estaremos bloqueados. Por tanto, uno tiene que verlo sin ningún prejuicio o intención particular.
Así que sea sincero y vea lo que tiene de absurdo y de falso, o lo que tiene de verdadero, esa expresión de ‘guerra humanitaria’.
El conocimiento es el reconocimiento de algo. Es preciso conocer la hora que es para no faltar al respeto de una cita o ir al trabajo. Es preciso reconocer que el cuchillo muy afilado hizo que me cortara y sangrara en un dedo de la mano. De lo contrario no podríamos sobrevivir. Los animales hacen eso ante el fuego, la lluvia, el frío y la calor. Nadie les ha dicho nada pero ellos lo saben.
Dicho esto, el problema de conocimiento y el reconocimiento llega cuando lo trasladamos al ámbito psicológico. Cuando decimos que el vecino es estúpido y no morimos a eso, cuando no vamos más allá de esa opinión, es cuando el conocimiento es un impedimento y un obstáculo para la relación. Pues, si no vamos más allá de todo lo que somos, habrá división y conflicto.
La identificación es el veneno del nacionalismo, de las religiones organizadas, de los sistemas políticos. Que a su vez generan más identificación dentro de ellos mismos. Y así es como un juego sin fin, que lleva a la confusión y al desorden, causado por el conflicto entre cada parte identificada con otra. Es decir, es como una persona desvalida que no puede caminar sin ayuda de una persona y va agarrándose a cada una que encuentra. Esto es así, porque tenemos miedo al vacío, a la nada, a la libertad.
Pero no nos engañemos todos somos personas desvalidas psicológicamente.
Los ricos son pobres psicológica y espiritualmente. Si no tuvieran esa desgracia y esa pobreza, no serían ricos, no lo consentirían.
He leído tu entrevista en el diario… de hoy. Gracias por tus comentarios aunque sean obtusos y enrevesados.
Para catalogar y ver la valía de un líder, de una persona, solamente hay que ver cuales son sus actos. Las palabras no tienen ningún sentido ni valor, si no van acompañadas por los hechos. Pero, los líderes todos son como los que los eligen: vulgares y superficiales. ¿Podrías tú, ir a un restaurante que no te gusta? No irías, si es que estás cuerdo y despierto. Entonces, de la misma manera cuando alguien elige a una persona, para que gobierne e intente resolver los problemas, es porque es como nosotros. La ilusión, que es ignorancia, nos hace decir que somos diferentes.
En Israel si los dirigentes son racistas, es porque los que los votan también los son. Primero, porque todos somos racistas, vivamos donde vivamos. Y segundo, porque el establishment lo tolera y consiente, porque le interesa. Ya que Israel es el policía de un gran campo de concentración que es Palestina. Y, también hace el papel de gendarme de toda la zona de Oriente Medio.
¿Podría alguien que no fuera racista vivir en un país racista? Aunque viviera por cualquier imperativo e imponderable, no apoyaría a los racistas de ninguna de las maneras.
El amor es no estar dividido ni en conflicto internamente. Por tanto cualquiera, sea quien sea, lo puede experimentar. Esa es la maravilla y el drama del amor, que uno puede sentir amor al hacer lo que hace, mientras otro lo ve negativo, pecaminoso y rechazable.
¿No será que ya se han acostumbrado a ir de aquí para allá, salir en los diarios y TV. y necesitan seguir con esa dinámica? El pasado está muerto. Y ya no juega nada. Son los vivos que no se liberan de él los que generan los problemas.
Finalmente el problema todavía está ahí: yo sí que puedo, pero tú no puedes y no te dejaré. Por lo que el conflicto sigue sin resolverse. Y ese es el drama de la vida, desde siempre. Lo vemos ahora en la crisis: unos no responden de su corrupción y los otros la sufren en sus carnes, en los recortes. Ese es el problema desde hace miles de años.
¿Qué quieres contarme? Escribe claro lo que quieres que comentemos y así podremos empezar. No tengas miedo de abrirte y empezar a ver lo que tienes dentro.
Escritos y publicaciones, 20-6-2122
Los conflictos tienen una misma raíz: el agravio, la injusticia, la desigualdad. ¿Por qué no podemos consentir a los otros lo que hacemos nosotros con tanta naturalidad? ¿Es porque necesitamos ser crueles, sacar placer haciendo daño al otro, con el que podemos? Pero eso trae malas consecuencias, pues la psicología es universalmente igual para todos. Todos participamos del mismo paradigma mental de: si tú me agravias y desprecias, si no me dejas -prohibes- hacer lo que tú haces, el conflicto está servido. Puede estar latente y escondido, pero en cualquier momento puede estallar. Eso sucede en las dictaduras: cuando estalla la rabia y el odio contra los dictadores, ellos se asombran y se preguntan por qué esa revolución y las revueltas.
Si queremos el fin de la violencia y la guerra, uno tiene que estar despierto y alerta a toda su brutalidad, su crueldad, su falta de sensibilidad hacia el dolor de los demás. Eso cuando se tiene el poder parece imposible, por eso una persona pacífica no quiere el poder. Porque en el poder está el germen de la corrupción. Y corrupción siempre es agravio.
Si yo soy de piel negra, un negro, y tú eres de piel blanca, mientras no estemos más allá del color de la piel, de la raza, y todo lo que va con ello, ¿qué relación verdadera puede haber? Nos miraremos, nos tendremos miedo, huiremos de nosotros.
Si huimos, si vemos lo superficial de las personas, todo seguirá como siempre: la completa ausencia de afecto entre nosotros. Sé que hay mucho que reprocharnos, pero vayamos más allá de eso que es el pasado, de esa cuenta corriente de agravios que parece sin fin.
No se trata de saber, sino de ver. El ego, el ‘yo’, siempre estará con nosotros. Pero nosotros estando atentos a esa actividad divisiva, podemos ir más allá del ego. Por eso, cuando me doy cuenta de que estoy inatento es cuando vuelvo a estar atento. Y la atención es el orden en acción, que es amor.
Ser vigilante quiere decir ser consciente de lo falso. Es ver cada pensamiento y seguirlo hasta que se extinga. Es como cuando ves pasarlas nubes por el cielo. El cielo no desaparece, sino que hay una nube que se interpone. Pero, claro si uno no es consciente de lo que es, es cuando siente que llega la confusión, el desorden de no ver todo el vasto panorama.
Para que no haya violencia. No tiene que haber conflictos. Que los motivan los agravios, la injusticia, la falta del respeto y la crueldad. ¿Por qué no queremos que los otros hagan lo mismo que hacemos nosotros con tanta naturalidad? Es porque somos egoístas, insensibles y crueles. Luego, como los dictadores, nos preguntamos porqué esa violencia y revueltas. Pero mientras no haya igualdad, paridad, compasión y amor en todos los ámbitos, la violencia y todo su horror continuará. Tanto daño que nos hemos hecho unos a otros, pero todavía no lo hemos comprendido. Y queremos venganza, destruir al otro que consideramos nuestro enemigo.
He leído tu entrevista en el diario… de hoy.
Y quiero decirte que algo que nos clarifica y reconforta, es darse cuenta que el observador es lo observado. Es decir, cuando estaba leyendo tu entrevista, entre tú y yo no había ninguna diferencia psicológica. No había diferencia como suizo o de otro sitio, como casado o soltero, como con hijos o sin ellos, con tu particularidad física y la mía. Y cuando esto se comprende verdaderamente, no como una idea, entonces no hay división alguna entre personas.
Todos sufrimos, nos alegramos, todos necesitamos afecto, necesitamos que se nos respete, necesitamos casa, comida y ropa. Y por eso todos hollamos la misma tierra. Cuando vemos que cualquiera, sea quien sea, es lo mismo que yo, sucede que el miedo desaparece. Porque donde hay compasión y amor no puede haber miedo.
Y finalmente, lo mismo sucede con los animales, con los árboles, que no existe ninguna división entre ellos y nosotros. Vivir de manera que el observador no genera ninguna división con lo que tenemos delante, genera tal sensibilidad que uno no quisiera pisar nada cuando va al parque o al campo, cuando molesta a alguien por necesidad.
Si en cualquier pleito o conflicto, una guerra, uno cree que tiene solamente la razón, esa es la causa por lo que ha llegado el conflicto, la violencia, la guerra. ¿Nos creemos que somos los elegidos que podemos hacer lo que queramos despreciando a los demás, prohibiendo lo que nosotros hacemos? Si tuviéramos compasión y amor, las causas de los conflictos no las generaríamos.
“Esta es la esencia del mensaje de Buda. La paz no es que se practica: es un subproducto de la conciencia. El amor no es para ser practicado: es un subproducto de la sensibilización. La justicia no es que se practica: es un subproducto de la conciencia”.
Y para que la paz, el amor, la justica y la conciencia sean, no ha de haber conflicto alguno dentro de nosotros.
“El amor no es algo que se da cuenta cuando alguien viene a cuidarlo a lo largo de su vida, pero uno ama a todos sin razón alguna”.
El amor no quiere nada. Porque es la nada misma. Pues si hay intencionalidad, aunque sea para hacer algo bueno, el amor será un producto y el resultado del deseo. Y todo deseo, aunque sea el deseo de no tener deseos, nos deja en conflicto. El amor es sin conflicto, sin dualidad como mejor o peor.
Si tratamos de equilibrarnos, eso será un motivo y una dirección, un deseo, donde la verdad que es amor no podrá ser. Pues el motivo, genera otro motivo que hace de contraparte, generando dualidad y el conflicto.
Para que llegue el amor, uno ha de estar más allá de la memoria, que son las palabras y las imágenes, donde la noción del bien y del mal no existe.
"No quiero pertenecer a ningún grupo que fuera capaz de aceptarme como miembro".
Eso quiere decir que él se conocía a la perfección y sabía cómo funcionan las personas.
Toda la estructura mental está sustentada por la ignorancia del ‘yo’ que se cree diferente de los demás, como si fuera una persona especial y aparte. Y es que siempre caemos en la misma trampa de querer llevar el patrón físico a lo espiritual y psicológico. Existe las diferencias físicas: uno es fuerte y poderoso, y otro es débil y sencillo, etc. Y de ahí nacieron los reyes y los príncipes.
Pero en el ámbito espiritual y psicológico todos estamos pisando la misma tierra: sufrimos, sentimos gozo, somos miedosos y asustados, nos necesitamos todos y vemos la unión entre todo lo que existe.
¿Por qué eso que vemos tan claramente no lo podemos llevar a cada acto de nuestra vida cotidiana, en el trabajo, en las relaciones familiares, etc.? Eso es porque no lo vemos en realidad, lo vemos como un concepto o una idea. Si lo viéramos como el peligro que es, en el que va nuestra vida, tal vez veríamos y actuaríamos a la vez.
Escritos y publicaciones 21-6-2012
Es un error creer en la excepcionalidad de Jiddu Krishnamurti, más allá de la excepcionalidad que todos tenemos con respecto a otro. Lo que lo diferenciaba es que esa excepcionalidad estaba muy desarrollada. Es como cuando todos somos pobres, el menos pobre parece un rico. Pero, eso es una ilusión: siempre seguiremos siendo pobres. Es decir, somos el quiero pero no puedo. Solamente se puede ir más allá de esa impotencia. Y que cada uno vea y descubra qué es lo que queda.
Cada uno que haga lo que tenga quehacer. Libertad quiero decir, ser libre para mirar e investigar en todas las direcciones posibles.
Hace muchos años, tuve una conversación con un niño, hijo de un vasco. Como la violencia y sus consecuencias se sucedían casi todos los días, estaba en boca de todos. Yo le dije que al gobierno centralista no se le podía vencer, porque ellos tenían los tanques. Y contra un tanque un hombre nada puede hacer, pues él lo destruiría. El niño contestó: ‘Da igual, habrá otro que lo remplace, y otro más’. Pero, las consecuencias son centenares de muertos entre las dos partes enfrentadas, las cárceles llenas de los que querían cambiar ese nacionalismo centralista por la independencia por medio de la violencia. Y todo el horror, el dolor, el sufrimiento que ambas partes provocaban.
Para tener la independencia política, antes uno tiene que ser independiente internamente de todo. Para que esa independencia interna se manifieste afuera en lo externo, en la vida cotidiana. Es decir, primero uno es el problema, después si se resuelve el problema eso transciende a todo lo demás: las personas, las instituciones, la política, etc. El problema está en que no cambiamos psicológicamente, internamente, y queremos cambiar lo de afuera, la sociedad, Y eso es absurdo. Y así llevamos trescientos mil años. Siempre lo hemos hecho así.
La teología en el sentido de la búsqueda de dios es algo imposible. Y por eso es toda una mentira. Pero en su ámbito estrictamente filosófico sobre el origen de las cosas, sí que es útil.
A dios no se le puede buscar porque tal dios no existe y existe. Ahí está el problema para los que se agarran al si o al no. Los que hablan de dios, no se dan cuenta que al nombrarlo eso no es lo verdadero, la verdad, que está más allá del pensamiento. Y esto que acabamos de mencionar ya es teología. Los que creen en dios, su teología es pobre y raquítica, pues se emboban con esa palabra y dejan de investigar.
Cada vez nos damos cuenta que aquello era una guerra, que cada cual hacía lo que podía, para no provocara los que tienen por encima de él. Pero en toda guerra está todo claro: exterminar al que es considerado el enemigo. Por tanto, el que no quiere la violencia ni la guerra, no tiene escusa porque ya sabe lo que tiene que hacer: no participar.
Los que quieren la paz, hacen lo que haga falta para que no haya guerra. Los que se sustentan y viven dela guerra, la provocan y la ven por todas partes, tienes cuarteles, ministerio de guerra, espías, se gastan billones en armamento, en prácticas y ejercicios preparatorios. Es tanto su condicionamiento, que no se dan cuenta que siembran su horror y el de los demás.
¿Qué responsabilidad tienen los periodistas, los diarios, la TV., para que una guerra sea? Sin el apoyo de estos colaboradores no sería posible encubrir y engañar sobre la realidad de porqué es una guerra.
Un diario, un cadena de TV., son un negocio como otro. Si los clientes quieren violencia y guerra, se las darán, con tal de que sigan leyendo el diario y vean la cadena de TV. Y por eso, todo es una mentira y un engaño.
¿Qué hacer? Vernos cómo somos internamente y comprenderlo para descartar todo lo que genera la división y el conflicto, que es lo que genera la guerra. Sin antes no haber investigado y visto ese paradigma de conflicto en que vivimos, siempre seguirá la violencia y la guerra.
Fruto de ese conflicto son los nacionalismos, sus equipos nacionales de fútbol, sus banderas, sus himnos, etc., todo ello para favorecer el ardor que hace que nos dividamos y vivamos en conflicto.
Por eso, no haga caso a diarios ni a la TV., pues están al servicio del establishment, que siempre es favorable al nacionalismo y a la guerra. Por eso, el problema es de uno, pues todo nace dentro de uno.
Parece que todavía no hayan tenido bastantes desgracias y asesinatos, que quieren que prosiga todo eso. Es porque se han viciado a esa manera de vivir con su nacionalismo ardoroso y cruel, que se enfrenta a otro nacionalismo, como si fuera un campeonato de fútbol. Necesitan leer los diarios que los halagan, oír al político que les dice lo que quieren oír, hablar con los suyos para preparar estrategias como si fueran al combate.
Pero cuando les toca perder algo se ponen más rabiosos y crueles, insensibles siendo capaces de hacer actos medio dementes.
¿Por qué quieren vivir de esa manera? Es por su pobreza psicológica y espiritual, tan aferrados a lo superficial, que disfrutan de la banalidad, les molesta que les cuestionen su sociedad y su manera de vivir cruel e insensible. Ser insensible es decir: ‘Yo si que puedo ser lo que quiera, pero tú no lo puedes y no te dejaré’. Así que el conflicto está servido. Y esta actitud tan desgraciada es lo que lleva a la guerra. ¿Cuántas guerras hemos tenido? Algunos dicen que unas treinta mil. Pero no hemos aprendido. ¿Por qué? Porque tenemos miedo.
Una pregunta: ¿Esa entidad llamada Ramana Maharshi, es ahora consciente como cuando estaba en el cuerpo y vivía? ¿O ha vuelto a la nada, desde donde se originó y creó, como les pasa a un pájaro, a un gato o mono?
Creo que hay que aclararlo, si es que puedes, Satish.
Recordar y repetir parecen un problema, pero no lo son. Es como comer, por mucho que variemos siempre acabamos repitiendo por simpatía con los alimentos o por comodidad. Cuando explicamos o informamos de cosas serias y con importancia, pasa lo mismo. Pero si uno tiene hambre de eso que aparece, te lo comes. Si no tienes apetito pasas de eso.
¿No les parece que a pesar de todas las palabras consideradas espirituales y sagradas, la foto y el personaje son todo un espectáculo, de vanidad?
El problema del conocimiento, Gladis, es que siempre es viejo, porque es el pasado depositado en la memoria. Y nosotros queremos llegar a lo nuevo y no tocado por el pensamiento. Pues, todo lo que se diga de si dios existe o no, puede ser negado como afirmado infinitamente. Por tanto, todo se queda en un especulación, un entrenamiento. Entonces en el estado de no saber, es cuando llega lo nuevo donde la mente no puede ir.
Escritos y publicaciones, 22-6-2012
Hola María.
Gracias por tu interés en responder.
Voy a preguntarte: ¿por qué un juez juzga? Si juzgas te juzgarán. Y ahí empieza el peligro. Te lo digo por qué no te has dado cuenta que la víctima y el verdugo se intercambian los papeles. El que actúa como verdugo, puede pasar a ser víctima, que es lo que le ha pasado a tu padre. Pero si lo aceleramos al máximo, a cada instante nos intercambiamos los roles: un compañero de trabajo o en la pareja, uno puede ser arrogante y al momento siguiente ser vulnerable.
Por eso, juzgar es tan peligroso porque al ser todos iguales psicológicamente, todos hacemos lo mismo aunque sea a un nivel diferente. Y una de las cosas que más nos hace peligrosos es que nos hacemos dependientes de lo que hacemos y repetimos cada día. Un juez, como un funcionario que es, actúa rutinariamente, sin dar importancia a lo que hace. Y las decisiones de ciertas personas son muy importantes porque en sus manos está el futuro de las personas. ¿Puede un juez no errar? De la misma manera que los jueces que han encausado a tu padre, que según tú han actuado erróneamente y con maldad, todos los otros también lo pueden hacer. Porque todos participamos del mismo paradigma de la vida, que es sobrevivir, la manera de obtener el alimento y la casa, etc., que nos exige un determinado comportamiento. Y entonces el miedo nos hace obedientes y vulgares, sin querer cuestionar. ¿Entiendes todo lo que hay implicado en lo que te estoy explicando.
Un juez, después de estar cincuenta años juzgando se dio cuenta de todo lo que había hecho y decidió no juzgar más. Eso es lo mismo que uno que conduce coche y se da cuenta de todo el peligro que hay en ello. Y deja de conducir.
Si alguien me pregunta, como lo han hecho algunas veces, en qué estás pensando. No se puede contestar, porque los pensamientos son como un río que no está quieto, siempre está en movimiento.
La vanidad en sí es como es y eso no se puede cambiar. Lo que decimos es que lo vano, que es una fantasía, es una distracción más. Y sino hay atención, la puerta está abierta para todos los males, es decir, el desorden y la confusión.
¿Qué importancia tiene tener unos metros más de cuerda que otros, si seguimos estando atados a un poste? Puede que venga alguien y me diga: ‘Mira yo puede llegar hasta allá más que otros’. Eso es todo. Todo es una ilusión, fruto de la ignorancia.
La vida para que tenga realmente sentido lo tiene que abarcar todo. De lo contrario uno no es entero y completo, vive fragmentado. Por tanto esa totalidad, que nos hace completos e integrales, también abarca a la contradicción.
Más desde otra explicación: el amor es lo nuevo lo que la mente no puede tocar.
En otro grupo Jiddu Krishnamurti -este en español- también se suscita el hecho de que JK es contradictorio. ¿Por qué se sorprenden y les extraña? Si se conocieran de verdad, no se extrañarían. Porque se darían cuenta que el observador es lo observado. Es decir, JK es igual que cualquier persona, con la particularidad que tenía una mente muy desarrollada. Pero eso no quiere decir que estaba fuera de la contradicción y de todas las miserias humanas. Él era capaz de enardecer con gritos a un boxeador para que golpeara fuerte al otro boxeador en un combate.
Solamente hemos de conocernos a nosotros. Y si te conoces, entonces conoces a toda la humanidad sin exclusión alguna.
“Usted es sólo eso: extensión silenciosa e infinito”.
Eso es nuestra esencia. Pero, la cuestión es: ¿Por qué no vivimos en ese silencio? Porque internamente somos fragmentados y divisivos. Y el silencio, para que pueda ser, tiene que haber la unión con todo. Ese silencio no es la ausencia de ruido, el no hablar, la no acción, Ni tampoco se puede imponer, forzar para que llegue, practicarlo.
¿Podemos vivir de esa manera, a esa intensidad? Ese silencio tan raro es el amor. Donde nada molesta ni perturba, donde lo nuevo por serlo no sabemos lo que es. Pues lo nuevo las palabras no lo tocan. No es posible porque lo nuevo es ahora, donde el pensamiento no puede operar. Y las palabras son tiempo, son el pensamiento.
Huir no resuelve el problema de la realidad. El problema está en comprender cómo funciona el pensamiento, que es el ego, el ‘yo’. Y el ‘yo’ tiene la capacidad de inventar lo que sea para que toda esa confusión en la que vive pueda proseguir. Por tanto, la solución está fuera del ‘yo’.
Así que el pensamiento, el ego y el ‘yo’, son una misma cosa. Pero, ellos no van a desaparecer. Por eso, uno ha de ir más allá de ellos. Es como la edad, cada uno tiene la que tiene. Y no podemos cambiar ese hecho, como tampoco podemos cambiar nuestra imagen física, pero si que podemos ir más allá de esas circunstancias.
La cuestión no es tan sencilla, Satish. Porque cuando ayudamos a cierto nivel a unos, somos crueles con los otros. Si tú alimentas solamente a un animal que vive en libertad, se convierte demasiado poderoso y hace demasiado daño a los demás. Y tú recibes ese mal karma. ¿Te das cuenta de todo lo que hay implicado en ello?
Gracias, Daniela. Si, estoy de acuerdo en que todas esas malas cualidades tienen que desaparecer. Pero, ¿cómo lo haremos para que no se genere el conflicto entre la parte que quiere cambiar y la que se resiste? Porque somos especialistas en usar palabras y conceptos, ya sean de oriente o de occidente. Pero ese sentido complaciente y vanidoso, no nos va a resolver la división y el conflicto interno que todos tenemos. Entonces, ¿qué haremos, cómo lo solucionaremos para que de las palabras pase al hecho de que haya el silencio tan absoluto, eso que es amor?
Ya, entiendo Daniela. Lo que quieres decir es que se tienen que disolver los conflictos mediante la comprensión. Pero, si comprendemos los conflictos, es decir comprender el ego, el ‘yo’, que genera el pensamiento, nos daremos cuenta que siempre estarán ahí, que no se pueden quitar porque la realidad es así, la mente-pensamiento global vive en conflicto. Y como nosotros formamos parte de esa mente-pensamiento global, hemos de participar de ella en lo negativo y en lo positivo.
Por tanto, viendo que cualquier cosa que haga, cualquier movimiento, me va a dejar en le mismo conflicto, ¿qué haré, seguiré luchando como lo hacemos ahora sin fin? ¿O, viendo todo el movimiento infinito del ‘yo’ -persecución del placer, vanidad y entretenimiento, la superstición y la idolatría, etc.-, que es el pensamiento, iré más allá de él?
¿Quién dice lo que es justo, puede haber un manual que diga lo que es justo o no? No voy a seguir con esa dinámica de respuesta y contra respuesta, pues al ser todo infinito esto también lo es. Lo que sí que digo es que la verdad, que no es ni la tuya ni la mía, está más allá de las palabras que digamos o no digamos. Solamente hace falta, que seamos afortunados y la veamos.
Si es verdad, que de la no acción, hay acción total que es orden. Pero, tú estás dispuesto a asumir lo que venga -el karma- cuando juegas poniendo en peligro tu libertad y tu vida. Cuando hacemos algo muy grueso y peligroso, tenemos tiempo para sopesarlo. Y entonces si seguimos adelante, hemos de saber lo que puede llegar. Si sale mal, ¿por qué te tienes tú que involucrar en un problema que no es directamente tuyo?
No digo con esto que no se haga. Sino que estoy mirando todo el problema.
Escritos y publicaciones, 23-6-2012
El punto de inflexión es nada por arriba para cubrirme ni nada por abajo para poner los pies.
“Cuando el cerebro está en silencio, es la mente“. O la conciencia y la percepción pura.
Tengo que decirte que al leer tu entrevista, me he quedado sorprendido. Gracias por habernos contado tus creencias, tus métodos y maneras.
¿No ves qué creer en un hijo de dios parece absurdo? Tendrías que decir: la idea que yo tengo de dios -de mi dios-, es que es el padre de un único hijo. Entonces, te pregunto: ¿Qué padre es ese qué sólo se lo da todo a un hijo? Es todo tan infantil. Si existiera dios –no lo niego ni lo afirmo-, tendría que ser igualitario con todos, pues él tendría que ser toda bondad y amor.
Lo más ridículo es pretender dar un tratamiento a dios en términos humanos, como si se pudiera tratar de la misma manera como tratamos aun vecino o a un compañero.
Respecto a la mente, es ingobernable. Y por eso que la queremos gobernar es porque vivimos en conflicto. Eso es lo que hacen los religiosos: frailes y sacerdotes, devotos y supersticiosos, maestros y gurús, que pretenden concentrarse en una imagen, en un punto, en una idea o teoría, en un método o práctica, para que se aquiete la mente. Una mente aquietada por un método o disciplina, es una mente narcotizada, torpe e insensible. Y eso enlaza en lo que dices de dejar de pensar en lo que te molesta. ¿Por qué no dejar que eso que quiere salir nos cuente su historia? Así, si lo vemos y lo comprendemos, es entonces cuando podemos ir más allá de esa actividad del pensamiento.
La libertad no es hacer lo que uno quiere, sino lo que se tiene que hacer para que algo funcione. Queremos que la verdad, que es libertad, funcione. Y para ello uno tiene que ser verdadero. Un padre que se encarga de sus hijos, no puede ofrecer toda la libertad que desean sus hijos, pues todo se colapsaría, debido al desorden y la confusión.
Los grupos de Jiddu Krishnamurti, están dedicados a informar, investigar y editar todo lo de JK. Por tanto, afortunadamente hay material para el mismo grupo sostenerse con todo lo que JK creó y elaboró, y sus colaboradores. Cuando cada cual ha publicado lo que le interesaba, JK quedaba relegado; los propagandistas de toda clase llegaban como moscas. Y al final todo era una exhibición de la vanidad particular de cada uno.
Un grupo JK, no es como un bar o taberna, donde cada cual va allí a decir y a hacer lo que quiere, a pasarlo bien. Hay muchos grupos que sí que dan esa oportunidad de publicar ya sean videos, comentarios, fotos, y todo lo que tenga a mano cada cual. Pero el grupo Jiddu Krishnamurti, y otros como él, siempre tendrán ese problema. Porque hay algunos que no pueden ver ni comprender que fueron creados para solamente exponer e investigar todo lo de JK. De lo contrario sería otro grupo diferente donde cada cual publicaría su tendencia. Y así se pasan días y semanas hablando y comentando eso que no es lo propio del grupo.
Finalmente, cuando alguien va a un sitio y no le gusta el ambiente tiene toda la libertad de dejar de ir una temporada y volver al cabo de un tiempo. O dejar de ir definitivamente. Nadie está obligado a nada, solamente a respetar todo lo necesario para que todo lo relacionado con JK no quede apartado ni relegado.
Y, tú cómo vas a soltarte de la cuerda, si es que eso se puede. Eso es como la no-violencia que es una ilusión. Nadie puede dejar de ser violento, porque tenemos que sobrevivir. Y eso quiere decir comer y todas las demás actividades, sexo, trabajar, lo que quiere decir estudiar e informarse para competir por un empleo que todos quieren.
También te quiero decir, que te informes bien. Pues, no soy administrador de Jiddu Krishnamurti. Y te has olvidado de que la administradora, Yanet Denís, es la que ha publicado varias veces los avisos de lo que se tiene que publicar. ¿Puede ser, Ricardo, que te guste la jarana? Esto no es una guerrilla del Che Guevara, ni de Fidel Castro. Esto es otra cosa, no te olvides. Porque este cuento, esta situación ya es la repetición de otra igual que ya viviste en este grupo. Si estás aburrido, creo que debes encararte con otra historia, pues aquí no encontrarás lo que buscas.
Sigues sin entender lo que es la libertad. ¿Puede haber libertad para hacer lo que queremos? Tú inténtalo y verás las consecuencias. Si alguien va con el coche en dirección contraria, porque dice que quiere experimentar el efecto que eso provoca, las consecuencias pueden ser graves pues puede tener un accidente o la policía detenerlo y denunciarlo. Si tu mujer quiere hacer lo que le apetece: un día no va a dormir, otro día se va de viaje sin avisarte, no quiere hacer lo que es su trabajo. ¿Qué pude llegar de ese comportamiento que ella puede decir que es un acto de libertad? Puede decirte que eres un facha dictador, machista estúpido y cretino, que hablas mucho pero que no vives lo que dices sobre la libertad. ¿Te das cuenta dónde estamos? Pues, eso trasládalo a todos los ámbitos y así verás las consecuencias de la libertad y si ella es posible.
¿No será qué la libertad, es algo que es de cada uno, que está dentro de uno? Pero claro, la libertad sin conflictos, sin pleitos ni jarana ni contienda sin fin con los que conviven con nosotros, eso no es libertad en absoluto.
Nos hemos acostumbrado a vivir así, lo hemos heredado del ambiente familiar, en la escuela, en el barrio, de las autoridades políticas nacionalistas, en el fútbol.
Por eso, Ricardo, hay mucho que hacer y uno tiene que ser serio y profundo. Y eso no puede ser si cada uno pretende hacer lo que le da la gana, sin querer asumir las consecuencias.
Sí, Esteven, es verdad que la telepatía, o la comunicación no verbal, es más interesante. Pero esto no soluciona nuestro problema. Porque el problema, que es la división interna, proseguirá con su conflicto. ¿Cómo vamos a estar libres del conflicto entre el latino y el anglo, entre el pobre y el rico, entre la mujer y el hombre, entre el joven y el viejo?
¿No has visto como te miran los jóvenes cuando te ven, sin apenas decir palabra? Pero tú sabes de qué van esos jóvenes. Por tanto, aunque nos comuniquemos sin palabras aún seguimos con el viejo paradigma del ego, del ‘yo’.
Pero la pregunta sigue ahí: ¿Qué haremos para ir más allá de ese ‘yo’ que causa los conflictos, la violencia y la guerra? Ese ‘yo’ que siempre está ahí dentro de nosotros, aunque vivamos con algunos momentos de descanso y belleza.
"Esa morada suprema de mí, en mí"
¿Quién es ese mi? ¿Es el pensamiento con sus inventos y supersticiones? El pensamiento no puede tocar lo sagrado, lo que está más allá de las palabras.
"¡Oh mi Señor! Cómo darte acción de gracias, no sé".
Pero, ¿a quién hay que dar las gracias, de qué y par qué? No nos damos cuenta que el pensador y el pensamiento son lo mismo. El que piensa se separa dándose la autoridad como algo separado del pensamiento. Es el pensamiento divisivo, que inventa el ‘yo’ y el súper ‘Yo’. Por lo que, no hay nada de qué agradecer ni a quién agradecer. Solamente están los hechos, que es la existencia de cada cual.
Solamente uno tiene que estar atento a todo lo que sucede para no seguir divididos ni fragmentados. Aunque, eso siempre no es posible. Pues la vida es destrucción, amor y construcción. Por eso, cuando uno se da cuenta que está inatento, es cuando vuelve a estar atento.
Escritos y publicaciones, 25-6-2012
He leído tu entrevista en…del diario…, de hoy.
Gracias por tus informaciones y comentarios.
Dices: ‘La emocionalidad aumenta nuestra inteligencia’. Vamos a investigarlo. En un estadio de fútbol hay emoción entre los hinchas. También la hay entre los nacionalistas, sus banderas y fronteras, ¿verdad? Y, ¿dónde nos lleva esa emocionalidad, que es capaz de hacernos llorar y hacer cosas inverosímiles? Al final, nos lleva a la violencia y a la guerra.
Esta mañana he leído una crónica sobre el final del juicio a Breivik, que hizo la matanza en Noruega, ¿cuánta emocionalidad tenía por su nacionalismo noruego, cultural-occidental, cristiano, etc.?
Si viéramos en realidad lo que somos, cómo funciona nuestro pensamiento-mente, nos daríamos cuenta de lo que somos capaces de hacer. Por tanto, la emoción, el sentimentalismo, el romanticismo, nos hacen que alucinemos y deliremos de tal manera que podemos hacer cualquier tontería.
En realidad la emoción es un acto divisivo, un acto agresivo, pues todo el que no participa de esa emoción es considerado un peligro que hay que aislar y discriminar.
Si lo vemos en los animales, ellos se emocionan con sus crías pero es un acto materialista, su condicionamiento para que prosiga su grupo y la especie.
Con la religión sucede lo mismo: sin emoción, tal vez no existiría como es ahora. Toda ella está dominada por la intransigencia, la fe y la creencia, el dogma, la obediencia ciega a la autoridad. Y todo ello, tiene su base en al emoción, que es miedo y temor al vacío existencial, a la soledad, a la inseguridad ya sea del presente como del futuro.
Ricardo, sólo se trata de opinar, ¿no? Y cada uno lo hace a su manera. Recuerda que el infinito está ahí y tanto sirve para afirmar como para negar lo que digamos.
De la misma manera que uno estando en la montaña se pregunta, ¿dónde está la montaña? También ya tenemos cosas maravillosas y no las vemos, como es la conciencia de algo más que lo aparente.
Cuando el corazón es único y separado, siendo el dueño de la acción, tampoco es adecuado. Pues lleva a la emoción y al sentimentalismo, con sus desastres nacionalistas y los fanatismos de creencias y supersticiones religiosas. Es la interconexión de la mente, el corazón y el cuerpo, lo que hace la verdadera unidad. Y es lo que genera el orden.
Si, Jeza Jelena, es clarificador y como siempre pedagógico.
"Todos somos uno" (We are all one)
Ahora hace falta vivirlo con los demás.
“La búsqueda de sí mismo, o de dios, es como un pez en el mar, en busca de mar”.
Es como seguir sin ver que el pensador y el pensamiento son lo mismo, que el observador y lo observado no son lo mismo.
Ricardo, te aclaro: del grupo Jiddu Krishnamurti fui solamente yo el que decidió dejar de ser administrador, a pesar de insistir otro administrador que no me fuera, porque ya había dos o tres administradores y consideraba que ya habían bastantes.
Francisco, he visto que prosigues de administrador de este grupo. Y, este grupo es nuevo. Pero ahora cuando vengan los propagandistas y quieran poner propaganda de esoterismo, ya sea de Tarot, de Yogas, de gurús que hablan de rencarnación, de páginas que lo salvan todo, de videos cientificistas y otras cosas extravagantes, etc., y haya algunos miembros que lo defienden, ¿entonces veremos tú qué harás?
Más aún, si llega un miembro y empieza a decir que lo que él dice es más adecuado que lo que el grupo preconiza, si insiste en provocar un mal ambiente, si tú le adviertes que esa actitud no es la adecuada para el buen funcionamiento del grupo, que si no está de acuerdo que deje de entrar un tiempo, y si no que se dé de baja del grupo. Justo entonces, tal vez, sabrás lo que es la libertad.
Dónde está la crisis y los millones que le deben los clubs de fútbol al gobierno y que no pagan? ¿No se dan cuenta ahora del peligro del nacionalismo? Así no se arreglan los problemas. Queremos divertirnos, aunque vaya contra nosotros. Lo mismo sucede con los toros que también son subvencionados por el gobierno. Luego nos quejamos, le damos la culpa a los demás, a los de fuera, al mal funcionamiento del sistema. Las máquinas no funcionan mal. Van mal las personas que las manejan y dirigen.
Si no amas a la corrupción, o a cualquier otra cosa, no la comprenderás.
Esa es la cuestión que la vida es una guerra. Al igual que es un negocio. Si yo no saco ninguna ganancia no publicaré en esta pared. Y el negocio es la guerra de baja intensidad. Así que el problema es grave. ¿Puedo vivir sin ningún deseo? ¿Puede alguien que vive sin deseo no generar guerra? Sí que la genera, pero él no lo sabe. Esa es la diferencia con los que desean: que ellos sí que saben que han maquinado para ese horror que es la guerra.
¿Tan mal estás qué todo te da igual con tal de divertirte? No es solamente el fútbol, y tú lo sabes. Es el paradigma de siempre fiesta, diversión y despilfarro. No queremos solucionar la crisis, queremos volver a vivir como vivíamos antes de la crisis. Y si viene la otra –que vendrá- ¿qué nos importa? Eso quiere decir que somos insensibles, superficiales y banales.
El problema es que existir quiere decir violencia. Pues sin violencia para sobrevivir pereceríamos, nos destrozarían. ¿De acuerdo? La pregunta: ¿Puedo vivir sin violencia? No. ¿Qué más puedo hacer para estar libre de violencia? Ir más allá de esa violencia. Y, sabiendo que el deseo, la ansiedad, la lujuria por todo lo que necesitamos, nos acrecienta la violencia engrandeciéndola con todos sus problemas.
Escritos y publicaciones, 25-6-2012
En realidad la no-violencia es eso: mirarla, observarla, dejarla estar que pase. Pero el error de los que decían que eran no-violentos -Gandhi, etc.- fue que no explicaban que ellos por el mero hecho de vivir tenían que hacer algo de violencia, al comer, al litigar, al imponerse aunque sea con la mirada, los gestos, las voces, las disputas. Vivir es sufrir. Y sufrir es violencia hacia nosotros, y la que generamos nosotros en los demás.
La vida es sufrimiento y dolor, porque yo no quiero hacer ningún daño a nadie. Y eso no puede ser, ya que no es posible. Y al darme cuenta que siempre estoy haciendo daño a otro, es cuando siento el dolor.
Por tanto, volvemos a la violencia. Si voy más allá de este drama de la existencia, aunque siga haciendo daño no lo veré aunque exista. Un ejemplo: si tú y yo quedamos a una hora en un lugar para hacer cualquier cosa -hablar, pasear o comer-, pero yo no voy sin avisarte. ¿Qué sucede? Yo no veré tu posible malestar, frustración, tu dolor, por no aparecer a la hora en el lugar convenido. Aunque incluso te hubiera avisado, ya que habías puesto mucha ilusión y necesitabas salir y hablar con alguien.
Por eso, aunque apelemos a la conciencia, a la libertad, a que todo está vacío y nada tiene importancia, el dolor siempre está ahí.
Si yo te invito a comer en mi casa y te preparo varios platos que son sabrosos y bien cocinados, pero el último es malo y te estropea la digestión. ¿Todo queda estropeado, no? Pero esa eventualidad de que en cualquier momento puede llegar el dolor es lo que nos hace huir generando todo el desorden y el caos.
Por tanto, como esa eventualidad de la llegada del dolor no la podemos controlar ni adivinar, me limito a vivir en el ahora.
Si, Francisco, entiendo todo lo que has dicho. Pero el problema es que para que algo funcione hemos de hacer las cosas de manera para que funcione, ¿de acuerdo? Si tú tienes un coche lo tienes que tener preparado -que funcione, gasolina, los frenos, el acelerador, etc.- para que cuando lo quieras arrancar e ir a un sitio eso pueda ser.
Pero llega tu amigo y te dice: mira no te preocupes tanto por el coche porque es sólo una máquina, y qué importa la gasolina que le pongas, qué importa si no lo aparcas correctamente, etc. ¿Nos estamos comunicando? Entonces, siempre puede haber varias maneras de ver las cosas. Hay unos que dicen que la libertad, aunque sea destruirlo todo, vale la pena. Otros dicen que sin respeto, no puede haber libertad. Entonces, ¿si descartamos la libertad porque va a generar más desorden y confusión tiene eso sentido?
Cada uno que haga lo que tenga que hacer, aunque en ello tiene que haber respeto, etc. Pero si uno insiste en que hagamos algo que va contra nosotros, porque se arroga la libertad de poder expresarlo, si queremos lo podemos descartar. Por tanto, cada uno que evalúe las pérdidas y si las quiere asumir.
Por eso, vive y deja vivir. Y cuando alguien se entromete demasiado en algo que no es de su competencia directamente, está no dejando vivir. Porque esa libertad que él exige para poder seguir diciendo lo que quiere decir, el otro también la tiene para no hacerle ningún caso.
La vida funciona así, si queremos algo hay que defenderlo. De lo contrario puede desaparecer, y antes de eso llega el desorden, las cosas hechas no adecuadamente. Hay que saber que la defensa lo puede complicar todo aún más, pero esa es la opción de la libertad. Y de como gestionemos esa libertad, dependerá el resultado.
He leído tu columna-escrito, ‘No perder nuestro mañana’. Y, también, ‘Investigar en tiempos de crisis’.
Si decimos que algo es negativo, como si decimos que es positivo, eso puede no ser cierto. Por tanto, vamos a velo. Cuando las personas hacemos algo, ¿cuál es el motivo principal, dónde está la raíz por lo que lo hacemos? Evidentemente, es porque hay una ganancia. Es decir, el motivo de hacer algo, es una ganancia para nosotros. Pero eso, que es presentado de manera que parece tan aséptico e inofensivo, se ha convertido en una carrera depredadora para satisfacer nuestras ansias de seguridad, ya sea en el ámbito físico o psicológico. Pero, como la seguridad no existe, todo ese deseo de conseguir, inventar, descubrir, para alcanzar la seguridad, genera desorden.
Prueba de ello, es que los colonos blancos europeos cuando invadieron todo el mundo que no se conocía ni dominaban, decían que iban a llevar la civilización, el orden, etc. Pero, la realidad era que el hombre blanco europeo, vivía en el mismo desorden que los que él consideraba que eran salvajes, sólo que a otro nivel más desarrollado. Por tanto, como se puede apreciar, allá donde los colonos dominaron e impusieron su manera de vivir, todo ha acabado como su misma sociedad. Que es la que ahora hay en todas partes, con su división, conflictos, violencia y guerra. Aunque allá donde llegaban también existía el mismo paradigma de división, conflicto, violencia y guerra. Pues la vida funciona igual en todas partes.
Lo único que han conseguido ha sido expoliar, y arrancar las riquezas que han podido, para beneficio suyo y de su sistema egoísta, de falta de compasión. La pregunta es: ¿Si esos descubridores, colonos, civilizadores, etc., hubieran tenido compasión y amor, habrían hecho esos viajes tan costosos, peligrosos y agresivos, que acababan en violencia? Más aún habiendo la pobreza y la miseria, el hambre, la ausencia de escuelas, etc., donde ellos vivían. Ellos decían, como ahora, que gracias a esas expediciones y viajes se avanzaba en la ciencia, navegación, conocimientos, intercambios. ¿Pero ese avance hacia dónde nos lleva? Nos lleva hacia más de lo mismo, hacia la prolongación y la continuación del mismo paradigma de división, falta de compasión, conflicto y enfrentamiento. Es decir, a la misma crueldad y brutalidad, violencia y guerra. Cambiamos de ropa de vestir, cambiamos de casa y la manera de decorarla, pero nuestros hechos no cambian, sino que son los mismos desde hace un millón de años.
Pues ahora, con los viajes a Marte o donde quieran ir, en el infinito espacio, sucede lo mismo. ¿Nos imaginamos que pasaría, si hubieran seres vivos como nosotros en otros planetas?
“Cuál es el problema de la violencia, el sufrimiento y el dolor? Se trata de la limitación que pone a la plenitud de la vida, la realización del potencial de la vida. Es decir, la tristeza”.
Todo eso está unido: la violencia llega porque estoy sufriendo al tener miedo de no poder conseguir mi plan que es subsistir, dominar, vencer e imponerme. Pero, cuando me doy cuenta de quién soy, de que soy brutal, cruel y violento, me entristezco porque no quiero serlo. Por eso la existencia tal como la encaramos es sufrimiento y dolor. Pero, quiero investigar si hay otra manera de vivir sin ese dolor y sufrimiento, que nos hace feos. Por lo que, quiero saber ese dolor qué es y también que es esa violencia. Por tanto, me he de acercar a eso, es decir no tengo que huir. Y cuando no huyo descubro, que esa violencia no la veo como tal, sino como el mismo proceso de la vida. Es entonces, cuando cesa la división y llega el orden. Y en el orden está el amor.
Y antes que la palabra está el pensamiento, que es división. La raíz de la violencia.
Eso es como decir que no te gusta el planeta tierra para vivir. Da igual pues seguirás en el planeta tierra te guste o no. Así que tendrás que ver que si te divides del planeta tierra será peor.
Escritos y publicaciones 26-6-2012
Hemos de comprender que es el hombre el que vive siempre en crisis. Algunas veces la crisis son graves y virulentas, acabando en guerras. Luego de la guerra, la crisis prosigue, pero como ya estamos agotados, y los que han perdido no tienen más remedio que soportar los dictados del vencedor, hay un aquietamiento. Suele haber un período de falsa paz, hasta que se vuelve a inflamar la crisis y vuelve a aparecer otra guerra. Y así funcionamos desde siempre. Así que la vida de los hombres, de nosotros, es la guerra perenne. La mayoría no lo ve así y habla dela paz, de los nuevos valores, de grupos y sociedades que se consideran buenos y diferentes. Y hay otros que saben que sin un descartar el viejo patrón y paradigma de la división, del ‘mi’ y del ‘tú’, del ‘nosotros’ y el ‘ellos’, viviremos en conflicto que nos llevará a la violencia y la guerra.
Y con esta estructura psicológica, al vivir como depredadores, es cuando se suceden las revueltas, las revoluciones, entre los que se sienten agraviados, explotados y humillados. Por tanto, la pregunta es: ¿Puede deshacerme del ‘yo’ y todo lo que genera: nacionalismo, lo mío, las tristezas y depresiones?
Nosotros tenemos miedo del presente, del futuro y también del pasado, por tanto todo lo que hacemos va encaminado hacia ver la manera cómo ese miedo desaparecerá. Pero como las personas somos tan superficiales, en vez de encarar cara acara ese reto, huimos de él. Pero en la huida no se solucionan los problemas. Para solucionar un problema uno tiene que acercarse a él, conocerlo, no sentirse dividido de ese problema. Y el problema siempre es la vida. Por eso, la mayoría tememos a la vida. Pero la vida es como es y no hay otra. Así que cuando veo que estoy invirtiendo mi vida en diversiones, en la búsqueda de placer, en cambiar esta realidad que no me gusta por otra que sí que me gusta más, me pregunto: ¿por qué lo hago, por qué esa superficialidad, esa terrible necesidad de vanidad?
Todos tenemos la insatisfacción de lo que es, de la realidad, que me crea hastío, aburrimiento y ganas de hacer algo diferente. Y entonces, es cuando creemos que haciendo cosas, en la acción encontraremos alivio. Ahí están lo jóvenes y sus modas novedosas que siempre ponen en peligro sus vidas, los que siempre quieren más y más de todo, ya sea sexo, propiedades y dinero, poder y placer. Y, en ese más y más va implícita la avaricia de todo para conseguir un nuevo desafío a la realidad. Por lo que la moral desaparece y llega la corrupción. Esto no es cosa de un fragmento de la sociedad, sino es el terreno donde estamos todos clavados. Pues en todos los ámbitos existe la corrupción, ya sea económica, política, religiosa, en la relación directa entre nosotros.
¿Creemos que si no quisiéramos, porque lo abominamos y lo descartamos, habría el sistema corrupto e inmoral que hay en todos los ámbitos y niveles? Cada uno es el responsable de lo que sucede en su vida y en los demás. Nos hemos hecho acomodaticios, vivimos encajados y acoplados de manera que no podemos descartar esa corrupción e inmoralidad en la que vivimos. Pues tenemos miedo de vivir solos -solo no quiere decir aislado-.¿Podemos ver esta manera tan absurda y ridícula de vivir, como el peligro que es, como si fuera un animal salvaje del que hay que ponerse a salvo, como un veneno que sabemos que no lo hemos que tomar? ¿Por qué no respondemos a ese reto tan capital, tan grave, como es el vivir dividido y fragmentado internamente? Pues esa división al salir a fuera, al exterior, va a generar la sociedad corrupta y cruel en que vivimos y que hemos creado. ¿Podemos vivir respondiendo a ese reto de la crisis siempre, sin esperar a que haya un estallido de descontento, de revueltas y anarquía, de violencia, las matanzas de la guerra? La única manera es darse cuenta de la insensibilidad que es vivir divididos por los nacionalismos, las religiones organizadas, por los diferentes grupos políticos, por las ideas y teorías. Y si uno ve, actúa.
"¿Cómo vaciar la mente de su contenido?"
La mente, que está formada por el pensamiento y la memoria, no se puede vaciar. Pues, la mente y el pensamiento son su contenido, todo la información de todo lo inmenso pasado desde hace millones de años. Eso es en lo que respecta al funcionamiento biológico: si tengo frío sé que tengo que abrigarme, si veo el fuego sé que no puedo tocarlo. De lo contrario no podríamos salvaguardarnos.
Pero en el ámbito psicológico y en el espiritual, uno tiene que vaciarse de todo el pasado, ya sea el de hace mil años, como el de hace un minuto. Pues, ese pasado al interponerse al presente, al ahora, nos divide y fragmenta, generando desorden. Eso mismo sucede cuando miramos algo, un árbol o una persona, si no miramos sin que el pasado se interponga, no habrá una buena relación. Pues no habrá unión total, sino que la energía no llegará en su plenitud, causando división y desorden, que se traducen en conflictos.
¿No te parece que jugar con los animales a juegos de humanos, como vestirlos y otras cosas impropias de ellos, es inmoral?
He leído tu entrevista en el diario… de hoy.
Gracias por tus informaciones y comentarios.
Sólo voy a añadir a todo lo que has dicho, que todo está en la mente. Se puede afirmar que eso que era un prodigio era verdadero, al menos tus trances y transformaciones físicas. Pero lo que no es tan fácil de decir, es que esa visión y experiencia psíquica fuera verdadera. Creo que todo es como un sueño pero despierto. Uno puede ver cosas reales dentro de él, pero fuera no existen. Eso les ocurre a algunas personas que influidas por circunstancias culturales y familiares, y circunstancias personales, pueden provocar esas situaciones.
El pensador, el que piensa, es el mismo pensamiento, no hay división. Y el pensamiento tiene un potencial infinito: puede imaginar, ver, oír, de todo lo inimaginable.
Eso es así. Es la realidad. Pero cuidado, que cada cual por pobre y necesitado que sea también lo hace a su nivel y manera. Uno tiene que empezar por él. Pues todos somos iguales psicológicamente y nos comportamos por el mismo paradigma de miedo y egoísmo. Por tener miedo que me quiten a mi mujer soy capaz de aplastarla a ella y a su amigo -que es lo mismo que escurrirlos-, y a quien sea, aunque ella quiera porque está harta de mí.
Incluso ese deseo de ser la mejor versión de uno mismo, nos distorsiona y nos hace feos, brutales, amargados. Donde hay esfuerzo no hay amor. Tú me quieres o no. Nadie puede forzar ni obligar a otro a que haga lo que no quiere.
Gato, si quieres preguntarme o explicarme alguna cosa, lo puedes hacer.
Hola, discúlpame pero no recuerdo tu nombre. Sí que te conozco de siempre, también a tu madre, a tu padre, a tu hermana, etc.
Ya he comido la empanadilla que me trajo ayer Enrique. Y que me dijo que te evaluara lo que me ha parecido.
La presentación a la vista es muy buena. Parece más redondeada que las clásicas que son más alargadas. La he notado un poco vacía de acelgas. Tal vez, porque estaban muy como trituradas. Es decir, las acelgas se advertían por su sabor, pero no por su textura. El sabor, sin embargo, está muy bien logrado. También están en su punto horneadas.
Por supuesto, que todo eso es muy subjetivo. Es decir, es mi opinión personal. Que no tienes que cogerlo como un paradigma para hacer las empanadillas. Hay que escuchar e informarse de lo que dicen y piensan los que las consumen. Y, luego, lo que más te interese a ti, elaborarlo. Eso si, sin que haya corrupción alimentaria que te podría llevar a una situación comprometida, tanto psicológica y moralmente –espiritual-, como judicialmente.
Aprovechando la ocasión, quiero decirte que también conocí a tus abuelos maternos, a tus tíos, a las empleadas del hogar. Ellos vivían en la casa que tenían donde está ahora el edificio donde vivían tus padres. Yo nací en 1950. Y pasaba muy a menudo por la plaza para ir a casa de mis abuelos que vivían cerca de allí, para ir a misa, para ir a La Agricultura, etc. Y siempre los veía en la acera todos sentados tomando el fresco cuando venía el calor, con la puerta abierta de par en par. Eran simpáticos, educados, correctos, pero no demasiado convencionales: no participaban en política ni activa ni con habladurías, no eran fachas pero tampoco rojos. Iban a misa los domingos a la hora burguesa de las doce y media, pero no eran beatos fanáticos. Tu madre y tu tía -su hermana mayor- participaban activamente de las fiestas, pues iban arriba de las carrozas vestidas con traje de gala, arrojando confeti y serpentinas cuando daban las vueltas por la calle Sequial y por la plaza del Ayuntamiento. Eran los años cincuenta del pasado siglo.
Bien. Que vaya bien.
Con afecto y con cariño.
Escritos y publicaciones, 27-6-2012
“La búsqueda de la Iluminación = el auto –el ‘yo’- en busca del auto –el ‘yo’-, lo que es una broma. Y a veces parece ser una búsqueda en serio”.
¿No ves qué eso mismo se podría decir de lo que tú has hecho y lo que yo estoy haciendo, diciéndolo por escrito? ¿Podemos explicar lo inexplicable? Ese es el drama de la vida, que vemos en los otros pero no en lo nuestro. Lo que es la continuación del juego del auto, del ‘yo’ que le dice a otro ‘yo’ lo que tiene que hacer.
Lo más difícil para nosotros es lo que es preciso para ser libre, vivir en la inseguridad. Vivir en la inseguridad también quiere decir, vivir en el ‘no sé’. Uno no puede saberlo todo, porque es la parte. Pero, ese ‘no sé’ nos hace cool, sin compromisos ni responsabilidades.
Ah, ese el problema. ¿Puede uno estar libre de su maestro, que adora, lo exhibe, habla de él, lo lee y lo promueve porque cree que es el único, el mejor? Si uno no está libre de dependencia, qué sentido tiene todo. Pues parecerá todo un juego de esnobs.
Dad instrucción sobre la vida toda y habrá hombres libres. Pero, ¿quién es el que quiere hombres libres?
Luego, si lo hacemos por amor entonces verás que no hay esfuerzo alguno. Porque el esfuerzo es contradicción entre dos contrarios: la parte de mí que quiere y la otra que no.
Todo se trata del apetito que tengas. Si no te apetece leer las citas y los comentarios es porque estás lleno y no quieres más. Entonces, haz otra cosa que te apetezca más. Recuerda que los deseos se realizan o se descartan.
“Toni, ¿tu conoces a "Hechizero Marcos Limo"?”
Sí que lo conozco desde hace medio año, que me envió un mail y ya no ha parado de enviarme. Es verdad que yo contesté a algunas preguntas de ese grupo. Pero todo es superstición, mentalismo, y muchas palabras. Sus clientes y seguidores son gente sencilla y superficial. Va buscando personas para que le pidan consejo a cambio de dinero.
Si decimos que algo es solamente posible en una sola dirección, eso no es la solución. Pues, para aprender y ver la realidad uno tiene que estar libre de toda idea ya establecida. Porque, lo nuevo está más allá de todo lo que se pueda o no se pueda pensar. Porque lo nuevo es el amor. Y el amor es infinito como también sus posibilidades. ¿Puedes verlo, Gato?
El amor es sin opción. Si vemos que alguien cae en la calle, que va junto a nosotros, ¿puede haber opción para ayudarle y atenderle? Si tú estás ante un peligro, como es verte que entras en tierras pantanosas donde te vas hundir, ¿media ahí la opción para ponerte a salvo? La opción genera desorden y confusión. Por eso el ver algo claramente, es acción total, es orden, es amor. ¿Lo captas, Eduardo?
En la vida se puede hacer todo. Porque la vida es todo, lo engloba todo. Solamente hay que ver cuando algo se convierte en negativo y descartarlo. Por tanto, cada uno se tiene que gestionar su vida y sus posibilidades. Y las posibilidades de la vida son infinitas.
"Despertar no es ni lento ni rápido. Nosotros no llamamos a los movimientos de los planetas lentos o rápidos. Cuando uno está tratando de ser rápido, es lento. Cuando uno realiza lento, puede ocurrir rápidamente".
Eso demuestra lo ignorantes que somos. Porque decir que uno sabe, es la opinión del mezquino e ignorante que no se ha dado cuenta que él es una parte pequeña del todo, del infinito.
Gracias por tus informaciones tan pedagógicas e instructivas.
Hay algo que no se dice de los trasplantes de órganos. Y es que ellos generan una gran ansiedad, en todos los que concurren en el trasplante. Primero se necesita un donante, a ser posible joven y sano. ¿Cómo se consigue ese órgano joven y sano? Ha de ser por un accidente mortal en su mayoría, de un joven. Por lo que todos los que quieren y apoyan los trasplantes no hacen nada para que los accidentes mortales disminuyan y desaparezcan. No quiero decir que estoy en contra de los trasplantes, estoy diciendo la parte negativa que no se menciona.
Luego están las prisas para llevar el órgano desde el lugar donde se ha producido el accidente, hasta donde está la persona que ha de recibir el órgano. ¿Te das cuenta de todo eso lo qué representa? Sé que es un tema delicado, como todos los temas en los que está implicada la prolongación de la vida. Ese es el problema del progreso: siempre esa costa de otros. Por eso, no lo afirmo ni lo niego, sino que vivo con él, sabiendo las implicaciones que tiene y desencadena.
Por eso, todo deseo es negativo -ya sea el que niega o el que afirma- y genera desorden: pobreza, miseria, enfermedad, ansiedad y accidentes, corrupción e inmoralidad que es el origen de todos los males.
He leído tu artículo de ayer, ‘Menos que democrático’.
Gracias por las informaciones.
Espero que no se crea que todas las mentiras y falsedades que se dicen, todos se las creen. Todos los que participan y viven del establisment -tú uno de ellos- no sé si se las creen, pues el hombre para vivir es capaz de decir que lo negro es blanco y al revés, pero ten presente que son eso: mentiras y falsedades.
Estamos seguros de lo qué es el amor. Pues el amor es una de las cosas más perturbadoras que hay. Para que el amor sea, uno no tiene que pedir nada a cambio. Uno tiene que dar total libertad a otro para que haga lo que tenga que hacer, aunque no nos interese. Estar dispuesto a perder todo lo que uno cree suyo, si llega el momento de desaparecer. Vivir con amor es estar desnudo ante la vida, ser vulnerable. Sin poseernos los unos a los otros. El amor es tan peligroso que a cada instante y en cada cosa que hacemos, va en juego nuestra vida.
Ya hemos visto que el condicionamiento, que es el ‘yo’, estará ahí. Por tanto, lo comprendemos y así vamos más allá de él. Porque luchar contra el ‘yo’, y el mundo que genera, provoca conflicto y desorden. Quedando atrapados por el ‘yo’.
Las sensaciones son pasajeras y duran poco. Al igual que las influencias. Lo importante es comprender los hechos, Y en esa comprensión está la atención, donde no hay nada más que percepción y su dicha.
Escritos y publicaciones, 28-6-2012
¿Se puede vivir sin hacer propaganda alguna? Esto que estoy escribiendo y diciendo, alguien lo podría interpretar como propaganda. Pero, lo que hacen los otros también se podría afirmar que también lo es. Por tanto, el problema está en el que lo interprete. Por tanto, son los administradores del grupo los que tienen que decidir qué temas entran en este grupo y que otros no. Así se evitarían problemas y malos entendidos. Porque lo más importante es el orden.
Todo lo que digamos con respecto a nuestra situación actual, a la crisis en que siempre vivimos, solamente se puede resolver cuando vemos que la causa de todo el desorden tiene su raíz en la división interna. Y es a eso a lo que nos hemos qué atener. La belleza, la dicha de las flores, las nubes, los animales, las olas rompiendo suavemente en la playa, todo eso llega cuando la división no existe en nosotros.
Todo está unido y relacionado y cualquier alteración para bien o para mal afecta a todo.
Cuidado J Eddy, lo físico no se puede comparar ni igual con lo psicológico o espiritual. Pues, hemos de saber que aunque queramos hay cosas que no se pueden cambiar en un momento dado. Si ello fuera posible derrotaríamos a la materia, con su física y la química.
El problema que tenemos es que no somos conscientes siempre de todo lo que sucede y hacemos. Es decir no tenemos una atención dispuesta y operativa para percibir en todo momento la realidad.
El problema está en que para llegar a conectarse a la conciencia, no ha de haber división interna.
Para no equivocarse uno tiene que encarar los retos negativamente. Es de la manera en que el ‘yo’ no podrá operar.
He leído tu entrevista de ayer. Gracias por tus comentarios e informaciones.
¿Puede alguien que se presenta como un líder espiritual, amante de la paz y de la no violencia, tener las maneras de un político, maquinando e instigando para que los hechos vayan a su favor, aunque a costa de provocar revueltas y violencia con sus asesinatos? ¿Una persona, un personaje, que es recibido repetidamente en audiencia pública y privada, por el presidente del país más belicoso y guerrero del mundo -y todo lo que ello con lleva consigo de brutalidad y crueldad en todos los ámbitos-, puede ser alguien que se presenta como un líder espiritual de la no violencia?
Aunque la superficialidad no es un pecado, sí que lo son sus consecuencias. Usted por mucho que haga meditación cristiana y hable con bellas palabras, también es superficial. Cuestionas al Vaticano y su estructura católica anquilosada y destrozada por tantos años de poder. Pero, sin embargo de otros Vaticanos y su religión organizada -aunque no sean tan manifiestos y ostentosos-, no dices nada, sino que los admiras y divulgas con tus palabras de aprobación.
He leído tu columna-escrito, ‘Cuentas pendientes’. Gracias por tus palabras e informaciones.
¿Puede la injusticia traer la paz? La paz no es el fin de una guerra, con sus violencias, con sus brutalidades, con sus crueldades manifiestas y ocultas, sus matanzas. La paz, para que sea, los dos bandos enfrentados tienen que reconocer que son igualmente culpables de todo lo sucedido, de todo lo que se han hecho unos a otros. Cuando la paz es la que aplasta al que derrotado, por su debilidad, por la falta de apoyo y capacidad para vencer, eso no es paz en absoluto. Porque el agravio, que siempre es el origen de todo conflicto y guerra, prosigue. Homenajeara un solo bando, por sus víctimas y sacrificios, olvidándose del otro bando, es tan estúpido, superficial y cruel que ese es el motivo porque la paz no existe ni puede existir con esa manera de proceder.
Aunque nos cuentes tu cuento preferido durante tanto tiempo no creas que por eso estás en la verdad. Esa historia que cuentas es tu verdad, pero que no lo es. Como tampoco sería la mía -mi verdad- si yo me dedicara años y años, defendiendo e identificándome con uno de los dos bandos enfrentados. Porque la verdad no es de nadie. Pues la víctima y el verdugo se intercambian los papeles a cada instante. Por eso, es necio y vano, decir que un bando es una cuadrilla de asesinos y a la vez decir que el otro bando son una cuadrilla de ángeles inmaculados.
Por tanto, si es verdad que quieres la paz -cosa que dudo, ya que quieres aplastar a los que consideras tus enemigos-, no tienes que tener bando donde refugiarte. Sé que eso puede tener un alto precio, tan alto que puede ir en ello nuestras vidas. Pero la paz, para que sea, a veces tiene que ser así: perder algo de lo que creemos que es lo más importante. Los derrotados, para no perder la vida, pierden su otra vieja vida de lucha y guerra. No así el vencedor, que prosigue con su guerra permanente, de lo contrario no podría detentar el poder ni defenderlo. Por eso, la paz es una mentira, una palabra bonita que se usa según convenga. Todos los países que hablan de paz son guerreros, pues tienen los cuarteles llenos de jóvenes, a los que entrenan con ejercicios y prácticas, para que sean los más eficientes a la hora de asesinar y destruir al que creen que es su enemigo. ¿Te das cuenta dónde estamos?
¿Quién puede derrotar a la vejez con su decrepitud y la muerte? Y todo eso llega por un proceso químico que afecta a lo físico. Es eso solamente. Recuerda que los hombres somos como aquel ignorante que al final de tantos esfuerzos, dijo: ‘Y quiero, y no puedo’.
Da igual que seamos conscientes o no de nuestra ignorancia. Lo que digo es que, ¿podemos ser conscientes en todo momento y circunstancia de todo lo que sucede y hacemos? Evidentemente, no. Porque cuando nos llega un reto importante e impactante, quedamos noqueados, en shock.
"No es fácil abandonar la mente, pero con la práctica en la quietud y el silencio de la meditación puede ser apaciguado, en gran medida hasta el momento en que usted tiene control total sobre ella".
Me temo, Vivek, que no has captado la esencia de la cita. Cuando decimos que con el tiempo podremos practicar y llegar a la quietud y al silencio, nos estamos engañando. Porque cuando llega el plazo fijado seguimos en el mismo sitio de siempre.
En el ámbito psicológico el tiempo es un impedimento. Por tanto ¿puedes ver ahora, no mañana ni a la semana que viene o dentro de unos meses? Porque cuando lo veas siempre tendrá que ser el ahora. ¿Por qué no lo vemos, por qué en una sola mirada no vemos toda la trama de la vida con todo lo verdadero y lo falso? Es porque no prestamos toda la atención al reto de la vida, del vivir. Si amáramos a toda la vida, entonces esta nos contaría su secreto.
La persecución del placer, es sin fin. Pero nuestros cuerpos y nuestras mentes no pueden llegar a ese infinito. Por tanto, ese placer que siempre quiere más y más nos destruye y nos lleva al dolor.
Algunos tienen miedo de dejar la división porque temen lo nuevo. Por eso, los que no quieren la revolución son los que temen algo que perder.
Escritos y publicaciones, 29-6-2012
¿Se puede vivir sin hacer propaganda alguna? Esto que estoy escribiendo y diciendo, alguien lo podría interpretar como propaganda. Pero, lo que hacen los otros también se podría afirmar que también lo es. Por tanto, el problema está en el que lo interprete. Por tanto, son los administradores del grupo los que tienen que decidir qué temas entran en este grupo y que otros no. Así se evitarían problemas y malos entendidos. Porque lo más importante es el orden.
Todo lo que digamos con respecto a nuestra situación actual, a la crisis en que siempre vivimos, solamente se puede resolver cuando vemos que la causa de todo el desorden tiene su raíz en la división interna. Y es a eso a lo que nos hemos qué atener. La belleza, la dicha de las flores, las nubes, los animales, las olas rompiendo suavemente en la playa, todo eso llega cuando la división no existe en nosotros.
Todo está unido y relacionado y cualquier alteración para bien o para mal afecta a todo.
Cuidado J Eddy, lo físico no se puede comparar ni igual con lo psicológico o espiritual. Pues, hemos de saber que aunque queramos hay cosas que no se pueden cambiar en un momento dado. Si ello fuera posible derrotaríamos a la materia, con su física y la química.
El problema que tenemos es que no somos conscientes siempre de todo lo que sucede y hacemos. Es decir no tenemos una atención dispuesta y operativa para percibir en todo momento la realidad.
El problema está en que para llegar a conectarse a la conciencia, no ha de haber división interna.
Para no equivocarse uno tiene que encarar los retos negativamente. Es de la manera en que el ‘yo’ no podrá operar.
He leído tu entrevista de ayer. Gracias por tus comentarios e informaciones.
¿Puede alguien que se presenta como un líder espiritual, amante de la paz y de la no violencia, tener las maneras de un político, maquinando e instigando para que los hechos vayan a su favor, aunque a costa de provocar revueltas y violencia con sus asesinatos? ¿Una persona, un personaje, que es recibido repetidamente en audiencia pública y privada, por el presidente del país más belicoso y guerrero del mundo -y todo lo que ello con lleva consigo de brutalidad y crueldad en todos los ámbitos-, puede ser alguien que se presenta como un líder espiritual de la no violencia?
Aunque la superficialidad no es un pecado, sí que lo son sus consecuencias. Usted por mucho que haga meditación cristiana y hable con bellas palabras, también es superficial. Cuestionas al Vaticano y su estructura católica anquilosada y destrozada por tantos años de poder. Pero, sin embargo de otros Vaticanos y su religión organizada -aunque no sean tan manifiestos y ostentosos-, no dices nada, sino que los admiras y divulgas con tus palabras de aprobación.
He leído tu columna-escrito, ‘Cuentas pendientes’. Gracias por tus palabras e informaciones.
¿Puede la injusticia traer la paz? La paz no es el fin de una guerra, con sus violencias, con sus brutalidades, con sus crueldades manifiestas y ocultas, sus matanzas. La paz, para que sea, los dos bandos enfrentados tienen que reconocer que son igualmente culpables de todo lo sucedido, de todo lo que se han hecho unos a otros. Cuando la paz es la que aplasta al que derrotado, por su debilidad, por la falta de apoyo y capacidad para vencer, eso no es paz en absoluto. Porque el agravio, que siempre es el origen de todo conflicto y guerra, prosigue. Homenajeara un solo bando, por sus víctimas y sacrificios, olvidándose del otro bando, es tan estúpido, superficial y cruel que ese es el motivo porque la paz no existe ni puede existir con esa manera de proceder.
Aunque nos cuentes tu cuento preferido durante tanto tiempo, no creas que por eso estás en la verdad. Esa historia que cuentas es tu verdad, pero que no lo es. Como tampoco sería la mía -mi verdad- si yo me dedicara años y años, defendiendo e identificándome con uno de los dos bandos enfrentados. Porque la verdad no es de nadie. Pues la víctima y el verdugo se intercambian los papeles a cada instante. Por eso, es necio y vano, decir que un bando es una cuadrilla de asesinos y a la vez decir que el otro bando son una cuadrilla des ángeles inmaculados.
Por tanto, si es verdad que quieres la paz -cosa que dudo, ya que quieres aplastar a los que consideras tus enemigos-, no tienes que tener bando donde refugiarte. Sé que eso puede tener un alto precio, tan alto que puede ir en ello nuestras vidas. Pero la paz, para que sea, a veces tiene que ser así: perder algo de lo que creemos que es lo más importante. Los derrotados, para no perder la vida, pierden su otra vieja vida de lucha y guerra. No así el vencedor, que prosigue con su guerra permanente, de lo contrario no podría detentar el poder ni defenderlo. Por eso, la paz es una mentira, una palabra bonita que se usa según convenga. Todos los países que hablan de paz son guerreros, pues tienen los cuarteles llenos de jóvenes, a los que entrenan con ejercicios y prácticas, para que sean los más eficientes a la hora de asesinar y destruir al que creen que es su enemigo. ¿Te das cuenta dónde estamos?
¿Quién puede derrotar a la vejez con su decrepitud y la muerte? Y todo eso llega por un proceso químico que afecta a lo físico. Es eso solamente. Recuerda que los hombres somos como aquel ignorante que al final de tantos esfuerzos, dijo: ‘Y quiero, y no puedo’.
Da igual que seamos conscientes o no de nuestra ignorancia. Lo que digo es que, ¿podemos ser conscientes en todo momento y circunstancia de todo lo que sucede y hacemos? Evidentemente, no. Porque cuando nos llega un reto importante e impactante, quedamos noqueados, en shock.
"No es fácil abandonar la mente, pero con la práctica en la quietud y el silencio de la meditación puede ser apaciguado, en gran medida hasta el momento en que usted tiene control total sobre ella".
Me temo, Vivek, que no has captado la esencia de la cita. Cuando decimos que con el tiempo podremos practicar y llegar a la quietud y al silencio, nos estamos engañando. Porque cuando llega el plazo fijado seguimos en el mismo sitio de siempre.
En el ámbito psicológico el tiempo es un impedimento. Por tanto ¿puedes ver ahora, no mañana ni a la semana que viene o dentro de unos meses? Porque cuando lo veas siempre tendrá que ser el ahora. ¿Por qué no lo vemos, por qué en una sola mirada no vemos toda la trama de la vida con todo lo verdadero y lo falso? Es porque no prestamos toda la atención al reto de la vida, del vivir. Si amáramos a toda la vida, entonces esta nos contaría su secreto.
La persecución del placer, es sin fin. Pero nuestros cuerpos y nuestras mentes no pueden llegar a ese infinito. Por tanto, ese placer que siempre quiere más y más nos destruye y nos lleva al dolor.
Algunos tienen miedo de dejar la división porque temen lo nuevo. Por eso, los que no quieren la revolución son los que temen algo que perder.