Torni Segarra

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* Cuando a uno le agreden de palabra o acción. Si nos damos cuenta que, el observador es lo mismo que lo observado. No habrá problemas. Es decir, el agresor y el agredido, son lo mismo. Dos personas, programadas para defenderse para poder sobrevivir.

Cuando alguien hace daño a otro, hay un motivo oculto o manifiesto. Lo mismo que, cuando uno se defiende. El motivo es la supervivencia.

* Gracias, por su oferta. Pero, por mi manera de vivir, no necesito tanto dinero. No tengo ningún proyecto, que necesite tanto dinero.

* La división interna, es la raíz de todo el desorden. Es lo que hace posible, el miedo, el odio, la ausencia de belleza. Cuando hay división las puertas del infierno se abren. Y llegan todos los males y miserias.

* Cuando vemos una persona, percibimos unas vibraciones -energía-, que nos informan sobre si es compatible con nosotros: si nos transmite confort, desasosiego, etc. La comunicación no verbal en principio, es la verdadera. Pues, las palabras son adecuadas para poder saber quién es, cómo es. Uno puede decir, que nos ama. Y al instante siguiente ya no nos ama.

* ‘La ilusión surge cuando hay deseo. Cuando quiero algo’.

Hasta que nos damos cuenta que el deseo, no puede colmar nuestra necesidad de placer. El ver esa falsedad de la ilusión del deseo, es lo que hace que llegue el orden: el fin del conflicto.

* El sabio, el inteligente, no lo es para razonar. La sabiduría, la inteligencia, llegan como un rayo y su trueno.

* Los que cuidan de la salud, son muchos. Primero, el hospital. Luego los que lo dirigen sin ser sanitarios. Luego están los médicos, enfermeras, celadores, los conductores de ambulancias, las personas de limpieza, las camareras. El electricista que se encarga de que funcione adecuadamente la calefacción, ascensores, etc. Todos los que proveen la comida, y todo lo necesario para que se pueda cuidar nuestra salud, de la salud de las personas.

* Nosotros somos los herederos de la humanidad. Desde hace un millón de años. Así que, en el cerebro, en nuestras mentes, está todo el conflicto, la confusión, el desorden. Que nos hace brutales, agresivos, dispuestos a lo que sea para vencer a los demás. Para triunfar, ganar, vencer. Con todo el precio del horror, de la miseria, de los traumas del miedo.

¿Podemos ver, si ese paradigma del vencer, del imponerse a los demás, de la violencia, puede cambiar? Con su corrupción, inmoralidad.

* Nosotros estamos programados para sobrevivir y reproducirnos. Los animales también tienen la misma programación. Pero, ellos no dudan ni tienen problemas morales. Para poder conseguir lo que sea -las presas, otros animales- para subsistir. Nosotros, el intelecto, al inventar el amor, la compasión. Nos hemos obligado a hacer las cosas, evitando el menos dolor y sufrimiento. ¿Es adecuado ser amoral, vivir como viven los animales: en una única dirección para poder sobrevivir?

* Por negocio. El negocio de la vida: subsistir como sea. El amor nada tiene que ver con el de las parejas. O tal vez, sí. Ellos lo sabrán.

* Porque lo que tenemos que hacer hoy, no le damos importancia si no lo hacemos. Cuando la casa está ardiendo, todo sucede en el ahora: el pedir ayuda. la acción, el miedo, los lloros.