* Sí, sé lo que pretendes decir. Pero, al igual como lo que escribo, que puede haber alguien que está saturado de lo que digo. Y no quiere más -de momento-.

Es como la comida: cuando uno ha comido, está lleno. Lo que le den de comida, no la quiere. Pues, le perturbaría el cuerpo, si equilibrio. Y cada cual, tiene sus límites, medidas, que son a la vez personales. Y comunes a toda la humanidad.

* Cree que está ahí seguro. Como los gatos, perros. Pero la seguridad no existe. Sólo existe la total y absoluta inseguridad.

* No soportamos la soledad, porque en ella nos vemos tal cual somos. Y somos abominables, crueles, salvajes.

Pero, así y todo, soportamos la soledad. No hay otra manera de vivir. Es el destino, la fatalidad de los seres humanos. Como los animales, tienen sus problemas, su destino, su fatalidad.

* ‘Para vivir con las cenizas de la soledad, debe haber una gran energía y esta energía viene cuando no hay más temor’.

¿Es eso posible? No lo sabemos. Si no pasamos por eso. Pero, ¿qué es eso? El temor, el miedo, que no se puede erradicar. Y si no se puede erradicar, eso ha estar siempre con nosotros, como un vecino. ¿Cómo se convive con un vecino? Con amabilidad, educación, paciencia, buenas maneras, ayudar en lo que se pueda. Para que, no haya división, conflicto, guerra.

* ‘Mi pregunta es ¿qué grupo o quién se beneficia del presente virus corona?’

No hay respuesta. Y a la vez, hay muchas.  Primer beneficio, esa manera acelerada de vivir -ansiedad, estrés- se ha detenido. La polución de las ciudades, ha desaparecido. Otro beneficio, cada cual estamos sufriendo un examen, En el que nos vemos realmente, cómo somos, quiénes somos. Porque, además de la epidemia física, está también la mental. De miedo, terror, pánico.

* ‘Otro amanecer… otra oportunidad para ser feliz’

Todo depende de lo que tenemos dentro, entre manos. Si hay orden, la dicha, la alegría, lo nuevo estará en nosotros.

* La elección es confusión, oscuridad, desorden. Cuando llega la claridad, del ver realmente lo que es, lo que está sucediendo, es cuando no hay necesidad de opción de elegir.

* Si hay libertad, lo es para todo lo que haga falta. Pues, la libertad no tiene normas ni leyes, ni prejuicios, ni miedo.

* ‘Tu creencia en Dios no tiene valor’.

Para el que cree en su dios, tiene un valor inmenso. Que le hace creer que es su motor y su combustible. Dios, para ellos es un manantial inagotable: los envalentona, su vida gira en torno a su dios y a la organización que han creado y les representa.