* «Sé igual que la roca contra la que sin cesar se estrellan las olas. Esta se mantiene firme, y en torno a ella se adormece la espuma del oleaje’’. Marco Aurelio, Meditaciones.
Una roca no es una persona.
* «La razón de la soledad: ¿Quieres tornar a tu desierto? Tengo que aguardarme a mí mismo; cada vez tarda más el agua del pozo de mi yo en subir al nivel, y padezco sed más tiempo del que me dura la paciencia. Por eso vuelvo a la soledad, para no beber en las cisternas que están para el uso de todos. En medio de la multitud vivo como la multitud y no pienso como yo pienso; al cabo de algún tiempo tengo presentimientos de que me quieren desterrar de mí mismo y robarme el alma, y me pongo a odiar y a temer a todo el mundo. Entonces tengo necesidad del desierto para volver a ser bueno.» Friedrich Nietzsche, Aurora.
Toda esa descripción, es lo mismo que le pasa a toda la humanidad. Aunque cada cual a un nivel más profundo o no.
* ‘’ Solo hay personas en tu imaginación, Enrique. ¡Todo se cae! ¡Hasta la ilusión de que le estoy escribiendo a Enrique! ¡Atención!’’-
Pero el ‘yo’, tu ‘yo’, el de todos, no se cae definitivamente -cae y vuelve-.
* También se le podría intentar explicar de su actitud negativa.
* Uno de los grandes problemas de la humanidad es que muchas personas están escolarizadas, pero muy pocas están educadas. Thomas Moore.
Aquí hay un problema: Según el educador, así será el educado.
¿Cuántos educadores son honestos, no corruptos ni inmorales, no egoístas crueles? Capaces de ser una luz para sí mismo; y una luz para los demás.
* ‘’Desde mi punto de vista… Con la mente se tiene la capacidad de inventar, pero su capacidad de invención está condicionada o limitada como parte de la existencia o del cosmos, y no hay una correspondencia lineal o formal. Por ejemplo, los cazadores de brujas de la Inquisición, los juicios de ordalía. Y no es una crítica a la Inquisición, solo un ejemplo de cómo se distorsiona la realidad o el mundo físico-biológico-humano para hacerlo encajar en una idealización o doctrina’’.
Todos distorsionamos la realidad que no nos conviene. Para imponer nuestra realidad.
Cuanto más poderoso es uno, mayor es la capacidad de imponer su realidad. Ahí están los vencedores de las guerras -que después de luchar y luchar-, uno impone su realidad.