Torni Segarra

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6558. Tamara. En Internet participan toda clase de personas con lenguas diferentes, pero traducen al inglés -Google Translate, Bing Translator, etc.- lo que escriben y quieren informar.
A mí me pasa lo mismo contigo, pues al traducir lo que escribes del inglés al español, la traducción no es la real que hablamos y escribimos. Los servicios de traducción, tal vez no pueden recoger toda la variedad y profundidad de un idioma.
Por todo ello, lo que tienes que hacer es ir más allá de las palabras que no entiendes e ir a la esencia de lo que se quiere decir. Todo esto ya lo hemos aclarado en otros grupos donde hay franceses, hindúes, latinoamericanos, alemanes, etc. Todos interpretan lo que se quiere transmitir.
Respecto a lo que tú pretendes decir en tu blog, etc., y lo que te he escrito antes, lo vuelvo a repetir: ‘Ya sé lo que quieres: poner orden. Y para ello, has de empezar tú por tener orden en tu vida.’
 
6559. La psicología de la mujer está dañada por el hombre. Y la psicología del hombre está dañada por la mujer.
Todos estamos enfrentados, vivimos confrontados, ¿no se dan cuenta? No solamente el hombre contra la mujer y viceversa. Estamos contra los animales, contra las hierbas, contra el calor, el frío, contra la suavidad. Estamos contra los religiosos, los que no lo son, contra el diferente, los que no nos caen bien. Y esa es la historia de la humanidad, de los hombres.
Así que el problema no es la mujer ni el hombre. El problema es mi condicionamiento divisivo, conflictivo, debido al miedo que tengo a los demás. Porque sabemos que hacen lo mismo que nosotros: luchar, competir, destrozarnos de mil maneras.
 
6560. La unión física es indiscutible; de lo contrario ya no existiríamos. El problema es psicológico. Es del pensamiento, del ego, que se diferencia de otro ego. Y de ahí surge la división y el conflicto.
¿Cómo ha llegado eso a suceder? Podemos recurrir a mil explicaciones. Pero el hecho que queda siempre es el mismo: división y conflicto. Por lo que hay que ver si podemos comprenderlo, y liberarnos. E ir más allá de toda esta desdichada manera de vivir.
 
6561. Primero es la conciencia, la percepción. Y con el tiempo, con la repetición de todo lo que veíamos y nos sucedía, millones de veces, millones de años, se generó el recuerdo creando el pensamiento.
¿Dónde se sostiene la conciencia, la percepción, el pensamiento –los recuerdos, lo que creemos que ha de llegar-? No lo sabemos. Unos dicen que en el espíritu, en el alma, en la mente universal. Pero eso, no tiene ningún valor para nuestras vidas.
Lo que tiene valor, sentido, es: ¿Qué hacemos con nuestras vidas? ¿De qué manera vivimos nuestras vidas cotidianas? ¿Cómo es la relación con las personas con quien convivo y me relaciono? ¿Vivimos una vida de contienda, de lucha, de enfrentamiento con los demás, de conflicto, crueldad y violencia?
Y por eso, es que estamos en conflicto con nosotros mismos, internamente. Que al exteriorizarse ha generado este mundo tan desordenado, confuso, caótico.
 
6562. No somos nada. Y nos conviene no ser nada. Así somos más ligeros, limpios, inocentes.
 
6563. Parece mentira pero somos como una bolsa de plástico reciclada. Eso queda claro. Lo que no está tan claro es, ¿para qué ha sido creado el universo, qué sentido tiene la vida, que no podemos comprender, donde nadie ni nada no tiene importancia?
¿Para qué todos los animales devorándose, reproduciéndose, y haciendo lo que hacen si no se enteran de nada? Todo parece como un juego de ordenador para divertirse, estar distraído, o pasar el tiempo. Pero eso quiere decir que algo lo creó. Por supuesto, que nada de lo que digamos tiene ningún valor.
Por eso, cuando alguien quiere describir lo que es la verdad, el universo, etc., se le responde: ‘Eso no es, eso no es.’. Y por muchas definiciones que se hagan, siempre es: ‘Eso no, eso no es.’
 
6564. Por eso cuando uno quiere expresar lo que es la realidad se le dice: ‘Eso no es, eso no es.’ Y cuando cada vez que sigue intentando describirla, se vuelve a decir: ‘Eso no es, eso no es.’
 
6565. ¿Podemos ayudar realmente a los otros si nosotros no estamos en armonía, no amargados, si somos celosos, con deseos de vanidad, de seguridad, si tenemos miedo?
Para ayudar a alguien, antes tengo que poner en orden mi casa. ¿Si no qué sentido tiene? Si tengo una vida confusa, en desorden, ¿cómo voy a poner orden –que es hacer el bien-?
 
6566. Desde hace mucho tiempo cuando se muere alguien que conozco, me digo: ¿Qué ha pasado con el gato, el perro, el caballo, que se han muerto? Pues la misma muerte de un animal, que la asumimos con toda naturalidad, es la misma que la del vecino, el pariente, la esposa, el hijo, el padre. Aunque nosotros lo hemos complicado todo.
 
6567. La muerte es el orden. Porque es precisa, radical, implacable. Cuando actuamos como la misma muerte es cuando estamos en orden, porque el pensamiento, el ego, no puede operar.
 
6568. El problema del médico es que las personas -que somos sus pacientes- nos hemos de morir. Por eso, hasta que el médico no lo entiende completamente, se puede volver loco.
 
6569. ¿La cobardía no es miedo? Por eso exigirle a una persona que tiene miedo, que sea valiente, es una crueldad. ¿Dónde hay esfuerzo, forzar a alguien, hay amor?
 
6570. Quizás lo que es bueno, siempre lo es.