7210. Las amistades auténticas están envenenadas, pues son una trampa. Porque estamos atrapados como los adictos.

 

7211. Si le damos una importancia excesiva a lo que nos acontece, vamos a generarnos problemas. Porque eso quiere decir que ya tenemos un plan preestablecido de lo que tiene que ser nuestra vida.

Para que la vida tenga un sentido verdadero, hemos de vivir abiertos a lo nuevo. Y lo nuevo nadie lo ha tocado.

 

7212. Sois tan fascistas -la peor casta política- que ni tan siquiera os habéis pronunciado sobre la libertada y la independencia de Cataluña. Y eso que habéis estado allí discutiendo a favor de vuestro negocio –que eso, es todo que hacéis: materialismo puro-, donde todo está hirviendo.

Es decir, estáis quemados. Sois nacionalistas centralistas españoles, como el PP, el PSOE, etc. Los fachas estarán contentos: otro para el club de los corruptos e inmorales. Y eso que todavía no os habéis mezclado con ellos en vuestros tejemanejes y enredos que tenéis los políticos.

 

7213. Si, ya lo sé. Gracias. Pero quería que os dierais cuenta de la calaña que son.

Esto es lo que les estoy enviando, para ver si despiertan de su cuento bobalicón, de la misma casta política que ellos dicen que no quieren ser -menudo ignorantes, que quieren entrar, ya han entrado, en un  club de corruptos mafiosos y dicen que no lo quieren ser: ¿entonces para qué se hacen socios de ese club de mafiosos?-.

 

7213. Gracias por tus acertadas palabras, que me llevaron a sentirme como ante un profesor que está impartiendo una clase de derecho, de piscología, de filosofía sencilla humana, de sociología, etc.

 

7214. No hacer daño a nadie eso no es posible. Y eso el D. Lama lo sabe, ya que para defender el Tíbet, ya hace muchos años consintió que unos tibetanos fueran entrenados en Estados Unidos, como guerrilleros. Luego los desembarcaron en Tíbet, en aviones, pero enseguida los detuvieron, los desarmaron, fracasaron.

¿Podemos vivir sin hacer daño a nadie? Eso es otra ilusión, pues en el momento en que nos tomamos una medicina –antibiótico-, como su nombre indica, ya estamos haciendo daño a la vida: eliminando la parte de ella que no queremos tener con nosotros, el resfriado, la enfermedad.

 

7215. La conciencia, esa cosa particular que somos, es importante. Pero sin una buena relación con los demás, sean quienes sean, nada de lo que hagamos no tendrá sentido ni significado verdadero.

 

7216. Siento decirte, Rebeca, que no me mandes más información sobre ti. Pues no puedo ayudarte de ninguna de las maneras.

La única ayuda que te puedo ofrecer es esta: no te conviene seguir contándome esas historias tuyas, que otras mujeres como tú ya lo han intentado para sacar dinero. Estoy enterado. ¿Lo entiendes, Rebeca?

 

7217. Los escalones y los pisos, de la escalera de la liberación, son infinitos. Por eso la libertad ha de ser ahora, en este instante.

 

7218. Cuando más y más acción, es por un interés que se puede convertir en un negocio. Pero si nos damos cuenta de ese deseo descabellado, ¿qué sucede? Fin del problema. Pues en visión total de un problema está su fin.

Y si no es así, y estamos en desorden, llegará el caos que generará su orden. Y eso en realidad nuestra vida: destrucción, amor y construcción.

 

7219.  Los de Podemos acabarán como éste. Cuando vemos a los de Podemos vemos a los mismos del PSOE cuando empezaron hace unos treinta años.

 

7220. Cuando entren en la rueda de la alegría del poder, irán al Vaticano, como ha ido el amigo de ellos Evo Morales. Que trabajaban para él, y defienden a escondidas desde que están tocando el vértigo del poder.

 

7221. Otros que también son tan cretinos que dicen que ellos cambiarían el mundo. Y son tan corruptos como todos. Su jefe Rivera también tenía una cuenta enredada, que decía que no era de él. Pero es curioso como el coro de la prensa,  se pone a sus pies y silencian sus mentiras y corrupciones. ¿Un político cuándo entra en la trama, en la dinámica para conseguir el poder, puede hacerlo si no es corrupto e inmoral?

                                                                                        

7222. Cuando nosotros deseamos algo, eso no es lo verdadero. Eso es la acción del ego, del ‘yo’ y sus resultados: división, confusión.

 

7223. Nosotros somos como un cristal. Y el karma es como un rayo de luz, del sol, que atraviesa el cristal. Por eso, lo que entra por una parte ha de salir por la otra. Es decir, lo que nos llega, de una manera o de otra ha de salir. ¿Puede esta ley implacable del karma cambiar, no operar? No. Pero cuando el amor es, el karma no es, no lo notamos aunque actúe, se manifieste.

El karma del cuerpo no se puede cambiar, pues toda materia por el mero hecho de ser, se ha de deteriorar, cambiar, transformarse.