7484. ‘Un verdadero héroe se regocija en aliviar el sufrimiento de los demás, y es indiferente al suyo’.
¿Es posible ser indiferente a nuestro sufrimiento? Puede que sí y puede que no. Pues todo depende del nivel, del grado, de la intensidad del sufrimiento. Pues si hay sufrimiento, hay dolor, ¿puede haber amor?
Se puede decir que sí que se puede controlar la mente, como si estuviéramos narcotizados, anestesiados. Pero una mente drogada, narcotizada por el control, por las prácticas y los métodos para dominarla, ¿puede tener sensibilidad? No, porque es una mente embotada, torturada, confusa, con desorden. Pues esa misma concentración, para eludir el dolor, la divide y le genera conflicto.
7485. La donación, los trabajos sociales, generan el mismo problema que cualquier otra actividad. Pues nos hacemos adictos, al agarrarnos a ello. Y es entonces, donde perdemos la libertad. ¿Puede una persona que no tiene libertad generar amor?
El amor es la ausencia de conflicto y sus esfuerzos. Pues el amor llega de la nada. No sabemos dónde está ni la manera cómo y cuándo puede llegar. Y cuando llega no lo podemos manejar, controlar. Por eso, el amor y la libertad son lo mismo.
Los servicios a los demás, a la comunidad, yendo de un lado a otro, tienen su sentido, su momento, su lugar, ya que se trata de ayudar a los demás. Pero cuando ayudamos a los demás, si no es con un acto de amor, puro sin corrupción, no resolvemos los problemas, tanto de los que ayudamos, como los de nosotros.
7486. Por eso cuando me doy cuenta que estoy inatento -soy devoto, seguidor, etc.-, es cuando vuelvo a estar atento. Es decir, libre sin atadura, sin nada a qué aferrarme.
7487. Todo lo que decimos, pregonamos, informamos, como la mejor manera de vivir, ha de ser vivido cotidianamente por nosotros. De lo contrario todo es un montón de palabras sin sentido ni significado verdadero.
7488. “El hombre está condenado a ser libre; porque una vez arrojado al mundo, él es responsable de todo lo que ve y lo hace”.
Mientras no nos descondicionemos de todo lo que nos han enseñado desde los padres, la familia, la escuela, el instituto, la universidad, descondicionemos de la cultura, de la raza, de la política, de la religión, del nacionalismo, no seremos libres ni responsables de todo lo que vemos y hacemos.
Cuando decimos que algo es de una manera, sin dejar la puerta abierta a otra posibilidad, es cuando ya volvemos a estar condicionados por esa verdad que creemos que es la verdadera.
7489. ‘Si tienen que cambiar el discurso para lograr las metas, lo harán’.
¿Si no hicieran eso -cambiar el discurso- podrían ser de la casta de los políticos? Porque los políticos sin ganar el poder -el que sea, aunque fuera un sólo escaño- no sirven. Es como un macho sin hembra. Así que cuando uno entra en la casta de los políticos, puede hacer todo lo que sea -todo quiere decir hasta matar- necesario para conquistar poder.
Por otra parte, eso es legal –asumiendo las consecuencias- ya que en la vida todo es cambio, todo está siempre cambiando. Y los que no cambian, se resisten para no hacerlo, se atascan y ya están acabados.
7490. Las conclusiones en el ámbito psicológico son el reflejo de la ignorancia. Pues, sólo el ignorante llega a conclusiones definitivas. Por lo que se ve atrapado por eso a lo que se agarra, aferra, para sentirse seguro.
Pero estar en la seguridad es otra actitud inadecuada, ya que la seguridad no existe.
Las conclusiones, la seguridad, son inadecuadas porque nos dividen del presente, del ahora, que siempre está en movimiento constante. Y estar dividido sí que es estar en la inseguridad absoluta, todo un fracaso, un peligro.
7491. Todo lo que hacemos, la manera cómo vivimos, todo es adictivo. Esa es la realidad de la vida: la comida, la cama, el sexo, el trabajo, viajar, gastar el dinero en caprichos, mezclarnos siempre con las mismas personas, etc., todo eso es adictivo, nos hace adictos.
¿Pero lo podemos descartar todo y vivir sin confusión ni desorden? Eso sería absurdo porque hemos de comer, dormir, trabajar, etc. Por lo que el problema está en cómo usamos eso que necesitamos.
La mente quiere seguridad, la necesita para poder operar con lucidez e inteligencia, por lo que siempre está buscando lo que ella cree que le dará seguridad. Así come en exceso –o come poco, o nada- porque cree que estando sobrealimentados o poco, en ayunas, estaremos seguros. Pero todo eso es la respuesta del pasado. Y nosotros para responder a los retos, hemos de encararlos en el presente que es cuando llegan, cuando están aquí en el ahora para ser resueltos.
Así que, cuando vemos que somos adictos, es cuando dejo de serlo.
7492. Cuando decimos a los otros lo que tienen que hacer, hemos de empezar primero nosotros haciéndolo posible en nuestras vidas cotidianas.
Hablar de caridad, de pureza de corazón, de lo negativo de la riqueza en los bolsillos, cuando nos reunimos con los más poderosos de la tierra –presidentes, reyes, personas poderosas, ricas e influyentes-, vivimos en un palacio, rodeados de muebles de la mejor calidad, con todas las comodidades, sin que nos falte de nada, todo eso de hablar de caridad, de pureza de corazón parece como una broma. O algo que va dirigido a personas superficiales, vulnerables por su debilidad, deseosas de pertenecer a una religión, secta, o grupo, en el que se encuentran seguras.